Wert, Rajoy y la filosofía

Por: Antoni Gutiérrez-Rubí | 01 dic 2013

La decisión de Mariano Rajoy de aprobar, con el único apoyo del PP, la reforma educativa presentada por el ministro Wert marcará definitivamente la legislatura y la suerte del Presidente. El compromiso público del resto de fuerzas políticas de modificar la Ley, a fondo, en la próxima legislatura es una advertencia definitiva para el PP. Sin aliados, y sin socios, su desafío electoral será de cara o cruz. Las encuestas que hoy publica este diario confirman dos escenarios: el bipartidismo no se hunde, pero ya no configurará las alternativas por mera alternancia; y el futuro gobierno será aquel cuyo presidente sea capaz de sumar mayorías diversas y plurales, en especial, en el ámbito de las nuevas izquierdas.

El presidente Rajoy, con su decisión de apoyar hasta el final al ministro peor valorado de su Gobierno, ha sellado su suerte. Nunca antes un Ministro de Educación había generado tanta irritación. Su tono (provocador), su lenguaje (combativo), sus declaraciones (impropias) y esa sonrisa burlesca permanente en su rostro, dibujan una personalidad política diseñada para el conflicto, no para el acuerdo. Estas características marcan a su persona, pero también tiñen y condicionan a Rajoy. Su apoyo no es solo lealtad, es compromiso. Wert igual a Rajoy, Rajoy igual a Wert. Estas son las matemáticas… pero las de la política.

Hay un punto de la Ley que, por su importancia simbólica y pedagógica, puede ser además de un pésimo cálculo político para quien la ha impulsado un grave error educativo. Me refiero a la reducción de las horas de filosofía que, junto a la mutilación de las Artes, ofrece un panorama desolador para el pensamiento y la creación, imprescindibles para la formación y la conciencia cívica y democrática, y que coincide con la ofensiva contra las libertades, en especial las de pensamiento y opinión, que hemos conocido estos días en la primera versión del proyecto de Ley sobre Seguridad Ciudadana.

Estas ofensivas al pensamiento y la libertad tendrán respuestas crecientes y contundentes, y encajonan al PP en una posición rocosa y compacta, pero impermeable al acuerdo y al pacto. Esta estrategia lleva al PP, renunciando a acuerdos plurales, a una sola opción: imponer, es decir, ganar confiando, única y exclusivamente, en recuperar la economía de las clases medias, aunque el resto de los problemas se pudran. Rajoy asume todo el riesgo. O todo, o nada. Y las encuestas parece que alejan, definitivamente, los horizontes de mayorías absolutas de nuestro escenario electoral.  

Wert cree que nadie llorará por esta contundente laminación de las materias del espíritu. Pero tengo la impresión que en la sociedad española la reputación de la filosofía, y su proyección en el imaginario colectivo, son mucho más relevantes que su conocimiento, su comprensión, su uso y la percepción de utilidad. La filosofía no tiene capacidad movilizadora para llenar las calles y las plazas en su defensa, todavía. Pero como la música, por ejemplo, tiene una profunda significación de valor en la percepción de los ciudadanos. Y un valor moral incuestionable. Las resistencias serán diversas, como ya anticipó Fahrenheit 451, novela del escritor estadounidense Ray Bradbury. En esta obra maestra, los bomberos tienen la misión de quemar libros ya que, según el Gobierno, leer impide ser felices porque llena de angustia; y, al leer, las personas empiezan a ser diferentes, creativas, libres, cuando deben ser iguales, neutras y resignadas. Gana la resistencia.

Los problemas materiales de nuestra sociedad son graves y contundentes. Es difícil pensar cuando se sufre. O, al menos, pensar en positivo. Pero pensar y crear precisamente son imprescindibles para recuperar el control y el protagonismo vital de nuestros destinos cuando las cosas se tuercen, se encallan o se rompen. Sin filosofía, no hay anclajes interiores, mástiles íntimos sobre los que construir las convicciones y las seguridades personales en tiempos de zozobra o convulsión. La filosofía no da de comer, pero alimenta.

Con la agresión a la filosofía (y las Artes), el PP muestra una concepción de la educación y, también, de la vida pública y de la política. Este punto es central para poder evaluar el coste de imagen y quizá electoral que puede tener esta disparatada medida. La filosofía es un indicador moral, además de una disciplina o un conocimiento. Y, por ello, la ofensiva de Wert puede no tener reacción inmediata, pero sí un coste estético y ético.

Aristóteles, hace más de 2.000 años, escribió La Política, su gran obra de filosofía política o la «filosofía de los asuntos humanos» y «las cosas referentes a la polis». Una obra y un autor que nuestros alumnos, seguramente, no conocerán. Sin filosofía en las aulas, la educación sobre la íntima relación entre comportamiento y resultado se debilita. Es decir, la responsabilidad. Y, con ello, la construcción de la ciudadanía individual y colectiva. Wert y Rajoy han impuesto una Ley con autoridad parlamentaria, pero han perdido, creo, muchos jirones de legitimidad democrática.


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Hay 34 Comentarios

Al fina y al cabo todas las leyes han de ser renovadas queramos o no, no podemos estancarnos. Ahora, habría que definir un selecto grupo de personas estudiosas para redefinir esas leyes, algo que no sé hasta que punto se está cumpliendo.

Hola, amigos. Llamemos a las cosas por su nombre. Tenemos una partida de indeseables que gobiernan nuestros destinos. No hemos podido con ellos porque tienen la mayoría en el parlamento. Este es todo su argumento. No hay ideas, no hay propuestas, nl hay proyectos ni programas. No hay sino vanidad, soberbia, palabras hueras, disimulos, engaños, prórrogas, añagazas. No hay sino el slogan de mi mamá ante los productos falsos, endebles, de pésima calidad : "tente mientras cobro". Mientras les dure el dulce, lo disfrutan. Lo demás no importa. ¡Viva el PP!

Alba | 06/12/2013 20:05:35


Gracias Alba, por las reflexiones que hace sobre mi planteamiento.

Hay mucho miedo a participar y decir cualquier cosa que rompa con los esquemas "tradicionales". Y el miedo paraliza; tiene ese efecto bastardo.
Por mi lado, estoy seguro de que en momentos de grandes dificultades, hace falta grandes cambios.
Que sean razonados y razonables, pero eso si, que rompan con el estado de cosas que nos mantienen en las situaciones, a las que nunca debimos llegar.
El tipo de política, que algunos entienden como "la política", es un cáncer, que después que ha sido producido interesadamente, nos quieren convencer de que solo, poniéndonos en manos de esos interesados, podremos salir adelante.

A todas luces el PP es un partido que acoge a personas, mal llamados políticos, que están haciendo el papelón delante de los ciudadanos Mahatma... Pero no nos vamos a desmoralizar podría ser peor, así que mejor dejar que la gente vaya viéndoles la cara y lo que llevan detrás y esperar que en las próximas elecciones se obre en consecuencia. No queda otra...

La ilegalización del PP daría un vuelco absolutamente positivo a la política española.
Si perseguimos cambiar la Constitución ¿Por qué no hacer inadmisible la perversión política y definirla, tal como se ha definido la limitación del Deficit Público, constitucionalmente?
A partir de la eliminación del PP español, durante unos 30-40 años, podría haber un balón de oxigeno a la ética política, a la promoción del debate social en torno a ideas desvinculadas de intereses corporativos, a la promoción del pensamiento democrático sin lealtades ideológicas, a una transparencia leal a principios fundamentales y, un largo etc.
Al cabo de ese tiempo, tras 30 o 40 años de higiene democrática, podría autorizarse a la derecha española a participar en la vida política. Entonces, comenzar a hacerles seguimiento perennemente, a fin de detectar el más remoto vestigio de franquismo-fascismo que, son tan característicos de esta gente, desde que se fundaron como Alianza Popular y cada vez más en la actualidad.
El PP daña, si contemplamos su origen, su trayectoria, su ideología y su hacer y desempeño. Daña a la democracia y al país. Es un partido tóxico, con dirigentes tóxicos, con propósitos diferentes a los que pregonan. De ahí, el empeño de algunos de sus representantes, de vendernos su enfoque malsano, pregonando el “progreso” que ha significado para el mundo, la ideología del PP, generalizando y asociando como suyas, aquellas cosas que no tienen ninguna conexión con la ideología del PP y la ultraderecha española
Es obvio que hay todo un empeño en un segundo renacer. Lo hacen sin complejos. Tan solo, mírese hacia atrás, un par de años.
Alemania está legislando al respecto. ¿porque nosotros no podríamos estar libres del franquismo-facismo, en un lapso de 60-80 años?

Hay cosas buenas y hay cosas malas en la Ley Wert.
Lo malo, es que las cosas malas ya chirrían demasiado. Son, en cierto modo, la forma de llevar el agua a su molino por parte del Gobierno, el Partido Popular y la Iglesia Católica.
Quítese la asignatura de Religión (y sustitúyase por Matemáticas y Lengua, aparte de Física, Química, Historia y Filosofía), hagan a la Iglesia dar catequesis en sus templos en vez de las escuelas y tendrán más provecho. La religión es una confesión de fe privada, no algo que deba enseñarse con dinero de todos.
La Fe en los templos, el Conocimiento en las escuelas, y Dios sin prejuicio ni beneficio, en casa de todos. E ya!.


¿Resistencia? por parte de quién...¿De aquellos que durante las vacas gordas se reian de lo poco que se ganaba estudiando?
¿Desde qué fecha se ha valorado la adquisición del saber? A lo mejor es que yo no me he enterado.
Cuando alguien se dedicaba a la investigación, lo normal era preguntar " y eso ?para qué sirve?...", "¿qué ganas con ello?". Y ahora de repente nos hemos transmutado y resulta que todos somos eruditos a la violeta......! vamos¡ !un poquito de autocrítica, camaradas¡.


Hola, amigos. Siempre hay un león sordo que se come al violinista. Solo les digo que el león sordo soy yo, porque lo de Wert y la filosofía es un concierto de violín. Estos tipos no merecen sino lo que hizo el león con el violinista y se acabó el concierto. Son tantas las mentiras que nos han contado y que nos siguen contanto, que lo único que se puede gritar, al menos por mi parte, es esto. ¡Basta de engaños a los españoles! Dejen de mentir, dejen de engañar, dejen de robar, señores del PP, señores polìticos. España, con ustedes no tiene arreglo. No son sino prestidigitadores sacando siempre los mismos conejos del cubilete. Y ya no hay más trucos porque todos están al descubierto. ¡Abajo la monarquía corrupta de los Borbones! ¡VIVA LA REPÚBLICA FEDERAL ESPAÑOLA!

No debemos olvidar (como han olvidado todos nuestros actuales representantes) que estamos en democracia y que eso es mucho más que votar cada cuatro años. Y no debemos olvidar -debemos aprender- que un ciudadano de un país democrático en el que se están cometiendo crímenes de lesa humanidad es responsable de esos crímenes.
Tampoco debemos olvidar que la educación es un derecho humano recogido en la Declaración Universal de Derechos Humanos. Pero no es un derecho humano el ser educado siguiendo una determinada creencia religiosa.
Hay que pensar en otro gobierno alternativo al actual. Sé que se está diseñando y me alegro.
Excelente artículo
Un saludo

Alguien dijo (Antonio Machado, creo), que “España es un país donde, de cada diez, uno piensa y los demás embisten”; una sentencia que muchos considerarán exagerada pero que “viene al pelo” para explicar la razón por la que este gobierno penaliza la asignatura de Filosofía, “abrasa” a impuestos la cultura, recorta hasta la indigencia los presupuestos para I+D … al tiempo que despliega todo su poderío legislativo para blindar la fiesta de los toros.
También, en cierto sentido, explica esa pulsión por engordar el arsenal material y legal de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, sabido como es que la fuerza bruta ofrece réditos más tempranos (aunque efímeros) que el diálogo y la pedagogía. La razón de la fuerza antes que la fuerza de la razón.
Y ya hilando fino explica la evolución en el perfil de un tertuliano estándar, personaje de natural ofuscado, presto siempre a “cornear” a cualquiera que contraríe sus ínfulas de erudición.
Pareciera que esta ganadería brava que nos gobierna, el propio ministro Wert así se reconoce, y una vez recortado todo lo económicamente recortable en educación, haya descubierto que existe otro material “podable”; además de Educación para la Ciudadanía, me refiero. Y la Filosofía es objeto idóneo para quienes persiguen extender su mandato de pesadilla mucho más halla del 2015 y a quienes les resultará sin duda mucho más útil la fe ciega que el pensamiento ilustrado.
Estupendo artículo, por cierto.

La PaletoPolítica sentó las bases de un culturicidio.

Nueva Ley de Educación en España
Ley Wert.

Aspectos ‘Positivos’ y Aspectos ‘Negativos’.

Yo tengo claro que hay varios aspectos positivos y muy positivos en la Nueva Ley. Los iré enumerando y comentando aquí. Puede que haya algunos negativos que se refieran a las becas, el coste de la enseñanza y eso. Pero partes positivas, las hay, y muchas.

Pensemos – siempre, y más en esto, es necesario que pensar – que estamos a la cola de la OCDE en nivel educativo de España. A la cola.

La vieja Nación, la vieja España, que dió a Séneca en la época Romana, a Isidoro de Sevilla, que creó Univesidades hace ya 500 años en El Nuevo Mundo, que dió la ‘Escuela de Salamanca’ y el Derecho Internacional , hoy, y tras 30 año de los inicios de la Idea psocialista-progre-catalanista, imperante en España, ha llegado a la cola de la OCDE. Y conste que puede que en un principio, al inicio, yo mismo como universitario y socialdemócrata estuviera a favor de aquello; como millones de españoles. Pero se ha demostado un fracaso. Un enorme fracaso.

Estamos a la cola de Europa y de todos los países de la OCDE en Nivel de la Enseñanza, y eso no se puede obviar. Ni hacer como que no lo vemos. Nadie. Ni siquiera los jóvenes e impulsivos estudiantes, poco documentados, que se manifiestan.
Y menos en nombre de la Idea psocialista-progre-catalanista. Sólo faltaría.

Sigamos..... (continuará)

Aún a la altura de la película, no tengo muy claro, en las próximas elecciones quién ganará.
De qué nos sirve recordar lo mal que anda el país, la cultura, la economía, la sanidad, etc., si cuando llegamos a la urnas dudamos tanto y tenemos miedo de algunos partidos.
Acaso no están en el poder el actual gobierno por el miedo que se ha implantado y según, algunos críticos, que el anterior gobierno estaba regalando el dinero a los inmigrantes.
Ahora toca cerrarnos la boca, quitarnos la cultura, quitarnos la salud y tantas y tantas otras cosas.
Hasta el punto de no tener ni opinión, claro eso a ellos les interesa, no salir a la calle (miedo a las replesalias), no decir abiertamente a un político lo que no te gusta (miedo a las replesalias), en definitiva qué nos queda como ciudadanos a estas alturas, veremos.

Una frase de Rosa Sensat (pedagoga) muy significativa:
"La libertad es una conquista a la que el hombre llega por por medio de la educación y la cultura"

Siempre fui una admiradora de las enseñanzas de Freinet, y Rosa Sensat. Lo más antagónico que se pueda imaginar a la idea de la enseñanza que tiene el Ministro Wert.
Recuerdo el día que hablando con una amiga mexicana sobre la disciplina y el método utilizado en las escuelas franquistas y religiosas, ésta me dijo que esos métodos eran propios de gente que había sido muy mal estudiante. Curioso punto de vista ¿No?...

Para César:¿realmente cree usted que los niños necesitan más tecnología? Compare el dominio que tiene usted sobre el móvil con lo que tienen sus hijos. Lo que sí viene bien es adquirir ciertas habilidades prácticas como cambiar un enchufe, montar un mueble, planchar, hacer la comida...

No problem. Esta ley probablemente no llegará a aplicarse. Al tiempo.

Estimado Antoni,
Los ciudadanos "solo sabemos que no sabemos nada" de lo que está pasando, o sí lo sabemos hacemos como si la cosa no fuese con nosotros, la pasividad y el conformismo no dan resultado. Si, ya sabemos que la mayoría absoluta beneficia que se dicten leyes como la LOMCE o la de Seguridad CIudadana, pero la fuerza de un pueblo no tiene límites. No sé si has visto la película NO, de Gael Garcia Bernal, la vi y me impresíonó la capacidad de reacción de un pueblo oprimido.
Saludos y buena semana

"La filosofía no da de comer, pero alimenta". Hace unos días tuve el placer de hablar con unos jugadores de baloncesto que estudiaban bachillerato. La conversación giró en torno a Marx y Nietzsche y fue una delicia, por la sensación de que esos chavales estaban vivos y llenos de inquietudes. Lástima que la torpe ceguera de un pésimo ministro y la de un presidente insensible sieguen estas posibilidades futuras de conocimiento.

Posiblemente todos tengáis razón, cada uno desde su punto de vista, pero se os ha pasado un detalle. Soy profesor de matemáticas y por ello debería estar a favor de esta ley pero estoy totalmente en contra porque soy padre y no creo que mis hijos necesiten obligatoriamente la asignatura de religión y sin embargo puedan dejar de dar música, plástica o francés si la dirección así lo entiende. Creo que no se puede poner en el mismo cajón a una creencia con un arte ( o dos) y más cuando en cualquier localidad hay una iglesia donde escuchar la palabra de Dios ( y gratis) mientras que es difícil encontrar profesores de música, plástica o francés. Además, los profesores de religión están nombrados a dedo por la jerarquía eclesiástica ¿Por qué tienen que contar lo mismo para una beca lo que den estos enchufados que lo que explique yo que he sufrido un proceso selectivo? ¿Y qué me decís del hecho de que con esta ley se puede donar suelo público para que los colegios concertados abran sus puertas?

¿Se considera importante la tecnología? Es decir, nuestros chicos deben de saber que es un diferencial, un automático, que tipo de corriente tienen en casa. Acaso distinguen el motor de gasolina del diesel. Saben cómo funciona las pantallas de televisión. Cómo funciona la caldera de gas. Habrá algunos que digan: " eso no hace falta para la vida cotidiana, y lo que importa es que sepan los autores de la generación del 27 e incluso que comían y donde se iban de vacaciones"

En la formación de los niños de las clases acomodadas considero muy importante el Kung-fu para aprender a dar hostias, eso si, con criterio.

Rajoy es del 55, Wert del 50 y yo del 53. Tanto ellos como yo pasamos por colegios religiosos de pago, hicimos el mismo bachillerato, aquel de las reválidas y el Preu, de elegir ciencias ( mates,física y química) o letras ( latín y griego ) pero con el resto de las asignaturas comunes, filosofía, sociología, literatura, historia del arte y por supuesto FEN " Formación del Espíritu Nacional ", que parece ser que es lo que más se arraigó en su imaginario, en mi caso eran frailes vascos y mantenían la asignatura por obligación y sin darle ninguna importancia como es lógico. Pero el tema es que tanto Rajoy como Wert están actuando con manifiesta mala fe en el tema de su ley de educación, ellos saben perfectamente que están donde están gracias a aquella educación elitista que les permitió tener criterio y cultura en su vida, incluso para equivocarse, y es evidente que quieren anular la capacidad de juicio de la sociedad del futuro y convertir España en un desfile tipo Corea del Norte. Vaya par de sinvergüenzas, quieren privar a los españoles del futuro de las herramientas que les dieron a ellos su actual estatus. Y no solo eso, estoy seguro que en los colegios privados de alto estanding habrá una oferta de actividades y formación humanística y artística de pago fuera del programa educativo oficial para sus retoños. !! Si hija, la niña me va a violín y a valet y el chico a un taller de arte dramático, a un cineforum y clases de kung-fu. !!

Hola Antoni, ¿Qué crees que es peor (o mejor), no aplicar los programas electorales o no alcanzar pactos con los demás partidos? Ambas cosas parecen incompatibles (y no me refiero solo a la reforma educativa si no, en general a todas las decisiones que tiene que tomar un gobierno). Pactar significa renunciar en parte (según la fuerza de los demás) al programa propio. Y dejar de aplicar el programa tampoco está muy bien visto... Gracias y un saludo.-

La filosofía y las artes, el que las quiera estudiar en la escuela y el bachiller, que las estudie por su cuenta en una escuela privada, pagándoselas el las asignaturas. En el bachiller y la escuela pública no se deben estudiar PORQUE NO SIRVEN PARA NADA. El que quiera que las estudie por su cuenta. Lo que hay que estudiar son matemáticas, que son la base de todas las ciencias duras e importantes en las ciencias blandas, y una historia que no tenga nada que ver con las falsificaciones de la memoria historica y los historiadores de izquierdas y nacionalistas, verdaderos expertos en falsificar la historia. Sobre todo la historia de la guerra civil y del gloriosos régimen de Franco.

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Sobre el autor

es asesor de
comunicación y consultor político.
Profesor en los másters de comunicación
política de distintas universidades.
Autor, entre otros, de los libros: Políticas.
Mujeres protagonistas de un poder
diferenciado’ (2008), Filopolítica:
filosofía para la política (2011)
o La política vigilada (2011).
www.gutierrez-rubi.es

Sobre el blog

Hago mía esta cita: “Escribimos para cambiar el mundo (…). El mundo cambia en función de cómo lo ven las personas y si logramos alterar, aunque sólo sea un milímetro, la manera como miran la realidad, entonces podemos cambiarlo.” James Baldwin

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