Mujer sentada en una plaza/ Pixabay
Sí, has leído bien el titular: llevo velo, soy libre y feliz. Mi nombre es Saïda y tengo 26 años. Llevo en España desde los 12; llevo aquí más tiempo del que he vivido en mi país de origen. Al final no sé a qué llamarle país de origen. En ningún sitio me siento como me gustaría sentirme; libre de hacer lo que quiera y a gusto, como en casa.
Llevo pañuelo (hijab) desde los 16 años. Me lo puse porque quise. Lo repito, me lo puse porque quise. El velo para mí es un símbolo de identidad. Me identifico con lo que creo, con mis creencias e ideología. En España hay gente de todos los colores y tipos; hay gente a la que le gusta llevar los pantalones bajados hasta las rodillas, hombres que visten como mujeres y viceversa, gente que va estrangulada con corbatas, gente que va torturada con tacones, gente que lleva más maquillaje que piel en la cara… Y cómo no, gente que se tapa media cabeza con un pañuelo, como yo. Ninguno es mejor que el otro por hacer lo que quiere ni peor por lo que pueda pensar. Todo debe ser respetable siempre y cuando no vaya contra los derechos fundamentales de las personas.
Estoy harta de que, vaya donde vaya, la gente me victimice por llevar lo que quiero y, me gusta llevar. En el médico me preguntan si soy maltratada y me aconsejan pedir ayuda. En el Ayuntamiento me piden dar señales si siento que soy víctima de malos tratos. En los servicios sociales, las trabajadoras sociales me pasan el número de ayuda a mujeres maltratadas. Y eso más de una vez, por si acaso algún día pierda el miedo y me atreva a denunciar… ¿el qué? ¿Que soy libre siendo como quiero ser?
Esto no quiere decir que esté en contra del servicio a la mujer, al contrario; odio a cualquier persona que haga daño a otra y que se sienta superior. Para mí la superioridad la demuestran la inteligencia y los actos, y aun así no es razón para ser inferior o superior a nadie.
Mujeres sentadas a orillas del mar/Pixabay
Tengo que decirlo claro: en España hay mucho racismo. Perdona, me corrijo: en España hay mucha islamofobia. Este es el término que define la percepción que tienen los españoles, y europeos en general, hacia los inmigrantes musulmanes. Odio a una religión, a sus seguidores, porque sí. No existen razones para odiar a una religión o una persona. Odiarla sin saber por qué es de ser un cabeza hueca, un Frankenstein del siglo XXI.
Algunos pensaréis que soy una ignorante, que no conozco mi religión, que hay gente que se mata y mata a gente en nombre de esta religión que defiendo… Señores, digamos las cosas claras: quien mate por religión no es musulmán ni cristiano; es ignorante, agresivo, kamikaze, terrorista. No tiene más calificativos. El que lo haga por Allah, Cristo, razas, odio… A todos les describe la misma palabra: asesinos.
Relacionar a asesinos con religiones o ideologías es ser cómplices de sus actos, porque ellos matan porque piensan que su ideología es así y nosotros los juzgamos creyendo que esa ideología es así; les damos la razón.
Igual pasa con el machismo. Tengo que aclarar, remarcar y subrayar que mi religión no es machista. Machistas son las personas, pero te puedo asegurar que la religión no. Al fin y al cabo, cada uno hace una interpretación, subjetiva y ligada a su personalidad y entorno, de la religión.
No niego que haya musulmanes machistas, agresivos, racistas… Personas existen de todos los colores y gustos. Pero tenemos que diferenciar la personalidad de la ideología. Ya vale de etiquetaje barato, fácil y prejuicioso, aunque nos creamos psicólogos, por suerte y ciertamente, no los somos.
Atrevámonos a conocer. Atrevámonos a leer, hablar, escuchar y ver. Hablando y debatiendo se descubren cosas. Nunca ni nada se puede imponer así porque sí. Bueno, al menos nada bueno. Lo malo es fácil de imponer y transmitir. Seamos críticos con nosotros mismos y luego, con los demás. Critiquemos a partir de nuestras subjetividades. Primero cambiémonos a nosotros y luego, si tenemos razón, demos argumentos, debatiendo, para transformar, no cambiar, a otros. Se transforma conociendo y haciendo conocer, no imponiendo.
No podemos juzgar a alguien de vivir sin libertad cuando ni nosotros somos libres. No podemos tachar a alguien de ignorante cuando realmente lo somos nosotros. Llevar el velo invita a conocer a la persona por su persona, tal cual es, y no por su físico o apariencia; en definitiva, sin prejuicios. Una mujer con velo sigue siendo igual de mujer que una sin él. El velo no nos cambia; seguimos teniendo voz, opinión, pensamientos, aspiraciones, deseos, emociones, sentimientos, debilidades y fortalezas. Saïda sigue siendo tan mujer como Sara.
Soy musulmana y española (cosa que sigue sin encajar para algunos). Me siento española porque he crecido, vivo e intento aportar mi granito de arena a la sociedad. Soy musulmana pero no quiero islamizar a nadie. Estoy dispuesta a hablar con quien sea y quien quiera para que conozca lo que no conoce de la religión y de la sociedad musulmana. No creo, y sé, que sea portadora de la verdad ni que lo mío vale más que de los demás. Sencillamente creo que lo mío, como lo tuyo, tiene que ser respetado. Luego podemos compartir ideas, pero, primero respétame porque a ti, te respeto.
En el momento en que una mujer le da la vuelta a la prenda y la hace suya, se convierte en una libertad de imagen y estética. Las feministas islámicas piden que no haya ni prohibición ni imposición porque entienden que debe ser una decisión personal de la mujer. Dentro del propio campo feminista hay una visión muy esencialista, como la que tienen los fundamentalistas. Hay que desactivar el concepto religioso del velo porque también es político, social y muchas cosas más. Se ha podido ver que las mujeres, especialmente las más jóvenes, ante la prohibición del velo se lo ponen más. Qué mayor señal de libertad y rebeldía puede haber.
Natalia Andújar. Docente, escritora, conferenciante, activista y feminista musulmana.
*Saïda es el nombre ficticio de una mujer real, de nacionalidad marroquí y residente en España. Esta es su opinión, recogida de sus labios por Abdel Belattar.
Hay 17 Comentarios
Durante siglos la mujer en España se ha puesto pañuelos en la cabeza, para muchísimos actos de su vida y de hecho en los años 60 era muy normal que las mujeres llevaran un pañuelo en la cabeza atado por debajo de la barbilla cuando salían de viaje o incluso paseando por la calle; sin embargo en el mundo occidental el taparse la cabeza ha tenido un sentido: por costumbre durante años, por recogerse el cabello, por evitar la fuerza del sol, etcc..., de hecho había sombrererías especializadas que ya casi no existen, ahora, tanto los hombres como las mujeres occidentales prefieren no taparse la cabeza, pero se ha hecho de una forma natural, a medida que iban aumentando progresivamente las peluquerias para ellos y ellas, viéndose más favorecidos con bonitos cortes de pelo y peinados, pero los sombreros e incluso los pañuelos, aún se siguen poniendo, pero no por imposición sino por comodidad o por evitar las radiaciones solares, y lo mismo ocurre con la ropa, tantos siglos de grandes vestidos, enaguas, pololos, etc...., que venían bien en invierno, pero ¿y en verano?, generalmente, y hablo de las personas en general y no de personajes extravagantes, se viste de forma adecuada según el tiempo que hace y , esto, sí que hay que respetarlo, lo que hace la gente normal en occidente.
Publicado por: sindescanso | 06/06/2016 23:58:36
Perdone que insista pero mi reflexipon sobre el odio no iba sobre personas o grupos de personas sino sobre ideologias y religiones.Se esta poniendo de actualidad por parte de los musulmanes calificar de islamofobia cualquier actitud que considereis va contra el islan.Mi reflexion es mas bien filosofica.Se puede odiar una ideologia y no una religion?
Publicado por: rafi | 06/06/2016 18:11:48
Querida Sherezade...sí que es cierto que muchas mujeres que llevan velo no trabajan. Es la división de roles entre hombres y mujeres. Para algunos el no trabajar es un alivio y privilegio, en cambio para otros es otra forma de opresión, desigualdad y machismo. Cada uno piensa de un forma.
En cuanto a lo que dices, hay muchas mujeres con velo que quieren trabajar y no pueden, no les dejan. Y no es su marido o entorno el que no las deja, sino las empresas por portar el velo. Las empresas prefieren que las mujeres vayan apretaditas, con tacones y maquillaje. Feminismo o machismo? cada uno lo ve desde su punto de vista.
Publicado por: Abdel Belattar | 06/06/2016 1:48:28
Teniendo la vida toda garantizada y en Europa el estado de bien estar garantizado, que és un velo?
Publicado por: Sherazade | 05/06/2016 21:36:38
Sabeis por que és feliz una mujer joven que leva velo? Porque en la mayoria de los matrimonios musulmanos, el varón tiene la obligacion de sustentarla. Ella no necessita luchar por el pan de cada dia, que nosotras mortales tenemos que hacer sólas o ayudando a nuestros maridos. Velo, que velo?
Publicado por: Sherazade | 05/06/2016 21:35:21
Querido/a amigo/a Rafi. La libertad para dar opinión es igual que la de la mujer que lleva velo: igual, porque todos somos iguales ante la ley y debemos serlo en la vida misma. Opinar puedes, pero odiar no. Odiar querido amigo está castigado por penas de hasta 4 años de cárcel. Esto no lo digo yo, lo dice el código penal español en su artículo 510 a estas conductas:
• La incitación directa o indirecta “al odio, hostilidad, discriminación o violencia” contra un grupo o sus miembros “por motivos racistas, antisemitas u otros referentes a la ideología, religión o creencias, situación familiar, la pertenencia de sus miembros a una etnia, raza o nación, su origen nacional, su sexo, orientación o identidad sexual, enfermedad o discapacidad”. La incitación será castigada con la pena de prisión de uno a cuatro años y multa de seis a doce meses, una penalidad mayor que la que prevé el artículo vigente.
• La elaboración y distribución de materiales que puedan servir para llevar a cabo esa incitación.
• La negación o enaltecimiento de los delitos de genocidio, de lesa humanidad o contra las personas, cuando se cometan para incitar al odio, hostilidad, discriminación o violencia contra los grupos protegidos o sus miembros.
• Los actos de humillación o menosprecio contra ellos.
• El enaltecimiento o justificación de los delitos cometidos contra las mismas personas.
Así que, amigo Rafi, no puedes odiar. Opinar sí, odiar no. O al menos para tus adentros. El código penal a veces sirve para educar a vivir en sociedad.
Publicado por: Abdel Belattar | 05/06/2016 17:22:17
Me parece que cada uno lleve lo que le de la real gana pero el velo por mucho que quieran negarlo no es simbolo de cultura sino de religion(las culturas no tienen simbolos).Pero tengo que hacer una puntualizacion y es que lo mismo que esta persona quiere libertad para hacer lo que quiera y vertir como quiera tambien los demas tenemos libertad para decir e incluso odiar una determinada forma de vestir incluso una determinada religion.
Publicado por: rafi | 05/06/2016 17:01:27
Gracias por vuestros comentarios! Voy a intentar aclarar unas pequeñas cosas:
En el artículo se le da voz a una mujer de las miles de mujeres que viven en España, y las millones de Europa que nunca son escuchadas. Que hacen hasta leyes limitando su libertades pensando que prohibir el velo es liberarlas.
Esto de prohibir nos acerca más a los regímenes dictatoriales que a los democráticos de los que tanto presumimos. La libertad es un derecho y un deber. Tenemos que respetar las libertas de todas y reclamar nuestras libertades. Siempre y cuando la liberta de uno no comprometa la seguridad y salud de los demás y propia.
Mucha gente se cree su discurso y se piensa que son los portadores de la verdad, libertad, igualdad...no os equivoquéis amigos míos; pensar eso es vivir en una mentira. Si vuestra esposa os dice de ponerse un tatuaje o piercing, la dejaríais o se lo prohibiríais? creo que con esta metáfora os será más fácil poneros en situación.
El velo es un símbolo religioso claro. Pero nadie acepta la religión por obligación. O al menos así debería de serlo. Porque también existen mujeres árabes que han renegado de la religión que les imponían sus países o entorno. Hay que respetar todo, tanto al laico como al creyente.
Tu libertad acaba cuando empieza la mía, y viceversa. No tratéis a unos mejores que otros por hacer lo que quieres, todos somos diferentes, y tenemos que aceptar y reconocer el mundo diverso en el que vivimos.
En cuanto a los comentarios descalificativos, no voy a perder tiempo en contestarlos. Solo un consejo, lee. Leer es conocimiento y educación.
En cuanto a los génesis de las religiones; en los libros sagrados también te lo explica y te explica también las creencias de nuestros ancestros. Repito, hay que respetar al creyente y al laico. No todos podemos ser iguales, perderíamos nuestra esencia.
En cuanto a lo que dices Sherezade, perdona pero no soy tu hombre. Seguro que encontrarás a tu hombre en alguna playa o sitio de ocio que estará encantado de disfrutar contigo.
Y por ultimo Penti, quienes realmente hacemos un análisis crítico de la religión desde una perspectiva neutral, somos los que decimos que la religión no es machista. Te invito a dejar de lado todo lo que te rodea, sea influencias o formas de vida, y vuelve a hacer ese análisis. Creo que algo cambiará.
Vuelvo a aprovechar para agradeceros la participación, el debate siempre ayuda, siempre es bueno.
Publicado por: Abdel Belattar | 05/06/2016 15:56:07
Etxeberri, sabia usted, que la premera demosntracion artística de una divindad, (del neolitico) és una mujer desnuda y embarazada? Los dioses hombres sólo empiezan a ser representados en la edad del bronce
Publicado por: Sherazade | 05/06/2016 15:25:45
El ser humano salió de las cavernas en las que habitaba y emprendió el camino de la cultura, en cuanto empezó la industria de pulir las piedras.
Fabricar herramientas y construir poblados en los que vivir en grupo, compartiendo socialmente la responsabilidad de crecer y de reproducirse, dominando todo su entorno natural desde la superioridad intelectual de su mente.
Desde siempre el ser humano detectó una dependencia espiritual que sin ver directamente intuía en el efecto de los hechos que vivía.
También para defenderse de sus miedos e inseguridades buscando a unas deidades, que identificó y asoció a la naturaleza que era el único referente insuperable.
La vida, los astros, la tierra, las plantas o el sol.
Desde que se tiene noción histórica, la cultura señala el culto a dioses y divinidades.
Para ejercer el trabajo en la tierra arropados por la mano poderosa de los entes ocultos responsables de todo lo creado, a la vista de los seres humanos.
Siempre apuntando hacia un equilibrio de respeto para con la obra de la naturaleza.
De la que forman parte las personas, hombres y mujeres.
Sin diferencias en derechos y deberes.
Andando el tiempo, y arrastrando todas las ignorancias ancestrales sobre las diferencia morfológicas aparecieron religiones, que hablaban de lo mismo.
Respeto desde el reconocimiento humilde de la debilidad humana hacia una fuerza creadora universal a la que se llamaba Dios.
Buscando siempre el cumplimiento y perfeccionamiento social, y guardando la jerarquía y el respeto.
Guardando las formas con unas normas y unos castigos más allá de la vida.
Que nunca pudieron ser impuestos a partir de unas fechas por los seres humanos.
O sea, que si existe el Dios Creador, ya existió desde el principio de los tiempos, y el velo en las mujeres cristianas o musulmanas es cosa reciente.
Un producto de la cultura y la civilización que nos llegó a partir del uso de las togas romanas.
Al rededor del mar Mediterráneo.
Hoy en los templos cristianos ya no se le exige a las mujeres y jóvenes que se tapen la cabeza con un pañuelo en señal de respeto a la Divinidad.
Y por el contrario, los hombres se tenían que descubrir la cabeza, por la misma razón.
Lo que nos hacer ver, que las formas culturales solo son demostraciones externas de respeto ante La Deidad, no ante las personas, hombres o mujeres.
Como parece que hoy se utiliza, el velo ante la mirada de los extraños.
Formas y modales culturales o modas pasajeras.
Publicado por: Etxeberri | 05/06/2016 10:48:59
Estoy hasta las narices de religiosos, ideólogos, y dogmáticos de toda clase.
Publicado por: Luis González | 05/06/2016 5:06:46
Símbolo. Religioso ? Es una cadena pero es tan miope que no lo ve ,quieren importar su forma de vida a Occidente y no se dan cuenta que esa forma de vida fue lo que loas hizo salir. Si es tan bueno por que no se van a un país musulman traidora a la humanidad y a la mujer
Publicado por: Carlos poveda | 05/06/2016 1:25:24
Mi madre es una mujer de profunda fe cristiana. Cuando la hermana de mi marido se casó con un musulmán, mi madre compró una alfombra como regalo de boda, me dijo que no sabía si quizás era la apropiada para rezar ¡!, a mi cuñado se le iluminó la cara cuando la vió. Años más tarde cuando mi hermano estaba en el lecho de muerte, mi cuñado me pidió muy serio que le diera un mensaje a mi madre "dile que esta tarde he rezado en la mezquita por tu hermano", también en los ojos de mi madre se iluminó una chispa de agradecimiento y me pidió que no olvidara darle las gracias. Yo no soy creyente, pero no tengo ninguna duda de que Abdel Belattar se siente libre y es feliz, aunque estoy segura de que si no tuviera que justificarse de serlo todavía lo sería más. Bienvenida a casa Abdel.
Publicado por: ISA | 04/06/2016 19:48:18
Estoy de acuerdo en que usar pañuelo puede ser una opción libre pero negar que el Islam es una religión machista es ,simplemente , no querer admitir la realidad. Yo que soy cristiana, denuncio que mi religión es machista porque por ejemplo, las mujeres no podemos ser sacerdotes. Un mínimo de análisis crítico haría mucho más creíble lo de" libre y feliz"...
Publicado por: Penti | 04/06/2016 18:07:01
Cásate conmigo, Abdell, com mis minifaldas y escotes y biquinis en el playa. Se la playa permite en topless. Me pongaré el velo sólo para ti, en la habitacion. Cásate conmigo y nuca irás tener sueños con virgenes que te esperan en el cielo.
Publicado por: Sherazade | 04/06/2016 16:24:03
Agradezco mucho tu comentario Écija! pero estoy tan disconforme contigo que tu conmigo. Te explico: lo que estamos hablando no es una imposición arbitraria sino una regla más del juego. Como bien ha dicho Saïda, hay obligaciones para hombres y para mujeres en la religión. Hay mujeres que las cumples y mujeres que no. Hay hombres que las cumplen y hombres que no. Que posiblemente haya más mujeres que hombres que cumplan las reglas, no te lo niego. Pero allí no tiene que ver la religión, sino la práctica instrumentalista de la misma. Llevar velo para las mujeres o barba para los hombres, en su esencia, no responde a ningún interés político o económico. Que ahora haya dictadores y demás que usan la religión para controlar a la gente, pues tampoco te lo niego. Toda ideología o creencia es mala, cuando está en malas manos. En el Islam no tenemos una institución que nos controle, porque nos consideramos todos una comunidad (umma) igual en todos los derechos. Que hoy en día haya gente que manipule y interprete por sus intereses, pues los hay. Pero la religión islámica solo hay una, y Corán sólo uno... conociendo lo que pone en ellos es cómo se combate la ignorancia y el adoctrinamiento porque se sabrá lo que es cierto y lo que no, lo que es legítimo y lo que no.
Publicado por: Abdel Belattar | 03/06/2016 17:40:54
Magnífica reflexión personal que habla bien a las claras de como las personas que viven en un Estado de derecho, ya sean hombres o mujeres, ejercen en libertad su derecho personal a vivir según su Fe religiosa.
Es loable la actitud manifestada de respeto hacia la libertad los demás ciudadanos y ciudadanas, que dentro de las leyes civiles, comparten los mismos derechos y los mismos deberes ciudadanos sin intromisiones en la vida privada de los demás.
Pero si miramos a nuestro alrededor, lo que se observa es una clara manipulación del Credo religioso y las creencias legítimas de la gente, en provecho de intereses políticos o particulares.
Utilizando de forma demagógica desde la ignorancia, la obcecación y el fanatismo las voluntades de personas que creen defender un bien universal.
Cuando en realidad sirven intereses privados de poder.
Mezclando lo privado individual de la Fe, con acciones y actuaciones de tipo político.
Que una mujer pueda ir tapada o en minifalda es una decisión personal que a nadie más afecta.
Pero imponer desde el credo una obligación y una forma de conducta en sociedad, si atenta contra la libertad de las personas, pasando del terreno de lo privado a lo que es el terreno civil o social.
Y a eso se le llama demagogia.
No se puede imponer a nadie una forma de conducta por razón del Credo, ni autorizar al varón por su condición de marido a castigar a la mujer como un derecho aunque sea solo de forma suave.
Desde las instancias de una supuesta autoridad religiosa.
Dentro de la cultura civilizada y democrática, es eso lo que no se entiende, según el parecer de la mayoría.
Publicado por: Écija | 03/06/2016 9:51:59