Seguro que muchos de vosotros habéis hecho alguna vez canopy, esa extraña actividad de riesgo que se ha puesto de moda en zonas tropicales y que permite deslizarse por el techo de la selva, de árbol en árbol, mediante tirolinas y puentes metálicos.
Bien, pues hace unas semanas tuve la oportunidad de volar sobre la canopia de un bosque nuboso de la manera más extraña que os podáis imaginar: en una especie de bicicleta-tándem. La de la foto.
El artilugio lo han inventado en la Reserva Ecológica Mashpi, un precioso bosque nuboso primario situado a unas tres horas al noroeste de Quito, en Ecuador. El invento consta de un cable de 200 metros de longitud que cruza a 75 metros de altura una quebrada cubierta por una bellísima e impenetrable selva.
En vez de deslizarte por él con la típica tirolina a toda velocidad (con la que descargas mucha adrenalina pero no ves nada del susto que llevas en el cuerpo), pasas por el cable sentado en esta especie de silla doble con pedales. El que va detrás pedalea; el de delante va de paquete.
De esta manera cruzas sobre la copa de árboles gigantescos a una velocidad lenta, deleitándote con el paisaje, apreciando las bromelias que colonizan el tronco de las ceibas, viendo con detalle cada uno de los rincones del bosque tropical que por su altura quedan siempre ocultos a las miradas y saludando a los pajaritos en sus nidos. Eso sí, acojonado también a más no poder al ver el patio que se abre debajo.
Pero tranquilos, el ingenio es completamente seguro. Yo volví para contarlo. ¡Una experiencia memorable!
Mashpi es uno de los pocos rincones que quedan en Ecuador del bosque nuboso tropical del Chocó, la selva que un día cubrió toda la costa del Pacífico hasta Panamá y de la que hoy solo queda un 10% intacta. Mashpi tiene 1.200 hectáreas y es privada; la compró un grupo de inversores ecuatorianos con conciencia conservacionista para proteger el bosque primario y que al menos esta pequeña mancha siguiera siendo un reducto de biodiversidad ante el avance imparable de la agricultura y la ganadería. Se calcula que solo en esas 1.200 hectáreas hay más de 500 especies de pájaros.
En un desmonte hecho por la antigua empresa maderera los nuevos dueños construyeron un hotel-lodge de lujo perfectamente integrado en el paisaje para viajeros que quieran vivir una experiencia diferente alojados en la profundidad de una selva húmeda. A los huéspedes les ofrecen paseos con guías naturalistas por el interior del bosque para observación de aves y mariposas, además de la experiencia de la bici-tirolina y otro paseo por la canopia en una especie de teleférico con cabina abierta.
No es una juerga barata, pero es una actividad elitista y diferente a cualquier otra que puedas hacer en Ecuador.
Hay 9 Comentarios
me parece un lugar muy divertido.. un lugar muy hermoso que ofrece la naturaleza con una espectacular diversidad de colores plantas y arboles .... llenando a los turistas de adrenalina y llevando en si una buena aventura en Mashipi...
Publicado por: Alex Vizcaino | 04/03/2016 4:21:20
¿Dónde andará aquel mochilero que fuiste?, ¿o tal vez no lo fuiste nunca?. No lo sé. No lo sé.
Bueno, así nos cuentas, a los reacios de este tipo de experiencias, otra forma de hacer turismo. Eso sí lo haces bien, 'joío'.
Un abrazo.
Publicado por: V(B)iajero Insatisfecho | 04/07/2014 20:52:08
¡¡¡Un pedaleo de altura si Señor, y sin red ni nada!!!...... más que acojonante.
Publicado por: Un país para recorrérselo | 04/07/2014 18:38:52
No sabía ni que existía eso. Está claro que he de viajar más :-) Por cierto la que va delante podría haberlo grabado y ahora tendríamos un precioso video en vez de fotos http://goo.gl/Od6628
Publicado por: Sofía | 04/07/2014 12:07:25
Desde luego se cura el vértigo, pero por precaución sería bueno llevar pedales en los dos asientos, por no quedarse tirados en medio de la selva, si se rompe la cadena.
Un aplauso por el atrevimiento.
Se agradece el acuerdo de mostrarnos esas otras cosas que tiene la naturaleza, en los otros mundos que llenan el planeta.
Además del asfalto ciudadano.
Publicado por: Troya | 04/07/2014 9:43:27
bonita experiencia!! tiene que molar!!!
aunque soy más de bici en el suelo!! :)
http://walktoclick.wordpress.com/2014/07/03/en-bici-por-la-huerta-valenciana/
Publicado por: Cátia Silva | 04/07/2014 9:35:58
no hay nada más hortera que el canopy y sus derivados, además de estafarte, es peligrosísimo por las negligencias "tropicales"
Publicado por: Bom | 04/07/2014 8:19:47
Parece una experiencia muy divertida, que envidia. Si sigues animado con la bicicleta te recomendamos un trayecto mucho más salado: rodar por el salar mas grande del mundo :) http://www.zaiguaweb.com/2013/09/05/salar-de-uyuni/
Publicado por: Zaigua | 04/07/2014 1:57:00
Será "canopying". "Canopy" en español es "dosel". Eso se hace en mi oficio desde los años ochenta, pero la idea de los pedales es genial. Douglas Tompkins hace cosas así en Chile y estas iniciativas sí que son geniales. Muy bien por esta aventura de Mashpi.
Publicado por: Jose | 03/07/2014 19:20:55