03 marzo, 2008 - 22:03
Dos entradas, mucha bronca
Colea todavía el cabreo de algunos por la falta de organización en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid en el segundo cara a cara entre Rajoy y Zapatero. Pero eso más adelante. A las 21.15 ha llegado como una exhalación la caravana de Rajoy (dos vehículos). La corbata es la misma, la granate que llevó en 'Tengo una palabra para usted' y la que repitió en el primer debate. Si la hubiera cambiado -se comenta- podría sugerir que no le fue bien con ella.
El traje es el que cambia. Esto de los colores es difícil, un tema digno de concretar en un tratado internacional porque ya se sabe que hay tantos como gustos y nadie se pone de acuerdo (¿qué tipo de rosa es el del jersey de Aznar?). El color del traje que lleva hoy Rajoy es azul oscuro, pero no tan oscuro como el de Zapatero. Claro, que esta vez le queda a la medida y no le ajusta como el lunes pasado.
Fotos y "muchas gracias".
Zapatero, que no se deshace de los funcionarios de justicia apostados hoy en la entrada, ha llegado diez minutos después. Por protocolo esto es lo único que no cambia en el orden del debate: el presidente llega el último y sale el primero. Cambia la corbata, azulona con rayas de varios colores. Y coincide con Rajoy en una camisa de color azul celeste. Más parco en palabras que hace siete días (dijo a los fotógrafos que se movían más que los precios) pero igual de inquieto con lo que le rodeaba. Son sus gestos.
Segunda bronca, tras la de los funcionarios de justicia -aquí va otro rapapolvos para la organización-, la que han protagonizado los gráficos. Como se ve en las pantallas, al menos en las del recinto, los dos candidatos hacen un 'mudo' (fotos y grabación sin declaraciones) antes de sentarse -no sé cómo porque no nos dejan verlo-. Esta vez los cámaras y fotógrafos, divididos en dos grupos, han tenido que montarla para pasar. Y han tardado casi cinco minutos en poder hacerlo entre los 'peros' de la seguirdad y los miembros de la organización, a esta hora ya algo agobiados. Arranca el debate.
Comentarios