"Tu hijo ha pegado a un compañero en el patio". ¿Qué hacer cuando el profesor te advierte de este comportamiento, o presencias cómo a tu retoño se le va la mano (o los pies, o la boca...) con cierta frecuencia? Ignasi Bau, maestro y psicopedagogo, ofrece algunas claves para tratar estas situaciones.
Conviene tener en cuenta varios factores como la edad del niño y el contexto en que se dan estas situaciones. En general, podríamos considerar que estas conductas, en momentos concretos de la evolución del niño, forman parte del crecimiento y de la adquisición de habilidades sociales.
¿A qué edad se empieza con esta conducta?
Hay un periodo que va de los dos a los cuatro años y otro que es entre los 11 y los 12 años. En el primer periodo dicho comportamiento es resultado de la falta de estrategias para resolver conflictos, la escasez de lenguaje verbal y la poca tolerancia a la frustración.
En el periodo preadolescente, el niño vive una etapa de cambios cognitivos y fisiológicos que no sabe cómo gestionar. La respuesta a esta situación de transformación puede ser en forma de agresividad física o verbal.
¿Qué hay que hacer?
En edades tempranas debe “observarse” cualquier situación antes de reaccionar precipitadamente. Podemos entender este comportamiento como parte necesaria del proceso de crecimiento y parte fundamental del proceso de socialización. Tenemos que ayudar al niño a verbalizar aquello que le pasa. Hay que irle proporcionando herramientas e indicarle diferentes caminos para solucionar situaciones comprometidas. Con el desarrollo del lenguaje, hacia los cuatro años, debería reconducirse este comportamiento.
¿Por qué se tiene esta conducta?
- Incapacidad de resolución de conflictos.
- Falta de verbalización y sentimiento de frustración.
- No limitación de conductas en casa. Ausencia de normas.
- Actuar por imitación (agresiones físicas y/o verbales en la familia).
- Separación de los padres (no entendimiento).
- Muerte de un ser querido (parte del proceso del duelo).
- Nacimiento de un hermano (celos)
- Cambio de colegio o mudanza de casa (alteración de las rutinas).
¿Qué hay que hacer cuando un niño vuelve de clase y dice que le ha pegado un compañero?
Asegurarnos de que sea cierto y valorar la situación en su justa medida. Intentar averiguar el motivo que ha provocado el conflicto, buscando la verbalización de los hechos. Ser prudentes en la reacción para no provocar una respuesta negativa que lo único que haría sería reforzar este tipo de comportamientos. Dar alternativas para la resolución de situaciones futuras similares. Educar en valores: el respeto, la tolerancia, la amistad, son las bases para la convivencia en sociedad.
¿Qué herramientas y alternativas propone para los niños?
- Mantener la calma y no responder a su agresividad con la nuestra (se reforzaría esa actuación).
- Elogiarlo cuando juegue y se comporte adecuadamente (refuerzo positivo). Reforzar los comportamientos adecuados con muestras de cariño.
- Proceder siempre de manera sistemática.
- Cuando el pegar forma parte de una rabieta, no permitir nunca que consiga su propósito por ese procedimiento.
- Ayudarle a verbalizar estas situaciones.
- Darle estrategias, recursos que le permitan gestionar situaciones de conflicto.
- Decirle "no se pega", pero nunca decirle "ya no te quiero".
- Educarle desde la estimación, desde la reflexión (valorando todo el pack: qué ha provocado la situación, el por qué, y la reacción final).
Actualización: A la vista de algunos comentarios, he cambiado la redacción del primer párrafo, que daba lugar a confusión, para aclarar que este texto trata principalmente de qué hacer con los niños que pegan. Para los interesados en el tema de los que reciben agresiones, tenemos previsto tratar el tema en el blog próximamente.
Hay 64 Comentarios
Hola Felix, yo tampoco soporto a los abusones, simplemente en un caso como el descrito puedes tirarle la arena a la madre, puedes volverte a casa y "enfadarte" con tu hijo por no haberse defendido, puedes regañar a la niña abusona, puedes hacer diez mil cosas. Lo que no puedes hacer es tirarle tu la arena a una niña. Hasta los niños abusones de 5 años son niños de 5 años, y un adulto no deberia tirarles arena a los ojos. De todos modos creo que opinas como todos. Saludos
Publicado por: Manuel B | 26/05/2011 9:50:46
Manuel b, efectivamente suelo ser tolerante, pero sufrí de pequeño agresiones en el cole y es un tema que conozco bien .Cole religioso,56 alumnos por clase, todo tíos, los curas ni se metían ni se enteraban y si podían sacudían al que tenían más cerca, no al agredido.Eché de menos muchas veces algún hermano mayor y no tener que andar corriendo para que no me cascaran abusones.Tengo especial manía a los abusones porque donde hay niños pegones al final todos los niños "normales" se malean y por imitación, acaban tambien pegando a los débiles y hundiendo su autoestima.Cuando los padres se enteran es demasiado tarde muchas veces
.Yo le hubiera tirado primero la arena a la madre eso si por dejar a la niña agredir impune pero el niño que agrede debe saber que ese comportamiento es intolerable y si mami le rie la gracia, tiene que ser un extraño quien haga su trabajo y humille al agresor delante de sus víctimas para que vea lo que se siente.
Publicado por: felix | 26/05/2011 9:19:14
Para empezar, soy madre de dos hijas tranquilitas, que alguna vez, han "cobrado". Creo que a los hijos hay que enseñarles a defenderse, esto es, a repeler una agresión. Puede ser parando el golpe o, si son más grandes, verbalmente (frases tipo "a mí no me toques"). Y luego, decírselo a la seño. Creo que es importante que tanto el agredido como el agresor entiendan el mensaje de que "ha habido una torta que me ha cogido de improviso pero no te voy a dejar que me des más". En cualquier caso, lo de darle "el doble de fuerte" o "antes que te den, da tú", creo que no es la mejor manera de educar a un niño para la convivencia. Insisto, y dejarse avasallar, tampoco. Por otra parte, cuando en el parque veo que hay un niño "abusón" sea más grande, igual o más pequeño (de todo hay), observo a ver qué hacen mis hijas y, si la situación no se resuelve, me acerco a ellos antes de que "pase nada" y pongo en mi boca lo que me gustaría que mis hijas aprendieran a decir a niños como éstos, por ejemplo,"el tobogán es de todos" etc. Si la cosa pinta mal no tengo reparo en sugerir a mis hijas cambiar de juego. A veces, lo más inteligente es evitar un enfrentamiento.
Para "madre": no es fácil aconsejar en un post. Habría que saber muy bien qué situaciones son las que provocan que tu hijo pegue, si ha habido una "ofensa" previa o no etc. Hay que distinguir entre agresividad y destructividad. A veces, cuando se etiqueta a un niño de "pegón", a él mismo le resulta muy difícil salir de ahí. Su impulso de pegar, a lo mejor y dado que ocurre cuando no está contigo, tiene que ver con su malestar por sentirse solo, puede estar relacionado con el apego...; en cualquier caso, cuando él pega lo hace "gobernado" por otra parte del cerebro distinta de la que tiene alojada tu mensaje de "no se pega"...; en fin, demasiado largo como para un post. Si te interesa que lo veamos más tranquilamente, puedes mandarme un correo a [email protected].
Un saludo
Publicado por: educArte | 26/05/2011 9:19:11
Hola! Yo creo que veis el problema dese un punto distinto al que es. Soy instructor de artes marciales aunque no entreno a niños. Un compañero mío sí y yo sencillamente alucino lo que consigue este entrenamiento en los más pequeños (a partir de 4 años).Los padres suelen apuntarlos cuando no queda más remedio: han sido agredidos por compañeros, autoestima por los suelos, algunos no abren ni la boca, chicas acosadas por pandillas que les amargan todos los recreos. Les pegan sólo por pegarles, no les gusta sus jetas o lo que sea. NO TENEIS NI IDEA DE LO QUE SE HA CONVERTIDO LOS COLEGIOS HOY EN DÍA. ¿Pensáis que vuestros hijos os lo cuentan todo? tururú. Hemos tenido de todo en el Dojo desde agredidos hasta agresores y todos sin excepción aprenden comportamiento, disciplina y respeto a los demás tanto a su maestro (adultos) como a sus compañeros. Cuando empieza un niño que es más nervioso por diversas circunstancias y a la segunda semana se da cuenta de que niños de la mitad de envergadura los superan ámpliamente en técnica y rapidez, aprenden una lección de la vida fundamental: LA HUMILDAD. Los niños de baja autoestima pegan un cambio que ni los reconoceríais porque no se enseñan artes marciales (tradicionales) para atacar a nadie sino para que cuando te ataquen poder reaccionar adecuadamente y salvar una situación potencialmente peligrosa para su integridad. Y no hay que olvidar nunca que lo más peligroso para la autoestima de un niño es una madre sobreprotectora ya que los niños acaban desarrollando sus estrategias sin la necesidad de ninguna intervención superior. Oriente es un ejemplo de madre completamente equivocada su hijo nunca será capaz de solucionar sus propios problemas y eso de agredir a una niña de 5 años echándole arena es sencillamente DENUNCIABLE al defensor del menor y a servicios sociales. En fin, INTERVENID cuando haya un peligro irreparable lo demás dejadlo a vuestros propios hijos que lo solucionaran ellos. Si queréis más seguridad apuntadlos sin complejos a algún arte marcial tradicional JUDO, KARATE, TAEKWONDO o incluso BOXEO infantil: Alucinareis.
Publicado por: Polloloco | 26/05/2011 2:08:57
Hola, totalmente de acuerdo con occidente y la mayoria de los demas. Felix, me ha extrañado tu comentario, por otros que te he leido anteriormente no me pega que te parezca bien que un adulto le tire una pala de arena a la cara de un niño. Mas bien me parece de locos. Y no es tolerancia barata, yo no digo que fuera a tolerar que pegaran a mi hija dos veces seguidas en el parque, pero seguro que al niño o niña pegon le dejaba al margen de mi reaccion.
Publicado por: Manuel B | 26/05/2011 1:44:00
Sin duda, la buena "hostyjkh" es una buena opción desde el punto de vista del universo de los niños. Es lo natural bajo el prisma acción-reacción que se ha mencionado, y es lo que se ha practicado y sigue practicando desde el inicio de los tiempos, también por supuesto entre los adultos, aunque de forma más sofisticada tales como los ejercicios de poder de jefes con subalternos o gorilas con chapita frente a gente corriente. Lamentablemente, ese escenario no contempla qué solución darle al caso del niño que es más pequeño, más indefenso, más pacífico que los otros, y puede llevar a un poderoso sentimiento de frustración y humillación. Si la consigna es "apúntate a kárate o taekwondo", también es válido ponerles un guardaespaldas o darles unos cuantos billetes para que sobornen a sus agresores. Si los padres de niños especiales, por vivir una complicada situación de desventaja física o psicológica, están especialmente vigilantes para mediar en los conflictos que los niños pueden tener, no entiendo cómo nosotros no podemos encontrar una mejor solución para los nuestros que volver a los instintos más primarios.
Bajo ese enfoque, nosotros como adultos también deberíamos invertir mucho de nuestro tiempo en el gimnasio y en prácticas de tiro, pero optamos por dedicarnos a otras actividades que consideramos más interesantes o constructivas, y "delegar" de alguna manera nuestra protección frente a los agresores en los cuerpos de seguridad del estado. ¿Por qué no puede ir en ese sentido la educación de los más pequeños?
Si en el parque advirtiéramos que el conflicto se da con un niño sensiblemente mayor al nuestro, no creo que dudáramos en intervenir y bajo ningún concepto se nos ocurriría decirle a nuestro hijo que buscara una manera de hacer frente al agresor mediante alguna estrategia de superioridad física, tipo armarse con un bate de beísbol o navaja. Veríamos rápidamente el peligro que supone tal indicación. ¿Por qué pretender, entonces, que se defienda de otro que, por su propia actitud aunque sea de similar edad, le está obligando a seguir unas reglas del juego que no queremos para él? Otro caso diferente sería si le estuviéramos entrenando para los pesos pluma y quisiéramos encontrar excusas para que practicara...
Publicado por: zoquete | 26/05/2011 0:01:34
hola
La verda es que sintiendolo mucho voy a defenfer dar una buena hostyjkh, como defensa ante una agresion en el cole. Esa primera torta que te pega el tipico pegador infantil puede ser el germen de una baja autoestima, una sumision y un miedo que puede durar toda la vida...si has sabido ponerte en tu sitio y te has defendido (aunque te venzan de nuevo), si no te has amilanado saldras reforzado y tu fuerza interior no quedara humillada.
Ruego que me perdonen si no he sido politicamente correcto, pero creo que ha esas edades los niños no entienden la egalite, fraternite y liberte..sino que su mundo es mas directo, de instintos, de lucha de poderes, de filtros inconscientes...que no pueden con el uso de la razon borrar la mella en su alma, que les puede hacer una agresion...No se..debo de estar equivocado....
Publicado por: Ugo | 25/05/2011 23:35:58
@Javi: "Oriente y Alemana de adopción. Me parece que os falta un hervor. Con gente como vosotras se deberían exigir informes psicológicos antes del embarazo. Siento verdadera lástima por vuestros hijos. Todo en vuestra vida es dulzura, desinfección y agresividad materna. ¿os acordais de la pelicula Misery? pues eso."
?De donde sacas lo de agresividad materna? Yo JAMAS he reaccionado con violencia cuando otro ninno ha pegado a mi hijo. Ademas cuando le han mordido estaba en la guarderia. JAMAS le he dicho ni creo que le diga nunca que devuelva el mordisco o lo que sea. Los padres del ninno que muerde y de otro que es pegon me parecen unas excelentes personas y sigo teniendo una buena relacion con ellos. El resto de tus tonterias no se merecen comentario.
Por cierto, en su guarderia son diez ninnos y tres cuidadoras y creo que estan resolviendo el problema bastante bien, lo digo por tu comentario anterior menos hostil.
Publicado por: alemana de adopcion | 25/05/2011 21:55:04
Muy interesante el post. Me ayuda en la preparación de una etapa que apenas visualizo...Espero no sea tan difícil de manejar en ese momento. Saludos, http://www.papaenrodaje.cl
Publicado por: Papá en Rodaje | 25/05/2011 20:35:15
Es muy interesante el post.... Cuando son pequeños no hay que darle mucha importancia pero si intenetar redirigir esa conducta.
http://www.losbebes.org
Compra-venta artículos de bebe segunda mano
Publicado por: Cristina | 25/05/2011 19:21:12
Mientras los psicodepegabobos se extasian unos a otros con sus bellas teorías, en la calle solo hay una realidad: unos niños pegan y otros reciben. Normalmente el niño que pega sigue pegando a pesar de charlas, castigos o una leche de su madre en el mismo momento. Para los padres del pegón, suele ser un problema menor ("no se peeega..."), y aun cuando se lo toman en serio y se aplican todas las técnicas modernochorras psicoinútiles, el niño sigue igual porque a esas edades entienden poco de filosofía y mucho de acción-reacción. A raíz de estas sesudas reflexiones mías he desarrolado una técnica que realmente funciona, probada con éxito en multitud de ocasiones. A saber: mis hijas, por demasiado buenas, han sido blanco de pegones ocasionales. Harto uno de las tonterías arriba expuestas, lo que hago es acercarme al pegón poco después de la colleja parqueril, y en cuanto veo que su madre está mirando para otro lado, me agacho y le suelto con voz bajita y tranquila: "como le vuelvas a pegar a esa niña de la blusa roja te reviento la cabeza". Ahora me decís que voy a ir al infierno... pues que me vayan haciendo sitio.
Publicado por: Vicente | 25/05/2011 19:07:27
No estoy muy seguro de si debemos dejar que sean los niños quienes resuelvan determinados problemas o diría que nos exponemos a lo profetizado por William Golding en su "El Señor de las Moscas". Esto atañe mucho más a la segunda franja de edad mencionada, la preadolescencia, para la que estamos asistiendo a la desagradable problemática del bulling. Ojalá solo lo conozcamos por películas que lo muestran de forma bastante convincente, aunque terrorífica, como"En un mundo mejor" (http://www.filmaffinity.com/es/film680160.html) o "Klass"(http://www.filmaffinity.com/es/film502533.html)...
También quisiera añadir que me resisto a creer que la solución pase por educar a los hijos a que se defiendan devolviendo el golpe o dando más fuerte. Como no se me ha dado el caso, no sé lo que haría en particular, pero creo que el artículo hace una buena mención de las causas por las que alguien opta por la violencia, aunque sea en respuesta a otro acto violento: incapacidad de resolver conflictos, falta de verbalización, sentimiento de frustración, ausencia de normas, etc...
Si el intercambio de golpes fuera la solución, ¿por qué no la aplicamos en nuestro mundo de adultos, donde no faltan exhibiciones de violencia física? Si alguien me empuja, me pisotea, me agrede por la calle, no me veo inclinado a devolverle el golpe, sino a evitar la confrontación y, según el caso, acudir a la autoridad. Es lo que tendemos a hacer la mayoría, pues hemos aprendido que son las normas sociales que se han venido estableciendo. También podríamos ir armados, reflejo de un pasado más violento y proclive a esa "autodefensa"... pero como es un mundo que no he vivido, no sé si lo preferiría.
Publicado por: zoquete | 25/05/2011 18:39:57
A los niñ@s hay que ayudarles a que resuelvan sus problemas. No resolverselos y menos aún crearselos, montando nosotr@s una pelea de padres/madres, que he visto unas cuantas y los niñ@s atónit@s. A algun@s les faltaba comentarlo junt@s. Una cosa es darles herramientas, escucharles y, darles nuestra opinión y otra pegarnos entre los adultos. No es el mejor ejemplo.
¿Y que hago con mi hij@? ¿Cuantas veces te has hecho esta pregunta?
Por eso hemos creado este blog, para ayudarte en el complicado proceso de educación de los hijos. Puedes tanto leer los artículos, como hacer preguntas y compartir opiniones con otros padres.
http://yquehagoconmihijo.blogspot.com/
Publicado por: educando | 25/05/2011 18:39:18
¿Y si simplemente se les deja actuar? A todos nos duele no nuestro, pero si un día pegan a tu hijo no le digas "tú no hagas lo mismo" simplemente déjale que encuentre él la solución, verás como acaba sólo con el conflicto. Escucha lo que pasó, pregúntale qué hizo y por qué lo hizo. Verás cómo cambia el razonamiento. No hay víctimas ni verdugos ni fuertes ni débiles. Los niños tienen unos comportamientos sociales igual que los adultos, pero más básicos y rudimentarios. Si a un adulto le pegan tiene claro qué debe hacer y se prepara para no recibir la siguiente.
Publicado por: ACF | 25/05/2011 17:58:53
Todo esto es muy bonito pero no soluciona nada. Lo primero es porque los padres de un ninho pegon/acosador no son capacez de reconocerlo. Y aqui hay una prueba. Los comentarios de los padres de acosados son muchisimos mas que de los acosadores. Un solo ninho puede hichar a palos a toda una clase? porque es lo que parece. Mi experiencia es que los padres dicen que su hijo es un angelito, no hablan con el, lo llevan a un sicologo y no se resuelve el problema. Y si no se resuelve no va a desaparecer (aunque eso parezca de la entrada del blog, que con los anhos se ira). No, perdon, quien de pequenho pega, tiene muchas posibilidades de seguir pegando de mayor. Asi que hay que hablar con nuestros hijos, ver si pegan ellos, y obrar en consecuencia para que de adultos no sean unos maltratadores y puedan vivir en sociedad.
Publicado por: mexicanita granatiensis | 25/05/2011 17:43:29
animo oriente, con esa lección la madre de la niña pegona se lo pensará dos veces antes de dejar a su monstruito atacando por el parque impunemente a nenes pacíficos. Cuando los padres no ponen límites tienen que ser personas extrañas quienes lo hagan, y como no hay tanta empatía las lecciones son más duras pero se recuerdan mejor. A los que te critican tanto seguro que cuando les tiren tierra dos veces a la cara también se les acaba la tolerancia barata de que hacen gala aquí.
Publicado por: felix | 25/05/2011 17:24:48
mi hija a los dos años pegaba y mucho, y tambien mordía a los demás niños de la guardería. Yo pasaba mucha vergüenza e impotencia, intentaba explicarle que eso no se hace, que los otros niños no querrían jugar con ella. En la guardería hicieron una gran labor. Al cabo de un tiempo empezaba a repetir "no se debe morder, no se debe empujar, no se debe pegar" aunque todavía se le escapaba alguna torta alguna que otra vez. Al final como dice la autora, aprendió a gestionar los conflictos, a tolerar un poco su frustración, interiorizó las normas y dejo de ser un problema, aunque siempre será un tanto ruda, como yo lo soy, en eso le tengo que dar la razón a Gelida de Corazón, mal que me pese.
Publicado por: papi | 25/05/2011 17:18:32
lo mas seguro es que te vio a ti pegar o tu le has pegado o vive en una casa con violencia,
ellos aprenden de lo que hay a su rededor,
PARA tu las practicas violentas, las palabras duras, los gritos,los insultos,a veces o casi siempre, estos estan tan arraigados en nuestras vidas cotidianas que no los vemos hasta que EL NINHO PEGA
Publicado por: gelida del corazon | 25/05/2011 17:05:31
A ema. Según mi experiencia, muchas veces los adultos nos ponemos bastante nerviosos ante compartamientos de los críos, sin entender que para ellos son juegos, a veces de contacto físico, otras de competición verbal, que son parte de su aprendizaje y que si nos limitamos a estar simplemete vigilantes para evitar conductas demasiado peligrosas o agresivas y para afeárselas, si se producen, pues no pasa nada, forma parte de ser niños. Igual que existen padres excesivamente permisivos que dejan hacer la sus hijos todo lo que quieren, ser maleducados , pegar a otros sin una simple regañina,hay otros que no les permiten moverse y que hacen de cualquier pequeño roce un gran drama y consiguen que sus hijos sean hipersensibles y aprensivos, de aquellos que terminan diciendo en clase " Seño...! Es que me está mirando!". Los extremos nunca son buenos, hay que dar normas,marcar límites.... y también dejar que se relacionen entre ellos,se revuelquen , se digan algún mote que otro, se peleen y se reconcilien. En fin, que sean niños .Y dejarles que vayan creciendo bajo nuestra vigilante mirada de adultos.
Publicado por: LadyMaruja | 25/05/2011 16:45:04
Leo los comentarios de la "choni" llamada Oriente y comprendo por qué hay niños violentos a tan tempranas edades. Cita a Belén Esteban y es entonces cuando todo concuerda. Apagad un poco la tele, anda.
Publicado por: peper | 25/05/2011 16:37:24
He leído aquí y allá y , sintiéndolo mucho y con algunas consideraciones, debo darle la razón a Oriente. El problema de los niños pegones no es igual en la primera infancia que en el inicio de la adolescencia; más o menos hacia los dos años, por esa características que explican arriba, muchos críos intentan solucionar sus conflictos o sus frustraciones levantando la mano, con mordiscos etc , si no hay ninguna causa grave( por ejemplo que el niño reciba golpes y aprenda que así debe comportarse) y cada vez que se le coge en uno de esos comportamientos se le regaña y se le afea, suele enmendarse muy pronto. Si un niño continúo teniendo ese comportamiento negativo años después es porque en muchos casos sus padres no han estado ahí para corregirle e incluso le han reído las "gracias" , en ese caso , aunque no me parezca correcto lo de que otra madre vaya y le pegue, es muy probable que en la normal dinámica de la interacción entre iguales se encuentre con algún compañero que le responda y que así empiece a entender que en el mundo hay límites y que no nos debemos meter en el espacio del otro.Los críos que siguen siendo agresivos a otras edades , tienen algún problema o están mal educados, ahí sí que se deberían instaurar actuaciones, normalmente en los centros educativos , que es donde pasan más tiempo interaccionando con iguales, para ayudarles a reconocer conductas, a ponerse en el lugar del otro, a reaccionar ante agresiones... en fin en todas esas habilidades sociales que no suelen necesitar más formación que la que nos proporcionan la sociedad misma, con una adecuado ejemplo por parte de los adultos y en las diversas situaciones de la vida diaria, pero que si se detecta que algo ha fallado en su asunción , no hay más remedio que corregir
Publicado por: LadyMaruja | 25/05/2011 16:28:12
Oriente, a ver si me aclaro.
- A los niños de 5 o un poco menos se les puede devolver la leche el doble de fuerte.
- tu niño a los dos años pegaba y tú no le decías que no lo hiciera y le empezaste a civilizar al cumplir los cinco.
Entiendo entonces que cuando tu hijo con menos de cinco años pegaba a otros con las manos o con la pala y tú no le decías nada porque aún no le estabas civilizando, esos niños le pegaban el doble de fuerte y en el caso de que ellos no quisiesen hacerlo, entonces eran el padre o la madre del niño agredido por tu hijo quienes le devolvían la leche a tu hijo ¿es así? porque esta es la conclusión a la que se llega de todo lo que has escrito. Espero no coincidir nunca en un parque contigo ni con tu hijo
Publicado por: occidente | 25/05/2011 16:00:34
Oriente y Alemana de adopción. Me parece que os falta un hervor. Con gente como vosotras se deberían exigir informes psicológicos antes del embarazo. Siento verdadera lástima por vuestros hijos. Todo en vuestra vida es dulzura, desinfección y agresividad materna. ¿os acordais de la pelicula Misery? pues eso.
Publicado por: javi | 25/05/2011 15:47:22
Me parece muy fuerte el comentario sobre la palada de arena a una niña de 5 años, creo que estas olvidando que son críos, y te refieres a la niña con el término de CHULA, sin palabras me dejas corazón, hubiera sido mas fácil que hablaras con la madre de la niña y dejarte de miradas y de plantar cara a una niña. Claro que cualquiera de nosotros daría la vida por su hijo, no por ello hay que perder los papeles, por muy molesta que te sientas... aparte que no sé que lección quieres que tu hijo aprenda así, que tu le vas a sacar siempre las castañas del fuego, me imagino que ya sabrá que puede contar contigo siempre, sobra este tipo de comportamiento. Algo más de diálogo y menos agresividad sería mejor sistema. Un saludo
Publicado por: No doy crédito | 25/05/2011 15:29:04
Oriente, tú lo que eres una ignorante. Ese tipo de maruja que a falta de inteligencia usa los gritos y los gestos exagerados para hacer ver que es una persona que controla la situación. Pobrecita. Espero que tu hijo sea más inteligente, aunque preparate porque te despreciará.
Publicado por: Montseny | 25/05/2011 15:26:47