Las declaraciones son confusas, como si cada cual quisiera poder decir alguna vez que no dijo esto sino aquello, no perro sino porro, no marrón sino motocicleta, pero, por ahora, parece que los que resistieron la instalación de la mina a cielo abierto en Famatina consiguieron pararla. Y es una sorpresa: hacía tiempo que en la Argentina no pasaba nada en contra de la voluntad del gobierno. Quizá –con el peligro que tienen las comparaciones– desde que la torpeza kirchnerista creó una alianza inverosímil entre pequeños chacareros y grandes latifundistas para oponerse a las retenciones agrarias. (Aunque las diferencias son notorias: para empezar, en Famatina no había grandes intereses del lado de los que se oponían: solo personas que querían seguir adelante con sus vidas. Y, por lo tanto, su tinte político fue radicalmente distinto.)
Los argumentos, que en estos días han vuelto a la carga, para sostener la argentinidad de las Malvinas suelen ser curiosos. El más serio es geográfico: las islas están sentadas sobre la plataforma continental argentina –aunque, si se fijan, es probable que Inglaterra esté, del mismo modo, en la plataforma continental francesa. El histórico es más complicado: fueron españolas –porque el papa Alejandro Borgia se las dio a los Reyes Católicos en una bula de 1494, junto con medio mundo más– pero ningún gobierno argentino las controló nunca, ni pobladores argentinos las habitaron casi. Lo más parecido fue una patente comercial que el general Lavalle, gobernador de la provincia de Buenos Aires, le dio en 1829 a un ciudadano alemán, Luis María Vernet, para que se llegara hasta ese páramo y explotara sus vacas y sus focas; después Vernet fue nombrado gobernador, se mudó con su esposa uruguaya, ejerció un año y medio y en 1831 se fue tras un incidente con unos pesqueros norteamericanos. En 1833 la ocuparon marinos ingleses, y desde entonces se quedaron.
Hay, ahora, allí, pobladores cuyos mayores llegaron mucho antes que la gran mayoría de los ancestros de nosotros argentinos desembarcara en estas costas. Pero los malvinistas dicen que esos señores y señoras no tienen derecho a decidir sus vidas porque no son “pueblos originarios”. No parece importarles el detalle de que nosotros tampoco, que nosotros también llegamos y ocupamos, y que esa plataforma continental que integra las islas a la Argentina es parte de un territorio cuyos “pueblos originarios” –de algún sitio– fueron diezmados y desposeídos por los ejércitos de ocupación argentinos mucho después de que los ingleses poblaran las islas.
La debilidad de los derechos argentinos no da, por supuesto, ningún derecho a los ingleses: ocuparon esas islas por la fuerza como ocuparon tanto mundo en esa época, como los españoles y paraguayos de Garay ocuparon el río de la Plata, como los argentinos de Roca ocuparon las pampas y la Patagonia, como los mapuches las habían ocupado antes que ellos. Es difícil enarbolar legitimidades históricas cuando cada historia empieza con una ocupación: ¿por qué una sería más legítima que otra? Habría que ver, si acaso, en el estado actual de cada proceso, cuál es la solución más justa no para las patrias, esos inventos siniestros, sino para las personas.
Pero, más allá de legitimidades debiluchas y otras chicanas leguleyas, lo que hace que el reclamo argentino sobre las Malvinas me parezca insostenible es que lo repite un país que tiene, al mismo tiempo, tanto territorio nacional abandonado: a grupos económicos tan extranjeros como los que ocupan las Malvinas o a la miseria de sus ¿ciudadanos? El conurbano bonaerense es argentino –y mientras siga habiendo desnutrición en sus familias cualquier dinero gastado en “recuperar” las islas es grosero, cualquier discurso patriótico es obsceno. Y toda la cordillera explotada por mineras multinacionales que dejan chirolas a cambio de los metales que se llevan son la prueba de que el nacionalismo de los gobiernos argentinos –y de este gobierno argentino– es otro homenaje al carnaval.
(Yo no creo en ningún nacionalismo –pero nunca dije que creyera. No creo que una gran minera argentina sea mejor para la mayoría de los argentinos que una gran minera extranjera; no creo, en general, que un explotador argentino sea mejor que un explotador extranjero, pero ésa es la utilidad de los nacionalismos: diluir las diferencias que realmente importan en las puramente simbólicas, discursivas).
Malvineamos, estos últimos días, y eso hizo que se hablara menos de Famatina, de la entrega de recursos naturales por monedas, y de cómo sus promotores oficiales tuvieron que morder el freno. Decíamos: hacía mucho que en la Argentina no pasaba nada en contra de la voluntad del gobierno peronista. Las –muy menguadas– oposiciones juegan, en general, un papel defensivo: intentan responder a los temas que la presidenta pone en las primeras planas. Este gobierno peronista es, sobre todo, el dueño de las palabras: el que decide de qué se habla en la Argentina. Y no porque sea una dictadura, como gritan algunas vírgenes cansadas; lo consigue porque es la base de su política, porque inventa todo el tiempo cosas que contar, porque no tiene pudor en gastar millones del dinero público para difundirlas.
Voy a decir una obviedad: si algo sabe este gobierno peronista es definir la agenda, o sea: son capaces de imponer los temas de los que los demás vamos a hablar. Voy a decir otra: si algo no saben o no hacen sus diversos opositores es definir la agenda, o sea: no son capaces de imponer los temas de los que los demás vamos a hablar. Y voy a decir una tercera: el que define la agenda tiene una ventaja decisiva en la pelea política.
El tema Famatina llegó a la atención pública sin que los gobiernos provincial o nacional quisieran: habrían preferido, al respecto, la salud de los silencios. Eso lo hace particularmente interesante: porque muestra otra vez la fuerza que adquieren ciertos movimientos cuando pueden imponer un tema propio. Este era, todavía, defensivo: la reacción contra una medida del gobierno que muchos percibieron como dañina. Si esos movimientos –y los grupos de intelectuales que ahora se reúnen para discutir lo que hace el gobierno– pudieran elaborar sus propios temas y lanzarlos, mucho cambiaría en el panorama político argentino.
Se acabaría, para empezar, la ficción de que puede haber una oposición, la Oposición. Si su función deja de ser defensiva –ay no hagan esto, ay cómo hacen lo otro–, si empiezan a proponer temas, sus diferencias se harán más y más claras. Pero, sobre todo: el gobierno, en lugar de decir de qué se habla, tendría que empezar a contestar.
Hay 234 Comentarios
Que el gobierno imponga la agenda tiene que ver con el nuevo monopolio mediático que está gestando
Publicado por: José | 11/03/2012 18:26:26
El canciller Guido Di Tella, en la reunión del Comité de Descolonización de la ONU, celebrado en Nueva York en julio de 1996, estuvo correcto al sostener que "el principio a la libre determinación se tergiversa si se pretende interpretarlo de forma tal de otorgar ese derecho a los propios súbditos de la potencia colonial, a expensas de la comunidad política que sí ha sufrido la acción colonial".
Para los habitantes de las Malvinas, la autodeterminación puede ser una aspiración para convertirse en verdaderos dueños del territorio. Para el Reino Unido no es más que una carta para jugar en la mesa de negociaciones, como se ha dicho. Pero si, llega a desarrollarse una gran riqueza en el archipiélago -el petróleo, por ejemplo-, entonces será difícil que los ingleses dejen este beneficio en manos de los habitantes de Malvinas.
Publicado por: marce | 18/02/2012 8:39:09
Para abel que publico el 17/02/2012 7:08:10 diciendo que la guerra la perdimos y por lo tanto le pertenecian a los ingleses:
"En 1933, los Estados americanos durante la XII Conferencia Internacional Americana de Montevideo, consagraron una doctrina fundamental de derecho americano al establecer:
"Los Estados contratantes consagran en definitiva como norma de su conducta la obligación precisa de no reconocer las adquisiciones territoriales o de ventajas especiales que se realizan por la fuerza, ya sea que esta consista en el uso de armas, en representaciones diplomáticas conminatorias o en cualquier otro medio de coacción efectiva. El territorio de los estados es inviolable y no puede ser objeto de ocupaciones militares ni de otras medidas de fuerza impuestas por otros Estados, indirecta ni indirectamente, ni por motivo alguno , ni aun de manera temporal"
Publicado por: marce | 18/02/2012 8:00:12
Desde 1811, fecha en que las islas Malvinas fueron abandonadas por los españoles estas no se poblaron y tampoco hubo reclamo de ninguna nación sobre el archipiélago.
El gobernador de Buenos Aires, Martín Rodríguez, envió en 1820 al buque Heroína con el objetivo de ocupar las islas.
En 1825 Inglaterra firmó un Tratado de amistad, comercio y navegación con las Provincias Unidas en el que tácitamente reconocía la soberanía de este nuevo Estado.
Durante el gobierno de Lavalle, el 10 de junio de 1829, fue creada la Comandancia Política y Militar con sede en Puerto Soledad: su jurisdicción se extendía a las islas Malvinas, e islas adyacentes hasta el Cabo de Hornos. Luis Vernet con el cargo de Comandante se estableció con dos docenas de colonos que se dedicaron a la cría de ganado, la pesca y la caza de lobos marinos.
En 1831 se apresaron buques norteamericanos que pescaban transgrediendo la reglamentación argentina. Los reclamos del cónsul norteamericano ante el gobernador Rosas fueron respaldados con la presencia de la Corbeta Lexington en Buenos Aires, la que luego se trasladó a Puerto Soledad y lo saqueó. Esta agresión se acompañó con las gestiones diplomáticas en las que los Estados Unidos reconocían la soberanía de Gran Bretaña sobre las islas. Rosas designó a Esteban Mestivier en reemplazo de Vernet el 10 de septiembre de 1832.
El conflicto desencadenado cuestionaba la soberanía argentina y beneficiaba los planes ingleses sobre la región del Cabo de Hornos, posible ruta interoceánica hacia Australia, donde Gran Bretaña tenía importantes intereses coloniales.
La fragata británica de guerra Clío tomó posesión de la isla el 2 de enero de 1833, durante el gobierno de Balcarce.
En su segundo gobierno (1838), Rosas intentó obtener la cancelación de la deuda contraída por Rivadavia con la casa Baring de Londres a cambio de la sesión de los derechos argentinos sobre las islas. El gobierno inglés no aceptó porque de hecho ya las poseía y aceptar la propuesta hubiera significado reconocer los derechos argentinos.
Publicado por: marce | 18/02/2012 7:22:47
¿Cómo se puede entender el uso del discurso nacionalista por el tema Malvinas pero al mismo tiempo reprimir a pueblos enteros en defensa de los intereses de empresas extranjeras?
La única explicación que le encentro es que se trata de una "cortina de humo" en el contexto del crecimiento de la represión en el país y de la aplicación de la "sintonía fina" (Ajuste).
Publicado por: Leandro | 18/02/2012 6:21:43
Okay, entonces si mañana delincuentes ocupan la casa del señor Caparros el Estado no deberia hacer nada porque a 5 km de su casa hay miseria. En Su razonamiento sería obscena tal intervención. Gracias Señor autor por definir con tanta claridad qué es obsceno y qué no ¿Saben que es obsceno? Es obsceno que Inglaterra haya invadido las islas, haya introducido a su gente, y ahora argumente en favor de la autodeterminación ¡Pero miren qué lindo chiste,eh! Es obsceno que a pesar de todo esto gente como el autor defienda tal accionar. Si es así entonces propongo que mañana invadamos al peor país del mundo, ocupemos su territorio, echemos a sus gentes y luego apelemos a la autodeterminación para quedarnos con esas tierras. Total que importa. Evidentemente no tendríamos ninguna oposición ya que la fuerza lo puede todo. Coincido con varios otros puntos que el autor hace, pero en relación a Malvinas me parece que le pifió al inodoro. Además su estilo irónico y sarcástico ofende, hay temas que deben tratarse con más seriedad.
Publicado por: Juan | 17/02/2012 23:49:05
Okay, entonces si mañana delincuentes ocupan la casa del señor Caparros el Estado no deberia hacer nada porque a 5 km de su casa hay miseria. En Su razonamiento sería obscena tal intervención. Gracias Señor autor por definir con tanta claridad qué es obsceno y qué no ¿Saben que es obsceno? Es obsceno que Inglaterra haya invadido las islas, haya introducido a su gente, y ahora argumente en favor de la autodeterminación ¡Pero miren qué lindo chiste,eh! Es obsceno que a pesar de todo esto gente como el autor defienda tal accionar. Si es así entonces propongo que mañana invadamos al peor país del mundo, ocupemos su territorio, echemos a sus gentes y luego apelemos a la autodeterminación para quedarnos con esas tierras. Total que importa. Evidentemente no tendríamos ninguna oposición ya que la fuerza lo puede todo. Coincido con varios otros puntos que el autor hace, pero en relación a Malvinas me parece que le pifió al inodoro. Además su estilo irónico y sarcástico ofende, hay temas que deben tratarse con más seriedad.
Publicado por: Juan | 17/02/2012 23:47:49
Te digo, Caparrós, que "mientras siga habiendo desnutrición en sus familias cualquier dinero gastado en" publicar tus libros es dinero malgastado. Y ya que vivís en España, te despido a la española: vete a tomar por culo...
Publicado por: Account Deleted | 17/02/2012 23:26:48
Cien por ciento de acuerdo con el autor.
Publicado por: Santiago Basulto | 17/02/2012 23:20:01
Coincido con Verónica, no hay que caer en patrioterismo barato, mientas en nuestro bendito pais haya una sola persona que se muera de hambre con la cantidad de recursos con que se cuenta, mientras sigamos mirando patéticamente lo que nos pasa y no lo queremos asumir, no tenemos derecho moral a usar el tema de Malvinas como un logro de este gobierno.
Publicado por: Ubaldo | 17/02/2012 19:02:42
Le sugiero leer el artículo de hoy firmado por Eduardo Menem, en La Nación. Sería interesante que Ud y él debatan públicamente, aportando la documentación que sostenga sus afirmaciones, para dirimir si tenemos o no derechos sobre las Islas. Con respecto a lo del hambre y la minería.... se podría esperar de Ud. un argumento menos falaz y populachero. Es como que Ud. le dijera a su familia "no discutamos sobre la casa que unos okupas nos usurparon porque tenems un hijo mogólico". No veo sensatez en ese razonamiento. Y, aparte, Ud. se queda muy corto en su preocupación si solamente le preocupa "el hambre a 5 Km".
Publicado por: Carlos Galvalizi DNI 7.642.1247 | 17/02/2012 15:55:52
Le sugiero leer el artículo de hoy firmado por Eduardo Menem, en La Nación. Sería interesante que Ud y él debatan públicamente, aportando la documentación que sostenga sus afirmaciones, para dirimir si tenemos o no derechos sobre las Islas. Con respecto a lo del hambre y la minería.... se podría esperar de Ud. un argumento menos falaz y populachero. Es como que Ud. le dijera a su familia "no discutamos sobre la casa que unos okupas nos usurparon porque tenems un hijo mogólico". No veo sensatez en ese razonamiento. Y, aparte, Ud. se queda muy corto en su preocupación si solamente le preocupa "el hambre a 5 Km".
Publicado por: Carlos Galvalizi DNI 7.642.1247 | 17/02/2012 15:55:51
Con el hambre, desocupacion, desempleo y falta de salud publica de 40 millones de norteamericanos, ¿que hacen invadiendo tantos paises Caparros? ¿no sera un poco mas complejo el asunto?
Argentina esta dando una batalla diplomatica contra la diplomacia mas astuta del planeta y de la historia como es la inglesa.
No tenes idea la burrada que estas cometiendo con estas notitas berretas y egolatras en donde pueden ser usadas por los eternos invasores para un eventual juico internacional. Informate un poco mas argentino.
Publicado por: bremdola | 17/02/2012 15:48:21
El ajuste de la clase media y baja inglesa tambien hace inmoral el despliegue de tropas hacia America del sur. ¡ay Caparros! con ese tonito tan concheto, no hables de hambre que causas gracia. Vos no ves a un pobre ni por internet. Como te estan usando los conservadores de aqui y alla, los mismos que te van a sensurar cuandos sean poder...o no? tal vez ya que te afiliaron a sus ideales .
Publicado por: bremdola | 17/02/2012 15:33:27
Bueno Caparrós, no pienso comprar un libro tuyo hasta que no se termine el hambre mundial...
Publicado por: Hernán | 17/02/2012 15:23:56
aparte, pienso que no viste el punto del articulo: porque la ocupación de la corona española iba a tener alguna legitimidad extra que no tienen las demas, y aparte, si la tuviera, porque cuando ganan si, y cuando pierden no.
Publicado por: RespClaudio | 17/02/2012 14:56:18
Claudio: Argentina podría entonces reclamar el territorio de Uruguay, o Uruguay el de las provicioas de la Banda Oriental? O América Hispanoparlante hacer retroceder a Brasil a la Línea de Tordesillas?
Ya fue.
Publicado por: RespClaudio | 17/02/2012 14:54:02
Argentina junto Haitì son los unicos paìses de America que tienen parte de territorio ocupado, en el caso nuestro ahora por una base de la OTAN.La posicion de decir que para que si hay tanto territorio vacìo , se parece a la de que siempre que participe en algun conflicto decian para que? si...nosotrooos ..Esta clarisimo que el gobierno le da manija a esto para desviar atenciones(en Inglaterra tambien) pero mas alla de eso,los porque que lo estudie otro el tema de malvinizar siempre es progresivo, para reivindicar a los que dieron su vida en la guerra por lo menos.
Publicado por: Willywu | 17/02/2012 14:48:01
Muy buen artículo Martín. Me queda la interrogante de si se puede relacionar el discurso de malvinas con lo que planteás en tu entrada sobre lo kmaleónico... no sé si por ser de Uruguay me cuesta pensar cómo la sociedad en su momento pudo apoyar esa guerra. Un saludo!
Publicado por: javier | 17/02/2012 14:30:09
Que pobre argumento lo de las plataformas marinas, se te ha ocurrido a ti o lo has copiado de otro lado? Porque si vamos al caso Japon esta en la platforma continental de China y no por eso China reclama soberania. Aca se esta hablando del derecho inernacional, las Islas Malvinas junto con Argentina pertenecian a la corona española, cuando argentina se independiza de la corona este territorio (Las Malvinas) pasa a manos argentinas.
CAPARROSIN seria bueno que te asesores un poco mejor y deja de escribir por el solo hecho de escribir para justificar el sueldo que te pagan publicando columnas con el solo proposito de crear polemica sin fundamento.
Publicado por: Claudio | 17/02/2012 14:28:58
Argentinos: un poquito de autocrítica por favor. El argumento de la plataforma continental para reclamar la soberanía sobre las islas y declarar, cual resentidos infantes que tarde descubren el valor de un chiche, que "los ingleses nos las robaron" se cae a pedazos. Cuando los ingleses ocuparon la isla, además de no someter a ningún pueblo originario, no violaban ninguna ley. La Ley de Soberanía en el Mar Argentino es de 1966!!!!
Ser autocríticos no nos convierte en cipayos, ni vende patrias.
Publicado por: Veronica | 17/02/2012 14:28:53
por otra parte, en cuanto al argumento de la plataforma continental. No lo usarán los franceses para decir que Inglaterra es fracesa, pero sí lo usan los ingleses para argumentar que Inglaterra es parte del continente europeo. Porque es parte del mismo bloque de tierra que vuelve a emerger del océano.
Como sabemos los argumentos suelen ser difusos, y cada uno los utiliza polìticamente segùn sus intereses. Sabemos los intereses de los británicos. Hay que ver cuáles son los intereses de Caparrós
Publicado por: Pablo Martillana | 17/02/2012 14:20:55
Hola Sergio Povarchick por favor leé esto, noticia fresquita:
http://www.ambito.com/noticia.asp?id=624829
si la querés es inglés aquí:
http://www.buenosairesherald.com/article/92965/malvinas-oil-rig-exploring-in-argentine-seas
Por otro lado dejo un comentario, los que fuimos pibes de 18 años de hace 30 años lamentablemente no fuimos los mismos de 18 de hoy, ahora es frecuente el adolescente de guindas colgando de 30 años que todavía vive en casa de los padres. A veces por comodidad y muchas otras por necesidad porque resulta imposible independizarse económicamente.
Publicado por: Raúl | 17/02/2012 14:17:34
sin caer en patrioterismos, me sorprende que Caparrós sea tan tendencioso en contra de nuestros intereses. Que diga por ejemplo "en 1833 llegaron los ingleses y a partir de ahi se quedaron". Desconociendo que hubo resistencia. Que al gaucho Rivero se lo liberò de condena por "haberse comentido los hechos fuera de los dominios de la corona britànica". Desconociendo que sea parte de una serie de intentos ingleses por instalarse en América del Sur.
Por otra parte, en cuanto a los pueblos originarios, ellos tambièn fueron parte de una revoluciòn nacional que pretendìa contenerlos en su identidad. Si bien sus principios luego fueran traicionados y fuera parte de las guerras internas latinoamericanas
Publicado por: Pablo Martillana | 17/02/2012 14:15:19
La Argentina tras su independencia, heredó los derechos de España en virtud de la doctrina del uti possidetis iuris y de la de sucesión de estados, por lo que ejerció un dominio eminente a partir de 1810. Al reconocer España la independencia argentina, cedió explícitamente esos derechos con retroactividad al 25 de mayo de 1810.
Cuando las Provincias Unidas del Rio de la Plata tomaron posesión efectiva de las islas el 6 de noviembre de 1820, el Reino Unido no efectuó protesta alguna. Ni lo hizo el 15 de diciembre de 1823 cuando reconoció a las Provincias Unidas, ni cuando firmó con ellas el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación del 2 de febrero de 1825. Su primera protesta ocurrió recién el 19 de noviembre de 1831.
El Reino Unido ocupo las islas por la fuerza en 1833, expulsando a su población y no permitiendo su retorno, vulnerando así la integridad territorial argentina y su unidad nacional. Los cual es contrario a la Resolución 1514 (XV) de las Naciones Unidas relativa a la Declaración sobre la Concesión de la Independencia a los Países y Pueblos Coloniales, la cual establece en su párrafo sexto que todo intento encaminado a quebrar total o parcialmente la unidad nacional y la integridad territorial de un país es incompatible con los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas.
Publicado por: Luis | 17/02/2012 14:13:51