Transcurridos dos meses largos desde el 20-N, y cuando el gobierno que preside Mariano Rajoy ha empezado ya a adoptar medidas forzosamente impopulares, los posibles apoyos electorales de los dos principales partidos (PP y PSOE) se mantienen sustancialmente incambiados. En unas hipotéticas elecciones que tuviesen lugar ahora, el primero sacaría al segundo, con toda probabilidad, una ventaja de 16.5 puntos (seis décimas más, incluso, que en noviembre). IU y UPyD, por su parte, no solo renovarían su porcentaje de voto sino que lo incrementarían, y además de forma sustancial en el caso de la primera de estas dos formaciones, que llegaría al 9.1%: un incremento de más del 30% sobre sus votos del 20-N.
Los datos del Barómetro de Clima Social de Marzo (EL PAÍS, 4-3-2012) reflejan ciertamente un desgaste de la imagen global del PP, derivado del juicio cada vez más severo que el gobierno de Rajoy va mereciendo… a quienes no le votaron, pues los votantes del PP le siguen prestando un apoyo sin fisuras. Esto explica que pueda detectarse a la vez, en el caso del partido gobernante, una caída general de imagen y una fortaleza electoral intacta.
El 20-N, el PP obtuvo el 31.6% del voto sobre censo CER (es decir, sin incluir el voto de los residentes en el extranjero). En el momento actual, entre los ciudadanos a los que se dirigió el último Barómetro de Clima Social (los residentes en el país, es decir, los que componen el Censo CER), el 41% expresa una impresión de conjunto positiva sobre el actual gobierno popular y el 35% aprueba, en concreto, la gestión que está realizando Rajoy: porcentajes ambos superiores a ese 31.6% de votantes populares. Al mismo tiempo, conviene tener en cuenta que el 47% de la ciudadanía (una vez más, un porcentaje ampliamente superior al 31.6% de votantes populares) tiene en el momento actual la sensación de que el gobierno sabe lo que hace. Como referente comparativo puede recordarse que en agosto pasado quienes decían eso mismo del entonces Presidente del Gobierno (Rodríguez Zapatero) llegaban solo al 16%.
La conclusión que de estos datos cabe extraer es que la imagen ciudadana del gobierno cuenta aun con un margen de posible desgaste global sin que, por ello, se vea necesariamente afectado su potencial electoral. La clave está en la perdurabilidad que alcance la, desde hace ya largo tiempo, inconmovible fidelidad de los votantes populares.
Fotografía: Election night crowd, Wellington, 1931. William Hall Raine. Photographic Archive, Alexander Turnbull Library.
Hay 2 Comentarios
Prsidente Mariano no miente y no hace falta que escuchen lo que dice, basta con que miren su mirada, los giros que hace dar a sus ojillos, los movimientos de su boca... su lenguaje corporal en general, demasiado forzado para mi gusto.
Publicado por: pepe111 | 07/03/2012 20:50:48
Mi conclusión es que si la la izquierda, en genérico, quiere remontar no sólo necesita oponerse a lo que el PP haga mal sino, a la vez, ofrecer soluciones mejores y para votantes más racionales
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Que me perdonen los incondicionales de uno u otro signo pero me parece la crisis nos va a hacer madurar políticamente a todos
Publicado por: pepe111 | 07/03/2012 19:31:45