EDUARDO ARROYO (1937)
El pintor Eduardo Arroyo nació en Madrid en 1937. En 1958 se trasladó a vivir a París. Personaje polifacético, ha ejercido de periodista (es Licenciado en Periodismo) y de escenógrafo. Ha publicado varios libros, entre ellos una historia novelada de boxeo, en torno al púgil panameño Al Brown, que lleva por título “Panamá” Al Brown. Por su actitud crítica frente a la época anterior a la democracia, y el hecho mismo de residir en París, se convirtió en un desconocido para sus compatriotas. Se dio a conocer internacionalmente a partir de una gran exposición suya en el Centro Pompidou de la capital francesa (1982).
En abril de 1997 le envié a su estudio madrileño una entrevista por escrito. Junto a las respuestas, venía una carta (Madrid 18/4/1997) donde reconocía en un pasaje, digno del ostinato rigore de Leonardo, “las preguntas son más vivas que las respuestas”.
¿El artista artistea para individualizarse y salir así de la masa, esto es, de la barbarie?
Para atenuar su propia barbarie.
¿Acertaba Mallarmé cuando decía que los fragmentos son los testimonios nupciales de la idea?
Sin ellos no hay boda.
¿A veces pintar viene a ser como el tocar, que todo puede convertirse en sexo a poco que se toque?
No me he divertido nunca pintando.
¿Quién habla de victorias? Sobreponerse, eso es todo. ¿O no?
Sí. Sobreponerse a las victorias.
Es absurdo que la mayor ambición de los artistas que rondan los 25 años de edad sea entrar en los museos. ¿No es más propio de esa edad que sus pesquisas consistan en hacer desaparecer del globo todos los museos del mundo?
Sobre todo los museos tal como están concebidos hoy.
¿Pintar es iniciar una obra sobre una idea básica –un punto de apoyo–, y a partir de ahí todo va creciendo en su derredor, que es como decir en su crecedor?
Sí, es exactamente eso, pero a veces lo que va creciendo es la desolación.
¿Hacer arte consiste en explorar dominios que no se comprenden, que se nos escapan?
Debería ser así.
¿Sería capaz de definir la vida, entre otras cosas, tal como la definía Cioran: “esa chulería de la materia”?
Francamente, nunca he sabido definir la vida.
¿El arte es eso que se hará mundo, y no lo que ya lo es?
Eso sería ideal, pero no es así.
Muchos tienen el delirio de grandeza de creerse locos egregios, y son solo chiflados...
Es mejor estar chiflado.
¿Querer sintetizar la realidad es una manera de acercarla al sueño, al arte, a la poesía?
Tendría que pensarlo.
[siguiente personaje Corín Tellado: 7-7-2014]