Quizás en los últimos meses me hayáis notado un poco más de barriga. O que he estado distraída y no he actualizado tanto el blog. Todo tiene su explicación. Porque después de nueve largos meses, os presento... ¡a mi cuarto hijo!
No se parece mucho a los hermanos cuando acababan de nacer: en vez de frágil, es resistente, de hecho ya se me ha caído al suelo un par de veces sin resultar herido; es ligerito, no llega al medio kilo... Eso sí, el embarazo y el parto me han costado más sufrimiento que los de David, Natalia y Elisa. La criatura se llama Cosas que nadie te contó antes de tener hijos (Ed. Planeta), y sale hoy a la venta (coincide con el cumpleaños de Natalia, que ya tiene ¡cinco años!). La ilustración tan graciosa de la portada es, como las demás que abren cada capítulo, del dibujante Ed Carosia.
Al igual que cuando te encuentras por primera vez en brazos con tu recién nacido, siento alegría, ilusión, orgullo, pero también cierto miedo. Porque esto de ver un libro tuyo publicado impresiona.
Quizás algunos recordéis su origen: fue el post más leído en los tres años y medio de vida de este blog. Se titulaba Pequeños cambios que nadie te cuenta antes de tener niños. Las más de 200.000 visitas y casi 400 comentarios que recibió me confirmaron lo que sospechaba: que muchos padres y madres nos sentimos, de alguna forma, estafados cuando tenemos niños y nos damos cuenta de lo que de verdad supone. No estafados de mala manera, pero sí un poco engañados; en fin, que alguna que otra vez nos hacemos, aunque bajito, esta pregunta: ¿por qué nadie me avisó de esto antes?