Lluis Bassets

Populismos

Por: | 28 de febrero de 2013

No todos los populismos son iguales. Ni siquiera todos los populismos son igual de nocivos. Más aún: hay sistemas políticos, perfectamente democráticos, incluso entre los más democráticos del mundo, en los que no se puede concebir una campaña electoral o simplemente la acción política sin alguna dosis de populismo. Hay un populismo totalitario y xenófobo, pero también hay un populismo democrático y cosmopolita. Hasta tal punto es así que democracia y populismo suelen ir de la mano. El populismo busca vencer en las urnas y tiene pocos instrumentos mejores que las urnas para expresarse.

Al final, es siempre una reacción contra las élites. En ocasiones por motivos espurios o ante unas élites literalmente inventadas. Fue el caso del nazismo con la conspiración judía universal. Pero en otras por motivos bien tangibles y racionales, ante unas élites encastilladas en sus privilegios, que se niegan a negociar concesión alguna. Este es el populismo de Beppe Grillo y de sus estridentes expresiones contra la casta política italiana.

Cuando se dice que dos populismos, uno de derechas y otro de izquierdas, han conducido a la ingobernabilidad de Italia, nos acogemos a un mensaje simplificador, en blanco y negro, que lo amalgama todo. Es lo mismo que sucede con el euroescepticismo. Hay un euroescepticismo de derechas, como es el británico, que quiere menos Europa, cuanta menos mejor, como hay un euroescepticismo de izquierdas, más hastiado que escéptico, que rechaza la política de austeridad a toda costa, sobre todo cuando en nada ayuda a que repunte el crecimiento y la creación de puestos de trabajo, pero que estaría encantado con más Europa, si Europa significara políticas sociales y crecimiento.

Este rechazo a la política europea realmente existente no es en realidad un rechazo a Europa, sino a la Europa de Angela Merkel y a la sumisión de la Comisión a la Europa de Angela Merkel. Y conjuga muy bien con una casi obligada dosis de populismo: en Italia, como en España, se aprueban las medidas de rigor en un plisplas, incluso cuando hay que realizar reformas legales en profundidad, hasta tocar la Constitución, pero no hay manera de mover el statu quo o de sacar ni un solo privilegio a la casta política.

Rechazo de la Europa del rigor y de la recesión y rechazo de unas élites políticas que se perpetúan en el poder y sacan provecho personal de la representación de los ciudadanos, con las dosis estratosféricas de corrupción incluidas. Esto es el Movimiento 5 Estrellas (M5E) que acaba de triunfar en Italia, un fenómeno muy italiano pero que sintoniza perfectamente con lo que está sucediendo en el conjunto de Europa.

Es evidente que algo así no gusta a los mercados. Tampoco a la Comisión Europea, que acogió con glacial sequedad los resultados. Tampoco hay entusiasmo alguno en los grandes medios de comunicación, que recibieron con graves y solemnes palabras las noticias electorales. ¿Ingobernable Italia? Vamos a verlo ahora. Con esos bueyes hay que arar y los italianos suelen ser muy buenos arando en los pedregales políticos.

La responsabilidad, en todo caso, no es de los votantes, ni menos de los electores del M5E, sino de quienes han tenido las palancas del poder hasta ahora, Mario Monti incluido, y no han sido capaces de hacer buen uso de ellas, hasta perderlas en el último envite electoral. Gritar ahora populismo, populismo y demagogia, demagogia, sirve para poco, o incluso sirve para aumentar el divorcio entre esas élites en retroceso, casi derrotadas, y el movimiento en ascenso.

Hay que tomar nota de la temible modernidad del fenómeno. Sobre todo quienes quieran aprender la lección para no verse arrollados por fenómenos similares en otros países, España sin ir más lejos. El M5E responde a un cambio generacional. El 40% de los jóvenes les han votado. Sus diputados y senadores son los más jóvenes de las dos Cámaras. Han colocado a más mujeres que nunca en el Parlamento. Pertenecen a unas cohortes de edad que no se sienten representadas por la vieja política.

Como corresponde al cambio generacional, hay también un cambio tecnológico y social de por medio. Estos jóvenes votantes y sus representantes utilizan las redes sociales, que se han convertido en instrumentos de difusión del poder y por tanto en medios democratizadores. La sociedad política se hace más horizontal, menos jerárquica, organizada de forma descentralizada y en red. Está en ruinas la mediación política tal como la hemos conocido, a través de grandes estructuras partidarias e ideológicas que secuestran fácilmente la voluntad de los ciudadanos.

El M5E es parte del cambio geopolítico que está transformando el mundo y lo grave de la vieja cultura política es la sorpresa con que ha recibido su aparición de la noche a la mañana como árbitro parlamentario y por tanto como vencedor en las urnas. No es antipolítica, es una nueva forma de hacer política.

Hay 10 Comentarios

Sí a la política, no a los políticos que no hacen política sino partidismo, que es otra cosa.

El populismo como bandera y mecanismo de promoción para alcanzar el poder lo utilizan todos los partidos.
Los populistas de izquierda cuando alcanzan el poder, pueden conseguir éxitos sino se empeñan en destruir el modelo económico (ejemplo Brasil), si derivan hacia las nacionalizaciones y la adjudicación al estado de la administración de capitales y empresas, terminan en el desastre (ejemplo Venezuela).
De todos modos, yo que no ejerzo el derecho del voto, porque hace mucho no creo en políticos ni partidos, si tuviera la disyuntiva de verme obligado a hacerlo, me quedaría con los jóvenes, en particular si me convencen de que van a edificar una meritocracia. Los políticos de profesión, los enviaría a todos al INEM.
Pericles

Demo = pueblo, Cracia = gobierno; Populi = popular; Ismo = infinitivo de un vocablo, lo contrario de finito, es decir, lo que no tiene límites. Todo se puede resumir en: gobierno = circo, repleto de payasos. Y el pueblo, como espectador, aplaude a los payasos. Espero que en algun momento se produzca el salto cualitativo que termine con los payasos de la política.

Estoy deseando que haya nuevas elecciones y el M5E consiga la mayoría. Todas las discusiones sobre buenas o malas intenciones, buenos o malos populismos son creo que como el amor platónico, irreales y meros sucedaneos virtuales o mentales...En fin, que si alguna vez llegan al poder es cuando veremos si es un movimiento polulista o no. Mi opinión es que lo son y que el morrazo sería tremendo (a no ser claro, que desilusionen a sus votantes). Pues entre otras cosas, esa modelo de democracia asamblearia via internet y redes de telefonía no es practicable. Exactamente igual que no es practicable una medicina asamblearia. Por cierto, lo que tengo ganas de que gane el M5E y asuma el poder lo digo muy en serio. Para Italia lo mejor sería que se dieran cuenta cuanto antes de si realmente eso va a funcionar o no (yo estoy convencido de que no), seguir mareando la perdiz solo hace que empeoren las cosas. Además, no vivo en Italia así que lo que en mi opinión iba a ser un tremendo morrazo no me tange. Por cierto, creo que los que creen en el M5E al menos estarán de acuerdo conmigo en este deseo de que ganen, para así salir de dudas. Además, es mejor que el experimento se haga en otro país.

Vaya, vamos avanzando a medida que los defensores del establishment y el pensamiento único son sistemáticamente desautorizados por los pueblos cuando estos pueden expresarse. Ahora ya conceden que hay un "populismo" y un euroescepticismo tolerables, siempre que se limiten a denunciar las criminales políticas neoliberales de austeridad y no cuestionen el otro gran diktat de la subordinación de las naciones europeas al engendro artificial y antidemocrático de la UE, en cuyo caso serían "xenófobos", "de derechas" y "totalitarios". Asombroso. Señores dictadores europeístas, me gustaría poder calificarles diciendo que "progresan adecuadamente", pero veo que aún les falta mucho para entender la lección del respeto a la democracia y la voluntad de las naciones soberanas, por lo que ciudadanos y pueblos tendremos que seguir recordándoselo y dar todo nuestro apoyo a los "populistas", como acaban de hacer los italianos en una encomiable muestra de dignidad nacional.

Fenómenos políticos de real o aparente carácter horizontal ya ha habido en otras épocas de la historia. La revolución francesa, y más recientemente la revolución rusa comienzan siendo horizontales, pero tan pronto que sus líderes se hicieron con poder impusieron verticalidad a través de la violencia. No conozco nada del M5E, lo que he leído no me inspira ninguna confianza en sus……, miembros. Habría que estudiarlo en profundidad, ¿Por qué sus miembros deciden dedicarse a la política? ¿Pertenecían antes a alguna fuerza política, a cual, con que ideología? ¿Por qué deciden hacer política integrándose en el M5E? ¿Se conocían previamente o como dicen fueron seleccionados enviando una especie de CV? ¿Están innovando, proponiendo nuevas cosas, nuevas ideas, proponiendo una nueva forma de gestión política o simplemente han leído demasiado de fenómenos de otras épocas como los dos citados? ¿Son conscientes de que hemos llegado hasta aquí gracias a sistemas clásicos democráticos de gestión política? ¿Qué fines persiguen?
Según Northcote Parkinson una de las características y a la vez causa de los procesos de decadencia es la promoción de la gente más incapaz a los altos puestos de gobierno. Que vivimos una época de decadencia es indiscutible, lo que no se todavía es si los miembros del M5E son capaces o incapaces.

Me llama mucho la atención lo del cambio generacional. España es un pais en claro proceso de envejecimiento, y por tanto, tendrá mayor tendencia a ser conservador en muchos aspectos. Esto es así porque a la generacion del baby boom todavia le queda mucha cuerda. Los paises con una gran poblacion de jovenes y que están desarrollandose son un ejemplo del dinamismo ( para bien y para mal) de los jovenes. En el caso español , en politica y en economia, hace falta sangre nueva, sin conexion con los partidos clasicos. España tiene potencial, igual que Italia. Solo hay que detectar qué sobra y qué impide el desarrollo de la población, y facilitarlo (gravar menos a los negocios autonomos que empiezan, fortalecer la industria avanzada y la educacion, facilitar la creacion de campus de investigacion que converjan el avance cientifico y su aplicacion, atraer la financiacion privada en este sentido... todo esto por supuesto, llevaria a recuperar una cultura del esfuerzo largo tiempo olvidada, pero seria un esfuerzo con recompensa). Es evidente que los paises mediterraneos tienen pendiente dar ese salto, y solo podran darlo si dan esa oportunidad a una poblacion joven y bien preparada, además de incorporarla tambien a la toma de decisiones sobre su pais de forma efectiva.

Vivimos en una sociedad donde la falta de valores esta presente por desgracia por eso el transporte de mercancias es clave para que el populismo deje de tener un papel clave en esta sociedad sin valores

Y por lo demás, la estela de Monti debiera servir a alguno para poner sus barbas a remojar. El empotrado en el gobierno italiano de la euroausteridad y el rigor merkeliano, ha salido tan mal parado que no sé siquiera si en el Inem italiano encontrará cabida. En el caso español, quizás volvamos a ver a Rajoy en las puertas de las oficinas del paro, pero esta vez no haciendo campaña populista y demagógica, que no es otra cosa que ofrecder a la gente lo que pide, a sabiendas de que no lo dará. Demagogia populista mariana en estado puro. Y hasta es posible que se encuentre en la cola, en la del desempleo, claro, con su 'ex'. Su ex tesorero, quiero decir.

Por un lado, lo de populismo siempre me ha sonado a a oferta del bueno, bonito y barato de toda la vida y que las más de las veces se quedaba en malo, feo y caro. Lo fácil es ofrecer lo que la sociedad anhela, aunque luego el deber de cada uno lo impida. Es el caso de Rajoy. Por otro lado, se me plantea la duda de si quienes acusan de populismo no son más populistas que los populistas emergentes. Quizá cuando gobiernen éstos últimos sabremos si lo son más o menos que aquellos, y si el buenobonitobaratoyfácil de unos es mejor o peor que el de los otros.

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es periodista. Director adjunto y columnista de EL PAÍS. Tiene a su cargo la edición de Cataluña.

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