LA CORRUPCIÓN PESA MÁS QUE LA PERCEPCIÓN DE MEJORA DEL EMPLEO
Los datos que arroja la oleada de julio del Barómetro de Clima Social —llevada a cabo tras la comparecencia de Rajoy en el Congreso de los Diputados el pasado martes, la última antes de las vacaciones de verano— reafirman la estabilidad que ya se reflejaba en las oleadas precedentes en cuanto a la evaluación negativa de la actuación del Gobierno y de los líderes de los principales partidos de la oposición. El dato quizá más relevante es que ha aumentado 11 puntos el porcentaje de españoles que piensa que está ya próximo el momento en que el paro dejará de crecer para empezar a bajar de forma continuada: de un 18 % en junio a un 29 % ahora. Si bien una amplia mayoría (69%) sigue pensando que ese momento está aún lejos y que el desempleo va a continuar como hasta ahora o que incluso que va a crecer en un futuro cercano, lo cierto es que este porcentaje se ha reducido 10 puntos en solo un mes.
A pesar de lo cual, la evaluación de la situación económica de España —la presente y la futura— apenas ha variado y continúa siendo abrumadoramente negativa. Además el Gobierno tampoco ha logrado capitalizar esta mejora de las expectativas laborales percibida por los españoles. De hecho, en la estimación electoral de este mes —en el hipotético caso de que se celebrasen unas inmediatas elecciones generales— el PP pierde un punto y medio con respecto a primeros de junio —de 24.5 % de los votos válidos pasa al 23.0 %— reduciéndose la distancia que le separa del PSOE a tan solo 1.4 puntos. El resultado estimado en el caso de los socialistas se mantiene prácticamente idéntico al del mes pasado, e IU y UPyD retroceden apenas unas décimas. La participación estimada se mantiene en el entorno del 50 % (52 % en esta oleada, un punto menos que en junio) y crece ligeramente el voto en blanco.
Todos los ministros del actual Gabinete vuelven a tener, en esta oleada, un saldo negativo a su gestión (esto es, son más los españoles que la desaprueban que quienes la aprueban). Los peores evaluados son el ministro de Educación, José Ignacio Wert, con un saldo de -65 puntos (un 80 % desaprueba su labor al frente del Ministerio y solo un 15 % la aprueba); la ministra de Sanidad, Ana Mato, con un saldo de -63 puntos (77 % la desaprueba frente a un 14% que la aprueba); el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, con un saldo de -61 puntos (77 % frente a 16 %) y el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, con un saldo de -60 puntos (76 % frente a 16%). Estos cuatro ministros también obtienen un saldo negativo entre los propios votantes populares al igual que la ministra de Trabajo, Fátima Báñez, y el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.
La caída del apoyo electoral de los populares estimado en esta oleada y el deterioro de la imagen del Gobierno se deben, probablemente, a que los ciudadanos están dando más peso en sus evaluaciones a los casos de corrupción en el entorno del PP que están siendo actualmente investigados —en especial, el “caso Bárcenas”— que a la relativa mejora de los datos de empleo. Hay que tener en cuenta que la mayoría tanto de los ciudadanos (92%) como de los votantes populares (89%) piensa que el PP tiene responsabilidad en dicho asunto por no haber vigilado adecuadamente a su tesorero. Pero aún más: un 82 % de los españoles y un 63 % de los electores del PP consideran que este partido es responsable porque sabía lo que pasaba y aún así lo toleró. Es decir, la responsabilidad del PP no sería solo por falta de vigilancia, sino por inacción tras advertir lo que pasaba. Con estas opiniones mayoritarias no debe extrañar que ni la forma de actuar ni las explicaciones de los dirigentes populares en este tema terminen de convencer ni siquiera a sus propios votantes.
En este sentido, prevalecen los electores del PP que ven más desacertadas que acertadas las declaraciones sobre el caso Bárcenas de Rajoy (47 % frente a 26 %), de Cospedal (45 % frente a 21 %) y de Floriano (32 % frente a 8 %, aunque en este último caso un 59 % no entra a evaluar sus declaraciones probablemente por desconocerlas). Sin embargo, los votantes populares se muestran claramente más satisfechos con la postura de Esperanza Aguirre (un 43 % ve acertadas sus manifestaciones frente a un 25 % que las considera desacertadas) y de Núñez Feijóo (27 % frente a 24 %). Es decir, los votantes populares coinciden más con los dos líderes que más autocríticos se han mostrado con la corrupción que rodea al PP. Unos datos que podrían ser interpretados como un mensaje del electorado popular a sus dirigentes para que aborden el tema con claridad, firmeza y determinación. De no ser así, podría extenderse la opinión de que realmente Bárcenas tiene en su poder pruebas que pueden llegar a comprometer tanto al partido como a alguno de sus actuales máximos dirigentes —una idea que ya comparte un 62 % de los votantes populares— y que, en consecuencia, los líderes populares están realmente tratando de ocultar algo.Sin duda, este hecho está lastrando el apoyo electoral del PP, que en esta oleada obtiene su peor dato histórico de fidelidad entre su electorado: en estos momentos, solo un 35 % de quienes le dieron su voto en 2011 volvería a hacerlo.
Algo similar ocurre con el PSOE y el caso de los ERE en Andalucía, aunque con algunos matices. La amplia mayoría, tanto de ciudadanos (77 %) como de votantes socialistas (78 %) no ve creíbles ni convincentes las explicaciones sobre este asunto dadas por los dirigentes del partido. No obstante, entre los ciudadanos existe una cierta mayor sensación de que en el caso de los ERE —en comparación con el caso Bárcenas— la concreta responsabilidad del partido es menor, en cambio, es mayor la de quienes se han aprovechado económicamente del asunto. Esto es, mientras que en el caso que afecta a los socialistas, un 55 % de españoles piensa que los principales responsables son unas cuantas personas que se han lucrado engañando a su partido, en el caso Bárcenas solo un 26 % cree que el principal responsable sea solo el extesorero. Por otro lado, y a diferencia de lo que ocurre con el caso Bárcenas, el de los socialistas es un asunto que afecta a los dirigentes de una región concreta —y no a la dirección nacional del partido— y a un Gobierno diferente al actual (a pesar de que el ahora presidente del partido nacional y del gobierno andaluz, José Antonio Griñán, ocupara cargos en el anterior Ejecutivo regional).
La mayoría de españoles (59 %) no cree que haya ahora más casos de corrupción que en otros momentos, sino que, en la actualidad, se lucha cada vez más y mejor contra la corrupción y por eso salen a la luz más casos. No obstante, las opiniones se dividen entre quienes, por un lado, consideran no solo que en España hay mucha gente corrupta, sino también que casi toda nuestra sociedad, de una forma u otra, participa y se aprovecha de ella (51 %); y, por otro, entre quienes creen que realmente son pocas las personas corruptas, pero manejan tal cantidad de dinero que causan un gran perjuicio y crean una mala imagen general (49%).
TRASVASES ELECTORALES
En esta oleada, el PSOE supera en cuatro décimas al PP en la intención directa de voto que manifiestan los españoles: 10.4 % frente a 10.0 %. En esta ocasión —y como viene ocurriendo desde comienzos de este año—, los porcentajes de intención directa de voto a populares y socialistas arrojados por el sondeo siguen siendo inusualmente bajos en comparación con los datos registrados en las oleadas anteriores a enero de 2013. En estos momentos, un 26 % de los electores dice que si ahora hubiera elecciones, no votaría, y un 16.9 % no sabe qué haría (si acudir o no a votar o, en el caso de acudir, duda entre alguna de las diferentes opciones políticas). Y si ahora hubiera elecciones, solo un tercio (35 %) de votantes populares y de votantes socialistas volvería a votar a PP y PSOE respectivamente. Entre los votantes del PP, un 29 % dice que no acudiría a votar, un 20 % votaría a otro partido (sobre todo a UPyD: 8 %) y un 15 % dice no saber qué haría. Entre los votantes del PSOE, un 15 % no acudiría a votar, un 33 % votaría a otro partido (sobre todo IU: 15 %) y un 16 % no lo tiene decidido. Tanto IU como UPyD mantienen una fidelidad de voto muy superior en comparación con la de populares y socialistas: la de la coalición rojiverde se sitúa en un 65 % y la del partido magenta en un 62 %.
INTENCIÓN DIRECTA DE VOTO
La intención directa de voto equivale a la voz de la calle. Es lo que los españoles responden de forma directa y espontánea cuando se les pregunta por su comportamiento electoral más probable. Es un dato clave para captar el estado de opinión predominante, pero debe ser interpretado con cautela pues no siempre refleja todo lo que los electores piensan, sino sólo lo que deciden revelar al ser preguntados. Distintos factores de coacción ambiental hacen que la verbalización de las distintas opciones ideológicas (su probabilidad de ser expresadas de forma espontánea y natural) no sea siempre la misma. La intención directa de voto (UDV) es, así, sometida a una serie de procesos de ajuste (a partir, fundamentalmente, del recuerdo de voto, de la fidelidad de voto, de la tasa de participación estimada, de la valoración por cada grupo de votantes de la gestión de cada partido y de sus líderes y de otros datos complementarios proporcionados por el sondeo sobre el estado de ánimo general de las personas entrevistadas) que permitan estimar cuál es, en esas circunstancias, el resultado más probablemente esperable. Obviamente, a partir de una misma IDV sería posible, utilizando otros criterios analíticos e interpretativos, obtener estimaciones de resultado electoral no necesariamente coincidentes con la que aquí se ofrece. La estimación de voto probable, por tanto, no es ya un dato directamente conseguido de la ciudadanía, sino una interpretación de sus declaraciones realizada a partir de unos supuestos determinados (lo que se conoce como “cocina electoral”). Aunque con frecuencia, por un uso descuidado, se confunda intención directa de voto y voto probable estimado, en realidad son cosas distintas. Una intención directa de voto muy elevada puede terminar, tras ser procesada, en una estimación de voto probable más reducida, o a la inversa. La IDV se compara con el resultado real que cada partido obtuvo sobre el Censo de españoles residentes (CER). Por su parte, los datos de voto estimado se comparan con el resultado real de cada partido sobre el total de votos válidos.
En esta oleada del Clima Social correspondiente al mes de julio de 2013 la intención directa de voto es la siguiente:
En twitter @JPFerrandiz
Fotografía: Election night crowd, Wellington, 1931. William Hall Raine. Photographic Archive, Alexander Turnbull Library.
Hay 6 Comentarios
Siempre me parecerá una manipulación el que no se den los datos del 40% del censo. ¿Es que cuesta tanto escribir unas pocas líneas más?
Publicado por: teo | 29/07/2013 12:58:59
Yo no entiendo y creo que nunca entenderé le tema de las estimaciones de voto. Seguro que detrás hay muchos razonamientos y ecuaciones que lo jsutifican, pero no veo claro que la gene pregunte una cosa y luego en elas estadísticas se muestre otra.
Publicado por: Celes | 22/07/2013 1:43:30
Yo creo que lo suyo sería repetir este tipo de encuestas a finales de julio, para quedarnos con una idea más clara para el verano de lo que piensa la gente, ahora que Bárcenas ha tenido un ataque de sinceridad, y que el PP no quiere dar explicaciones.
Publicado por: Jose | 11/07/2013 22:37:56
Supongamos que los casos de corrupción en los dos grandes partidos son poco más o menos de iguales proporciones. Según mi opinión, la gran diferencia estriba en la forma de actuar de los dirigentes de una y otra organización. Vemos que el PP niega toda culpabilidad y esto a pesar de las pruebas más que irrefutables y por contra fué la dirección del PSOE-A quien denunció ante las autoridades competentes el desgraciado asunto de los eres. Tampoco hay que olvidar el asunto Naseiro y Gurthel, que también llevan lo suyo, aunque parece que se quiere tapar. Enfin, el panorama entristece al más optimista sobretodo por las embestidas que se leen con demasiada frecuencia. Salud y suerte.
Publicado por: Pablo Antón | 10/07/2013 21:26:36
Habría que ver si la intención de voto sigue igual después de publicarse la contabilidad del PP
Publicado por: Calvin Harris | 09/07/2013 12:39:48
Por si alguien tiene dudas de que en las próximas elecciones en camino, las europeras de 2014, la fragmentación será de tal calibre que, o bien se retorna a un gran pacto nacional para cambiar las estructuras de arriba a abajo, o los dos grandes partidos caerán sin remisión como naipes frente a un tornado.
http://casaquerida.com/2013/07/08/revueltas-patrocinadas/
Publicado por: Tinejo | 08/07/2013 13:00:15