De migraciones: aquí, allá...

Por: | 08 de octubre de 2015

0013290055

AUTORA INVITADA: JARA ESBERT-PÉREZ

En los últimos meses, la crisis de las personas refugiadas ha tomado todo el protagonismo en los medios de comunicación. Y no es para menos. Miles de personas que huyen de la guerra se han encontrado con las puertas cerradas e incluso con ataques violentos en un intento de salvar sus vidas. Las imágenes, muy duras, han sensibilizado a una parte importante de la sociedad. Un punto de inflexión ha sido la foto del pequeño Aylan Kurdi, la cual ha conmocionado al mundo entero. Sin embargo, el trasfondo de la situación, dejar morir a personas que huyen de un pasado en busca de una vida mejor, viene siendo una constante desde hace mucho tiempo, sin que eso nos movilizara en masa, como ha sucedido ahora.

Por un lado, la falta de recursos para dar respuesta a las necesidades básicas de personas refugiadas es una realidad desde hace tiempo, convirtiéndose en una grave falta para los derechos humanos. Sin embargo, nos ha hecho falta ver a Aylan yaciendo en la orilla para desencadenar esta ola de solidaridad, que no es sino una respuesta de justicia social.

Por otro, la utilización de la palabra refugiado en vez de inmigrante o migrante ha llevado a aceptar la necesidad de una cobertura legal y social a un grupo de personas en detrimento de otro, el cual ha visto sus necesidades más básicas descubiertas. Hablamos de lo que algunos han definido como inmigrantes económicos, personas que huyen de una situación de pobreza (en muchos casos producida por la explotación del llamado primer mundo), que no pueden hacer frente a su día a día en el país de origen y huyen en busca de soluciones. Y a éstos también les hemos cerrado las puertas, hemos levantado vallas cada vez más altas para imposibilitar su entrada, les hemos encerrado en centros de internamiento (donde, sabemos, se producen vulneraciones de derechos humanos), etc. Y a los que han conseguido entrar en esta Europa Fortaleza les hemos recibido con políticas restrictivas que dificultan la integración y la convivencia en igualdad de condiciones que el resto de la población europea.

Todos ellos, migrantes en general, son víctimas de unas políticas  que ponen por delante de los derechos de las personas las necesidades de una sociedad capitalista que abre las fronteras cuando se necesita mano de obra que “mejore” la economía y las cierra cuando considera que ya no hace falta.

0013290073

Con las personas refugiadas sirianas se está viendo claramente: desde Europa se alzan las voces de la necesidad de ciertos países de contratar personal altamente cualificado.

En este sentido, la nueva Agenda Europea de la Migración (Comisión Europea, 2015) propone como línea de actuación una  “nueva política de migración legal” en la que destaca la importancia de “el mantenimiento de una Europa en declive demográfico como destino atractivo para los inmigrantes, en particular modernizando y actualizando el sistema de la tarjeta azul”[1] dirigida a personal altamente cualificado. La Directiva sobre la tarjeta Azul, según esta Agenda, será revisada para intentar hacerla “más eficaz para traer talentos a Europa”.

Se ha empezado así a clasificar a las personas según si tienen perfil cualificado o si no lo tienen, si son refugiados o inmigrantes, dando respuesta a las necesidades del sistema capitalista por un lado, a cuestiones de imagen política por otro.

Pero no sería justo decir que todas las líneas políticas van en una misma dirección, ni pensar que sólo los políticos dibujan la realidad de las personas. La sociedad civil se ha encargado a lo largo de los años de dar una respuesta, de hacer frente y proponer alternativas más justas, dignas y respetuosas con los derechos humanos. En este sentido es interesante la propuesta de la plataforma Stop Mare Mortum, que propone ampliar el concepto de la palabra refugiado -definida en la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951- incluyendo también a las personas que huyen de sus países por motivos económicos.

Y es que, independientemente de los motivos que originaron la migración y del perfil de las personas migrantes, lo que se evidencia es la necesidad de dar un trato digno a las personas, de cubrir sus necesidades básicas pero también de velar por el derecho a la participación y a la convivencia en igualdad de condiciones que el resto de personas. Aquí o allá. Porque “inmigrante”, “emigrante”, “refugiado” o “migrante”, somos vecinos y vecinas de este mundo que nos podemos quedar un rato más largo aquí o allá, emigrar,  retornar, o volver a marchar.

 

Jara Esbert-Pérez (@JaraEsbertPerez) es profesional de las Migraciones e Investigadora de Retorno Voluntario

Hay 0 Comentarios

Publicar un comentario

Si tienes una cuenta en TypePad o TypeKey, por favor Inicia sesión.

Migrados

Sobre el blog

España vista desde la mirada de quienes nacieron en otros países. Migrados es un blog de encuentros y desencuentros, de episodios cotidianos, de integración y de lucha por la supervivencia en un entorno extraño y, a veces, hostil. Es una ventana a las vidas de personas que se han quedado en una tierra donde la crisis ha convertido a sus propios ciudadanos en emigrantes. Coordinado por Lola Hierro.

Sobre el autor

Lola HierroLola Hierro. Periodista y viajera, está convencida de que su oficio debe entenderse como un servicio público. Cree que una de las obligaciones de los de su gremio es dar voz a los olvidados y a los débiles y, ante la duda, ponerse siempre del lado de las víctimas. Con Migrados quiere llamar la atención sobre un fenómeno social que no siempre recibe la atención que merece a través de las experiencias de héroes y heroínas cotidianos.

Quan Zhou WuQuan Zhou Wu. China de cara, pero andaluza de corazón. Quan es diseñadora gráfica y dibujante del cómic Gazpacho Agridulce. Nacida en Algeciras en el seno de una familia profundamente tradicional, lleva 24 años intentando alcanzar el perfecto equilibrio entre sus raíces orientales y un estilo de vida muy occidental. @Gazpacho_Agri

Abdel Abdelouahed BelattarAbdelouahed Belattar, Abdel. Es educador social y especialista en migraciones. Español de origen marroquí, él se ve de aquí de allá, o de los dos sitios a la vez. Su pasado le ha hecho tener una perspectiva diferente de las migraciones hasta el punto de estar decidido a investigar y demostrar que quienes emigran aportan mucho a la economía, a la política, a la cultura y a la sociedad, y que por ello tienen la llave para lograr un cambio social real.

Jean-Arsène YaoJean-Arsène Yao. Originario de Costa de Marfil, es Doctor en Historia de América por la Universidad de Alcalá (España), y titular de un Master en periodismo de agencia por la Universidad Rey Juan Carlos (España). En la actualidad combina su labor docente con actividades periodísticas.

Ernesto G. MachínErnesto G. Machín. Cubano de corazón y con raíces españolas, profesor, periodista y escritor. Proviene de una familia trabajadora, vivió la época dorada de la revolución cubana y un día se convirtió en aprendiz de viajero. Un día decidió contar su largo viaje por el mundo convencido de que sus crónicas ilustraran el dulce amargo de la emigración.

Julissa JáureguiJulissa Jáuregui. Madrileña de origen peruano, ha vivido más años en esta ciudad que en su natal Lima. Politóloga cuyo activismo le llevó a especializarse en cooperación internacional y migraciones. Escribir reportajes y crónicas narrando las historias de vida de los migrantes se ha convertido en una herramienta más de su reivindicación.

Sagar Prakash KhatnaniSagar Prakash Khatnani. Escritor español de origen indio, y autor del bestseller internacional “Amagi”. Ciudadano del mundo y convencido acérrimo de que la cultura ha de servir para derribar fronteras, diferencias y dogmas.

Otros autores

  • Shivan Khalil
  • John Ekow Ampan
  • Mercedes Rodríguez

Recomendamos

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal