Mariano Rajoy junta a Esperanza Aguirre en abril de este año.
Todo el mundo ha dicho de Esperanza Aguirre que una de sus cualidades más reconocidas era decir siempre lo que quería, y hacerlo de forma muy clara. Es falso. A los hechos me remito para negar lo segundo. Es imposible montar un espectáculo como el de ayer con su dimisión y dejar más oscura, más opaca, más incomprensible la razón que ha llevado a la presidenta de Madrid a dejar el cargo y la dirección del PP madrileño. Medida la intervención ya ha sido, ya. Mención expresa, aunque deliberadamente confusa, a su salud, con lo que deja abierta que ésta haya sido la posible causa de su salida. Tapona así a muchos críticos de su labor, que se van a guardar unos cuantos insultos en consideración a su dolencia. Porque, ¿y si de verdad está muy enferma? Pero a la vez ha dejado en el aire todo lo demás. Así que ha logrado, como en su carrera política ha sido habitual, embarrar el campo de juego. Y esta vez, de nuevo, el de su propio partido, porque con su alambicado discurso deja la atmósfera del PP llena de miasmas contra Génova, con Rajoy como primer objetivo de esos silencios. Lo van a ver en los comentarios de sus muchos hooligans, que ustedes conocen bien y que ahora se quedan sin la luz y la guía de la gran lideresa. ¡Qué cruel es el destino!
Les pido perdón por la desmesurada extensión de este monográfico, que no se volverá a repetir, pero es que Esperanza Aguirre ha dimitido. Y el catavenenos no va a vivirlo otra vez.
Recuerda hoy El País que los dos puestos clave del PP en Madrid “quedan en manos de dos personas no votadas como cabezas de cartel: Ana Botella en el Ayuntamiento e Ignacio González en la Comunidad”. Qué curioso…
En Abc arrancamos con Pedro Schwartz, uno de sus grandes maestros en liberalismos, que escribe el artículo de la Tercera Página. Escogida gavilla: “El ambiente intelectual en el que se movió en su juventud no la predisponía hacia una filosofía liberal. El general Franco y muchos culpaban al liberalismo de todos los males de la patria desde las Cortes de Cádiz hasta la II República. Los profesores con los que estudió la carrera de Derecho nunca le explicaron ideas liberales. Sus compañeros más activos en la oposición al Régimen profesaban la ideología marxista e incluso eran partidarios del comunismo...”; “Cuando la conocí en casa de la abuela de su marido, la marquesa de Casa Valdés, quedé impresionado por lo amplio de sus conocimientos y la firmeza de sus opiniones...”; “Fue elegida para ser ministra de Educación por Aznar en su primer Gobierno. Aquí empezó a mostrar de qué metal estaba hecha. En efecto, el campo de la Enseñanza en España ha sido ocupado por una secta de enseñantes dogmáticos con los que la nueva ministra no tenía más remedio que chocar. Para el colectivo mal llamado progresista, todos los alumnos desde el parvulario hasta la entrada en la Universidad y más allá deben recibir idéntica formación y enseñanzas...”. Pero déjenme que me quede con esta bonita frase, tan reveladora de con qué ojos ven estos grandes demócratas y liberales la realidad: “Alcanzó la Presidencia de la Comunidad Autónoma de Madrid por la mínima”. ¿Así resume don Pedro el tamayazo? Si es que son grandes…
Ni Martín Ferrand, ni Edurne Uriarte ni Juan Carlos Girauta se refieren al tema. Ya lo harán. Hermann Tertsch lo hace de manera desgarrada: “No hacía falta que ayer surgieran las voces más repulsivas, mediocres y fracasadas a intentar ensuciar el nombre de su peor enemigo, que se va imbatido. El paupérrimo nivel y la torva catadura de tantos hacen a veces inexplicable la presencia en la política de quienes tienen a su alcance otras formas de vida (…) Ha disfrutado en Madrid una carrera política plena y cuajada de gratificaciones, victorias y éxitos políticos en el más profundo y fecundo de sus significados. A la que tenía que haber seguido esa política nacional e internacional para la que estaba cualificada como muy pocos. Sin duda habría podido prestar grandes servicios a esta España triste, torpe y aturdida que balbucea su discurso contradictorio por los escenarios internacionales”. Pero ojo, que nada es de gratis: “Pero a nadie, ni siquiera a ella, puede culpársele si declara su cansancio en un panorama político como el español. Si se proclama agotada ante tanta retórica mugrienta, tanto complejo, tanta cobardía, cochambre oportunista, desistimiento, mentira, corporativismo de los peores y resentimiento como hoy se manifiestan en la vida política española. El problema de Aguirre ya no eran obviamente sus enemigos políticos (…) El problema de Aguirre estaba sobre todo en la decepción, la que ha producido el Gobierno de Rajoy en tantísimos españoles que lo votaron. Y que sin duda Aguirre comparte (…) En su partido no han querido oír a la voz clara de la derecha liberal. Puede que acabe echándola de menos tanto como los que han dado cada vez más votos por ella”.
Ya saben ustedes que los articulistas de La Razón también se toman las cosas con calma. Javier G. Ferrari, José María Marco y José Luis Martín Prieto, por ejemplo, hablan de sus cosas, que si Artur Mas que si Obama, que si Otegi. Por no hablar de Alfonso Ussía, que lo hace de José Tomás. Ya irán a Aguirre. Mañana. O pasado, que tampoco hay que acelerarse… Del editorial, el título -“Una política irrepetible”- y un párrafo: “Se va una de las señas de identidad del Partido Popular, una figura irrepetible y una de las referencias más rotundas del liberalismo español contemporáneo. Se va, también, una política honrada y eficaz que ha convertido a la región de Madrid en una de las más prósperas y desarrolladas de España. Se va, en suma, una mujer de una sola pieza que nunca fue amiga de las medias tintas y que siempre entendió el uso de la libre expresión de las propias opiniones como uno de los grandes servicios que los representantes de la voluntad popular debían rendir a los ciudadanos. Si en algún momento la palabra ‘ambición’, referida a la política, ha recuperado su connotación positiva ha sido, también, por Esperanza Aguirre”.
El director, Francisco Marhuenda, viene a repetir ditirambos, pero apunta al futuro, que agua pasada no mueve influencias, y conviene no perderse en tonterías: “No creo que esta sucesión de éxitos hubieran sido posibles sin Ignacio González e Isabel Gallego. El vicepresidente ha sido el complemento perfecto, ya que ha llevado el día a día del Gobierno, y será un gran sucesor. Es un merecido reconocimiento. Gallego es la mejor directora de comunicación que he conocido. Leal, trabajadora, ingeniosa, divertida y eficaz”. Que ahora quien manda, manda.
También en El Mundo los hay un tanto haraganes. Arcadi Espada habla del documental sobre Mahoma, y Luis María Anson sobre los sindicatos. ¡Otra vez el ilustre académico vuelve a nombrar a Marcelino Camacho en vano! Carmen Remírez de Ganuza afirma que “Esperanza se va harta”. El porqué es evidente: “El ‘portazo’ sucede a las discrepancias y tensiones con el Gobierno de Rajoy”. Pero aún hay quienes mantienen viva la llama de la profesionalidad en El Mundo. Fernando Sánchez-Dragó, por ejemplo, que a pesar de que ayer mismo tuviera un nuevo retoño –la madre y el recién nacido se encuentran bien, gracias-, se larga un artículo como el día lo exigía: “Estado de 'shock'. No es para menos. Se va, en uno de los momentos más difíciles de nuestra historia, la mejor cabeza política de España, la más coherente, la más valiente, la única, quizá, que de no haber sido acorralada por los suyos podría haber evitado o mitigado lo que ahora sucede y poner coto al monumental entuerto que se avecina”.
¿Alguno más en el papel de Pedro José? Salvador Sostres, naturalmente: “Siempre ha sido odiada por la masa catalanista, pero eso no es ninguna novedad porque la masa la ha odiado siempre en todas partes (…) La turba se alegrará de su dimisión, en Barcelona, en Madrid y en todas partes. No se alegrará ninguna persona inteligente, que más allá de su ideología, crea en la grandeza de la política. También la inteligencia y el buen gusto son una patria, hoy un poco más huérfana sin Esperanza Aguirre”.
Pues si esto se produce en el centro de la ciudad, imagínense en la periferia. Varios de Libertad Digital. Emilio Campmany: “Parece que nos ha mirado un tuerto. Sólo nos falta ir al mar y que se seque. Las malas noticias se agolpan en los teletipos, a codazos, a cuál peor. Los terroristas salen a la calle. Algunos de los pocos trabajadores que tienen empleo se ponen en huelga. Los catalanes porfían por la independencia. Rajoy se hace socialista. Y la economía... Bueno, no hay bastante papel para enumerar las desgracias económicas. Y, por si todo esto fuera poco, va Esperanza Aguirre y dimite. Lo ha hecho entre lágrimas contenidas, emocionada por lo trascendental que el momento era para ella. ¿Por qué? (…)Si todo resultara finalmente ser el resultado de una operación de asedio protagonizada por la banda de mediocres que hoy lidera el PP, incómoda por la libertad de opinión de Esperanza Aguirre, la noticia pasaría de mala a trágica. Ojalá no sea así y se trate tan sólo de la decisión de una mujer harta de tener que combatir a tanto enemigo y de que los peores sean los de su propio partido”.
Cristina Losada: “Durante estos años, la presidenta de la Comunidad de Madrid ha sido mucho más que la presidenta de la Comunidad de Madrid. Ha sido la voz de una derecha que, como ella misma formuló en un discurso memorable, no se resigna. Que no se resigna a aceptar la superioridad moral e ideológica que la izquierda se atribuye, como si fuera un fenómeno de la naturaleza, una verdad tan sentada y probada que sólo los locos se atreven a discutirla. Esto tiene su importancia en una época en la que, no sólo en España, pero aquí especialmente, el pensamiento político –y hasta el pensamiento sin más– se ha convertido poco menos que en sinónimo de izquierda”.
José García Domínguez: “Patriotismo, el de Aguirre (…) Liberalismo escéptico que, lejos de fantasear con mundos perfectos, aspira a pequeñas hazañas tangibles, como ésa de lograr que todos los niños y niñas de Madrid aprendan en colegios bilingües. Un hito pedagógico del que con razón la presidenta se puede sentir hoy orgullosa. ‘La felicidad del ser humano es la libertad. Y la libertad es la valentía’, escribió Tucídides hace dos mil cuatrocientos años. Pocas mujeres más valientes que Esperanza Aguirre habrán de recalar alguna vez en la política nacional”.
Y, por fin, el gran jefe de todos ellos. Federico Jiménez-Losantos:
“Hay tantas razones para abandonar la política española –y España, en general– que lo raro es que sólo se vaya Esperanza Aguirre. ‘Pero se va la mejor’, dirán muchos. Sin duda. Así es”.
¿Siguen los panegíricos en La Gaceta? Siguen. Fernando Díaz Villanueva: “Nadie lo sabía, ni los más cercanos, la dimisión de Esperanza Aguirre ha pillado a todos por sorpresa. No podía ser menos, el enemigo número uno de la izquierda española, la mujer más odiada por los plumillas progres, ha dimitido porque le ha dado la gana, porque sí, y no porque las circunstancias políticas le obligasen a ello. Así es España, quien no debería dimitir dimite, y quien debiera hacerlo se atornilla al sillón”. Pero… “En Génova están haciendo pagar con sangre ciertos pecados y Aguirre, que tenía mucho poder cuando Mariano no tenía ninguno, ha sido la más pecadora de todas. Los desacuerdos entre la Comunidad de Madrid y el Gobierno de la Nación son continuos. Rajoy está haciendo exactamente lo contrario de lo que prometió durante la campaña (…) La guinda que, quizá, ha colmado el vaso ha sido el problema de Cataluña. Al parecer Rajoy trama poner fin a todo este asunto dando a Artur Mas lo que pide, es decir, un pacto fiscal, un concierto a la vasca, que terminarían pagando los contribuyentes madrileños, convertidos así en auténticas huchas de un Estado autonómico dilapidador, ineficiente e insostenible. Se daría la paradoja de que Madrid, que siempre renegó de las autonomías, sus múltiples dispendios y sus delirios identitarios termine sosteniéndolas mediante impuestos”. Vaya, vaya…
Rafael Miner, también en La Gaceta: “El cúmulo de desencuentros, discrepancias y zancadillas era ya demasiado grande. Y Aguirre da un portazo, amable, pero portazo, mientras no sabemos si Mariano Rajoy ha intentado retenerla como uno de los 'grandes activos' del partido, tal como la ha definido. El dato es clave. Aguirre se ha cansado de luchar en su propio partido. Y se va. Veremos si tras el oportuno descanso vuelve y dónde vuelve. Porque el centrismo arriolista no la quiere. Eso ha quedado claro”.
Itxu Díaz. La Gaceta: “Esperanza Aguirre abandona la política. La decisión ha estado pendiendo de un hilo desde hace casi un año. Tras el 20-N, en solo unas semanas, pasó de estar rodeada de hombres fuertes del PP ‘a sentir la más absoluta soledad’. Así, al menos, describen la situación desde el entorno político de la hasta ahora presidenta de la Comunidad de Madrid. Su dimisión al fin se ha producido hoy, pero ni la enfermedad, ni la familia, que obviamente han pesado también, han sido las causas principales. La clave está en su relación con Mariano Rajoy, que era en estos momentos insalvable después de muchos meses tensando la cuerda”.
Y conste que podríamos seguir…
LAS FACHADAS
Hoy, cuestión de matices. Abc: “Un adiós meditado desde hace un año”. La Razón: “Arriba Esperanza”. No es Viva, no: Arriba, que tiene su aquél. El Mundo, ya saben sus debilidades, eleva la categoría de la dimisionaria: “La España liberal pierde a su principal referente”. Y al lado, “La prima de riesgo sube de nuevo por la indecisión de Rajoy ante el rescate”. Como diciendo. Y aviso para navegantes: “González será el nuevo presidente si nadie le disputa el liderazgo”. La Gaceta sorprende: “Esperanza Aguirre deja la presidencia de Madrid pero no abandona la política”. O sea, que va a seguir…
EL AFAMADO MUSEO EL OJO IZQUIERDO
(Documentos y testimonios de la vida en las cavernas)
"Esperanza Aguirre ha hecho muy bien en dimitir si con ello pone a su degenerado partido ante algunas responsabilidades. Ella solo tenía un defecto político, aunque muy grave: una anglomanía absorbente que intentaba imponer a todo el mundo. En lo demás, era mucho mejor que el resto de los políticos, empezando por los de su partido. Ha sido más "hombre" que Vidal-Quadras, que Mayor Oreja y otros que han mantenido posiciones patrióticas y democráticas, pero sin arriesgar nada por ellas. El PP es el partido de los Rajoy, Basagoiti, Soraya, Cospedal, Oyarzábal y toda esa gente. En un partido así no puede tener lugar una persona decente, a menos que se signifique por una resistencia clara a la podredumbre".
Pío Moa, La Gaceta, 18 de setiembre de 2012.
Hay 136 Comentarios
Creo que es Thor, tiene gracia desigual.
Publicado por: gflorez | 19/09/2012 2:41:37
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 19/09/2012 0:00:35
Hombre, lo mío no tiene ningún mérito, los partidarios de la ignorancia siempre han tenido dos máximas para defender su validez, la primera que es muy atrevida y la segunda que asegura la felicidad. Se ve a legua en tu caso que ambas máximas se cumplen. Enhorabuena (again).
Publicado por: almigmon | 19/09/2012 1:00:10
Veo que me conoces bien, ciertamente !Soy feliz!
Ayer, hoy y mañana.
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 19/09/2012 0:00:35
Publicado por: almigmon | 18/09/2012 23:40:12
perdón ...ALMIGMON que voy hacer contigo, siempre tan serio y formal.
Alegra la cara hombre, rie que nosotros no duraremos tanto.
Felices sueños, te deseo.
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:53:16
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:37:33
Enhorabuena, decía, porque tienes (y veo que persistes en ello) una capacidad insólita de convertir las palabras en mierda y lo simpático en execrable. ¡¡¡Y aun así se te ve feliz!!!
Publicado por: almigmon | 18/09/2012 23:48:04
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:13:10
Bueno, si no sabes diferenciar entre una defunción y las condolencias que lleva aparejadas y la decisión de dejarlo de una señora a la que sus acólitos la sacan en procesión hasta cuando los deja con el culo al aire y sin 'esperanza'... En fin, para qué seguir... Mi comentario, del que te apropias, estaba dentro de un contexto, el tuyo dentro de la capacidad mental de los extremistas, similar al de la almeja común. Enhorabuena.
Publicado por: almigmon | 18/09/2012 23:40:12
Yo no me alegro de que se vaya el de Paracuellos, pero la PANZADA de reír que me estoy pegando con las lágrimas de los petazetas a los que, pobrecitos, deja huérfanos y, una vez más, con el culo al aire... Buah, es que no tiene precio... o síííííííí´
Fumar alarga la vida, lo otro "NO" (lo alarga).
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:37:33
Publicado por: neposo | 18/09/2012 20:39:28
Gracia, a ver qué pasa al final, si algo me alivia de esta situación kafkiana (de la que a los que no se le puede achacar nada es a los jugadores que bastante llevan aguantado) es que mi abuelo, socio nº113 de la UDS, ya no está aquí para ver el cúmulo de desastres que ha llevado a esta situación. Es sólo fútbol pero es extraordinariamente significativo para poder entender en manos de quién estamos los salmantinos en general, qué tipo de empresarios tenemos, qué tipos de políticos (apunten, que el alcalde será de los que den el salto) y qué tipo de chanchullos exigen unos y otros para poder salvar un club que, lo dicho, es sólo de fútbol pero que sirve a muchos para tener dos horas de entretenimiento, de ilusión, de no pensar en penas, algo que la mayoría de los implicados no pueden decir a su favor, desde luego.
Un abrazo.
Publicado por: almigmon | 18/09/2012 23:32:51
yo tengo mi tanque. mi tanque tiene una trompa grande. mi tanque me lo regaló mi padre caudillo pero nunca me bautizó a su nombre, franco te amo.
lo siento, no quería decir eso, no importa, quiero a mi caudillo y a mi tanque.
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:29:54
fumar provoca impotencia, te lo digo por experiencia de mi falso padre, de mi verdadero padre el caudillo canijo, de hitiler y de mi mismo yo.
lo siento, otra vez mi trastorno de personalidad, lo siento.
Publicado por: Colirio pal ojete (que este rojo) | 18/09/2012 23:23:30