Martín Caparrós

Crecer a golpes

Por: | 03 de mayo de 2014

OPI_2514-HomeCrecer a golpes es el título de un libro reciente que Penguin publicó, en castellano, en Estados Unidos, y se distribuyó en varios países del continente. Se subtitula “Crónicas y ensayos de América Latina a cuarenta años de Allende y Pinochet”, lo editó Diego Fonseca e incluye 14 textos de gente como Jon Lee Anderson, Álvaro Enrigue, Patricio Fernández, Enric González, Boris Muñoz, Leonardo Padura, Sergio Ramírez, yo mismo y varios más –cada uno sobre su país.

La semana pasada, algunos de nosotros estuvimos presentándolo –debates, discusiones– en Harvard y Brown y el Instituto Cervantes de Nueva York. Allí entendimos, entre otras cosas, que no sabemos muy bien de qué hablamos cuando hablamos de América Latina –pero que queremos seguir hablando de ella.

Mi texto habla sobre el peso de la muerte en la historia y la política patrias. Me pareció que era un tema siempre vivo. Se llama O Juremos – Sobre patrias y muertes argentinas y ésta es su última parte:

 

Todos se mueren. Los argentinos no somos la excepción a esa regla: todos nos morimos. Lo raro es lo que hacemos con los cuerpos.

                                                           *        *        *

Entre 1976 y 1980 los militares argentinos –con el apoyo de buena parte de la sociedad argentina– se dedicaron a matar militantes de izquierda y esconderlos. Fue lo que el teniente general Videla llamó, con prosa envidiable, “los desaparecidos”. La palabra prendió, fue retomada en muchas lenguas. Jorge Luis Borges confesó muchas veces que su mayor ambición era dejar un giro, una palabra nueva en el idioma; el que lo consiguió fue el más bruto de sus comensales.

Desaparecer los cuerpos era fiarlos a un futuro negado. Generales punks creían en el aquí y ahora –en el allí y entonces–, que es como decir que creían en un presente permanente, un tiempo siempre igual a sí mismo donde nadie estaría en condiciones de pedirles las cuentas. Creían que si en aquel momento preciso no se hacían cargo, nunca deberían. Y eligieron no hacerlo y esconderlos: apostar al presente interminable.

                                                            *        *        *

Foucault lo decía bastante claro: el poder muestra su poder sobre el cuerpo del delito –cuerpo del delincuente– para educar sobre la ley. Castiga, mata en público para imponer sus leyes. Aunque a veces esos muertos pueden volvérsele en contra: pueden volverse banderas –o vergüenzas.

Aquellos poderosos argentinos, siempre mediocres, siempre a media asta, prefirieron no enfrentar sus actos: no educar por medio de esos muertos, sólo deshacerse de unos miles que los molestaban. Aquellos militares renunciaron al boato de la muerte y se hundieron en la modestia del hurto, del birlibirloque.

Cuando un cadáver enemigo se esconde en lugar de ser exhibido como insignia de la propia potencia es que el temor a su uso sacrificial o relicario prima. Si la exhibición supone una presunta debilidad que quiere legitimar su fuerza, el ocultamiento muestra una fuerza supuesta que no acepta su debilidad.

La desaparición es la muerte que no se hace cargo de su potencia educativa, legalizadora. La desaparición intenta una suerte de puesta entre paréntesis, ilusoria por aquello de que todo muerto debe tener su lugar y su función, y de muertos errantes se han poblado siempre las pesadillas, los horrores.

                                                           *        *        *

Y nunca fueron los muertos los que enterraron a sus muertos.

                                                           *        *        *

La desaparición creó, también, otros equívocos: en esos días los deudos –las deudas, esas madres– de los muertos no lloraban muertos; pedían por vivos raros, por “desaparecidos”. Para pedir por ellos –para pedir a los verdugos que buscaran a sus víctimas– debían cambiarles la identidad, la historia. No podían decir venimos a pedir por nuestros hijos guerrilleros; tenían que decir venimos a pedir por unos muchachos buenos tan tranquilos mire vea. Así se fue escribiendo una mirada de la historia: gracias a la existencia de desaparecidos –gracias a la inexistencia de esos muertos–, los militantes asesinados no fueron, durante mucho tiempo, lo que sí habían sido: muchachos y muchachas que habían elegido un camino en la vida. La historia no los registró por lo que hicieron sino por lo que les hicieron: secuestrados asesinados escamoteados, desaparecidos. No, fueron, para la historia, los sujetos de sus propias decisiones, sino objetos de las decisiones –violentas, criminales– de otros: sus verdugos. Aquellos muchachos y muchachas perdieron, con sus vidas, sus historias. Sus madres, los buenos, los que los querían, volvieron, con su relato, a desaparecer a los desaparecidos.

(Y también, de algún modo, demonizaron y despolitizaron a los militares: como verdugos de muchachos buenos inocentes ya no eran soldados con el fin político de matar a sus opositores sino locos sedientos asesinos –perturbados. Así, las razones verdaderas de sus actos quedaron, durante muchos años, en las sombras.)

                                                           *        *        *

Durante décadas, la mayoría de los argentinos aceptó –de algún modo aceptó– la decisión de aquellos militares: prefirió no saber bien qué había pasado. Por eso, todavía, todos esos muchachos y muchachas –sus historias, sus vidas– siguieron ocultados bajo el nombre común de desaparecidos.

                                                           *        *        *

Era uno de los gritos más ambiguos de la historia política argentina, un reclamo imposible: “Los desaparecidos/ que digan dónde están”.

                                                           *        *        *

Los tiempos del recuerdo son confusos: pasaron más de veinte años antes de que hubiera una masa crítica –más allá de los desconocidos de siempre– que intentara enterarse. Empezó a suceder a fines de los años noventa; al fin dijeron –otros lo dijeron: no habían sido víctimas pasivas sino militantes, gente que había decidido. Lo cual produjo discusiones, revisiones –incluso enfrentamientos. Y no los hizo menos víctimas, ni hizo inocentes a sus victimarios; les devolvió su historia. A partir de entonces el peso de esos muertos en la vida argentina creció de otra manera: para un sector bastante amplio se convirtieron en la fuente de toda verdad y legitimidad, pasaron de ser lo inconfesable a ser lo incontestable.

                                                           *        *        *

–Sí, claro, es hijo de desaparecidos.

Su linaje se volvió la línea más perfecta, decisiva.

                                                           *        *        *

Sólo faltaba que alguien tuviera la astucia suficiente como para beneficiarse de esa herencia –y fue un doctor Néstor Carlos Kirchner.

Que prometió dos cosas paralelas: que construiría “un país normal” y que reviviría “la Memoria”. Que usó esos cuerpos desaparecidos como nadie, como instrumento para zanjar cualquier debate, para desaparecer cualquier idea. La emoción del recuerdo se imponía –y tampoco importaba que ese recuerdo fuera un relato perfectamente adulterado.

El doctor Kirchner hablaba tanto de la muerte: basaba su mito de sí mismo en el recuerdo de esos muertos desaparecidos, pretendía que su gobierno era la concreción de aquellos ideales –aunque fuera, generalmente, lo contrario.

Pero después se le ocurrió morirse.

                                                           *        *        *

Y otra vez otra muerte se hizo dueña. En la Argentina no hay político más poderoso que la muerte –y vuelve y vuelve y no nos suelta. Queda dicho: en la Argentina no hay movimiento que funcione sin el respaldo de sus muertos: el reclamo por las víctimas, el peso de los mártires es un sustrato ineludible.

En pocas horas ese hombre se había convertido en otro hombre. Un día era un político muy controvertido; al otro, un estadista. O más: un mártir que murió porque, enfermo, no quiso dejar de pelear por el bienestar de su país, un argentino excepcional, un gran patriota. La muerte, en nuestra cultura, suspende las críticas; así empezaba la construcción del héroe.

                                                           *        *        *

Quisieron –¿supieron?– usar con esta muerte todas las enseñanzas sobre los argentinos y la muerte.

Fue el mayor esfuerzo publicitario que se haya visto en muchos años, dedicado a convertir al difunto de un infarto banal en un gran muerto patrio, de esos que sostienen políticas y se vuelven banderas y las fracciones se disputan. Dijeron que era “el desaparecido 30.001” –uniendo en una sola frase dos falacias. Cantaron –en todos los espacios publicitarios de la televisión cantaron– esas cosas: “¿Será verdad/ que te fuiste con la historia/ o será que aun no despertamos/ y que con una antorcha nueva/ en cada mano/ vas a volver/ cubriéndonos de gloria?”.

                                                           *        *        *

El hombre que mejor usó a los muertos se volvió un muerto que su mujer usó mejor.

                                                           *        *        *

Poco después de convertirse en muerto. en sus primeros meses como muerto, el doctor ya era hospitales, avenidas, plazas, comisarías, puentes, estaciones de tren, estaciones de micro, auditorios, rutas, aeropuertos, escuelas, campeonatos de fútbol, barrios, puentes.

Unos meses después de convertirse en muerto, el doctor ya era el caballo que llevó a su señora viuda a la victoria. (…) En octubre de 2011 la viuda que lo llamaba Él, que nunca dejaba de invocarlo, que ponía de su lado a todos los muertos y al más publicitado de los muertos, ganó las elecciones por escándalo. Dos años antes –todos vivos– las había perdido sin remedio.

Fue la última –las más reciente– intervención triunfante de la muerte en la política argentina. Pero tuvo un carácter distinto. Ahora el muerto era pura construcción de discurso, su heroicidad era pura construcción de discurso. Su cuerpo, en cambio, estaba ahí, donde viven los muertos: en un mauseoleo bien hortera –mármol, piedras, brishitos– en un pueblo del sur, aburrido del viento. Un cuerpo en su lugar, ninguna épica, ni un poco de misterio; relato que sustituye al drama verdadero.

                                                           *        *        *

Una muerte casi normal en un país que no consigue serlo.

                                                           *        *        *

(Y, como posdata, para acabar con ese cuento, el último de los desaparecidos, el final por ahora: el ex teniente general Jorge Rafael Videla se murió en su cama o su inodoro el 17 de mayo de 2013, lo autopsiaron bastante y, cuando quisieron enterrarlo, no pudieron: los vecinos de su pueblo natal –Mercedes, pampa rica cerca de Buenos Aires– le negaron la tierra que él negara a tantos. Días y días el cuerpo de Videla fue un cuerpo sin lugar, oculto, rechazado –la suerte de los desaparecidos–, hasta que al fin fue enterrado en otro sitio, casi en secreto, y acabó con un ciclo. Cuarenta años de historia, cinco siglos de historia. Quizás, ahora, empiece otra.

Es improbable.

La muerte no se rinde.)

Hay 96 Comentarios

Pinochet modernizo chile luego del fracaso social-castrista corrupto e inepto

"Crecer a golpes".
Pero alguien q "viviò" la historia y es "absoluta minorìa descartable", sin pretender ni arrogarse ser el dueño de ninguna verdad, podrìa dar una versiòn absolutamente opuesta.
O NO?
Defender adolescentes cooptados y captados por "ideologìas" extrañas, cuando el paìs tenìa pleno empleo
y su "seudodirigencia" polìtica golpeaba puertas de cuarteles luego de ROBAR IMPUNEMENTE dineros y hacer negociados espurios, pareciera para
Caparròs, Anguita, VHM y tantos otros una peccata minuta.
Pero NO ES ASÌ.
Son todos còmplices.
Cuando la dirigencia polìtica de un paìs?
GOLPEA PUERTA DE CUARTELES´
demuestra en su actitud ser peor que los MILICOS.
Ya q estos ùltimos sòlo fueron preparados para pelear por
el territorio, NO PARA GOBERNAR.
De allì mi consideraciòn de infame inepto, corrupto e infame
a aquel dirigente q aùn se considere PJ.
Q Martìn venga con el titular del epìgrafe
""Crecer a Golpes" revela pobreza intelectual.
Los MILICOS son culpables de horrores,
Còmo calificarìa Martìn a la dirigencia polìtica argenta?
Si son PÈORES QUE LOS MILICOS.
O acaso los DDHH del presente, luego de 30 años de "supuesta" democracia se RESPETAN?
Hablar de MUERTOS siempre da màs rèdito q ocuparse del PRESENTE.
Nadie "crece a golpes". A lo sumo habrìa q denunciar a toda la dirigencia argenta q se dedicò a chupar la sangre de quienes se rompen el traste y pagan impuestos para mantener SEÑORES FEUDALES DE LA EDAD MEDIA.
O acaso vamos a seguir hablando del pasado?
O alguien puede creer q realmente se va a hacer JUSTICIA?
Por favor, nadie tiene el derecho de herir mis neuronas y
seguir vendiendo PESCADO PODRIDO.

otro santo para la colección y van...pensar q san mujica, de la villa se iba al club Arg de Tennis a jugar con Mariano Grondona y de allí a la casita de los viejos en palermo chico.
Con pasaje de vuelta, cualquiera.
Rezó x el alma de los pistomontos; Aramburu no tendría.
Y Eduardo "DDHH" Duhalde lo amenazó mal al segundo de lópez rega.
Quiso ser protagonista del pèronismo.
Lamentablemente lo logró

la culpa no es del selfie mariotto sino del bergoglio q le da de comer

Caparròs, Anguita y Cìa. vendieron pescado podrido?
Este artìculo revela como la "historia oficial" y lo "polìticamente correcto", desvirtùan lo q con evidente "intenciòn" citan como absolutamente verdadero y comprobable.
http://www.perfil.com/columnistas/Quien-mato-al-padre-Mugica-20140511-0049.html
Resulta al menos JOCOSO q tanto ingenuo e inocente crea en ateos inveterados, Mariotto x ej.,hablen del
PRIMER CURA PERONISTA? y viajen al VATICANO
para la foto selfie, cual Documento de Identidad
q demostrarìa ser "buena gente"ante el lumpenismo argento q tanto admira a personajes q viven metièndole la mano en el bolsillo y los hunden en la pobreza y miseria.
cuando el creador de la doctrina tercermundista (obispo brasilero) teorizò respecto llegada de Cristo era un mensaje
de violencia para terminar con la INJUSTICIA HUMANA.
En fin, e lo k ay.

la novia de Costa es una mediocre actriz q trabajó en una peli con el "corpo" Suar, lucía maciel. No es muy agraciada q digamos.
¡¡¡quiero laburar con Chiche!! jajaja

est Aldosuh, terrorífico q "el país" y la "opinión pública" aplaudan las PAso.
Arg y Uruguay son los 2 únicos países del mundo donde el Estado obliga a los partidos a ir obligatoriamente a una interna y, además, con voto obligatorio.

santiago.
Si seguimos asì, pese al yuyito y demàs farsa de "industria nacional" y de la recaudaciòn de + U$ 900.000 M, administrando? el 75% de esos dineros,
mucho decente vendrà a "avivarse" dentro de poco què
la deuda interna y externa es superior a la de 2001,
y que jamàs el FPV intentò un "modelo" p/frenar inflaciòn
y todo ello unido, lleva a un crecimiento inusitado de pobres cada dìa, semana y mes q transcurra.
Peor aùn, el "verdadero" PBI serìa apenas + alto que
el de 1998.
Habiendo pagado CASH u$ 10.000 M. el difunto se asegurò "intervenir" el INDEC y engrupir a la gilada durante
84 MESES al 33% de la realidad.
Ahora, recièn ahora? muchos se desayunan que la pobreza ronda el 40/45%. Vaya "comunicadores" los que vendieron
tantos años PESCADO PODRIDO y ESPEJITOS DE COLORES.
Respetuosamente.

Primo y santiago.
Entrando en sus "jugosos y desopilantes" (no por errados),
me permito comunicarles un pequeño detalle.
El reemplazante "camporita" de Lassie Moreno es
un tal A.costa.
Habiendo + de un personaje en el juego de salita de 3 polìtico argento, ya nos llega "a TODOS Y TODAS" la etapa del A.cueste (sin cuentos de madres o abuelas para hacer noni noni).
Cuaderno del acostado. Jorge Asìs (1988).
Acerca de còmo la UCR del Alfonso y sus jòvenes tutelados x el monje negro COTI y su "banda" de "coordinadores" ninguneò y acostò al susodicho producto del èxito editorial durante el PROCESO de
FLORES ROBADAS EN LOS JARDINES DE QUILMES.
Vàlgame Dios q pretenda en este comentario defender a un personaje que se considera PERONISTA.
Simplemente me refiero a los "acosta.dos" que dejaràn
estos camaleònicos fascistas què crearon las PASO para la Opasiciòn, reservàndose el "derecho de admisiòn" (por afuera) de 3 listas PJ (sumadas fueron el 80% en Pcia. Bs.As.

"A partir de mañana..." el aguantadero entrará en frenesí, buscando algún 'oyoabrido' para la vacante en la corte suprema. Alguien que garantice impunidad, y que conforme a la Gil's(h)ada.

pág/12 cultiva el Peronismo de Salita de Tres:
"el indec actualizo los datos de la estructura productiva que se usa para calcular el pib
La economía creció mucho, pero no tanto"
a chuparse el dedo, jajajaj

A diferencia de Bambi que sigue boludeando en el bosque, su amiguito Lanata escribe, con el bisturí, hasta el hueso; y ayuda a la gilada a armar, el rompecabezas de la estructura mafiosa guberna-mental. Cuando se pregunten dónde fueron a parar los 300.000.000.000usd del exedente de los últimos diez años, quedarán al descubierto las maniobras para 'recaudar' la guita que deberia haber ido a la alimentación, educación, y desarrollo de los subsidiados... http://www.clarin.com/opinion/pais-gran-timba_0_1135686475.html ...timba, falopa, y furcias: el adn del modelo 'narc&popó'. Buen provecho!

es más, Primo jamás escribió unas Memorias con el talento literario exhibido x aldo de la v:
http://www.masoportunidades.com.ar/aviso/6990659-la-cabeza-contra-el-suelo-paco-jamandreu-edicion-de-la-flor-disponible-en-buenos-aires

Mal lugar, la gayola... pa' usar rodete.

Aunq me despierta admiración, Primo; Leo va camino al manicomio, así Karina Olga pasa a ser la administradora de sus bienes.
Después aparece el video hot de KO con víctor h morales.
En dos meses ud será el dueño del edificio.

Primo habla de puro envidioso nomás; ¿recuerda cuando aldo de la v fue dirigido x luchino visconti?, ah, no sé acuerda...
http://momentokamarada-de-reflexao.blogspot.com.ar/2012/04/nazista-gay.html

¡Qué épocas! ¿se acuerdan de aldo 'la porota' vercellino? Aquel artissssta que nos 'paramilitaba' desde su blog (prestado por magnetto) adornado con ilustraciones de hannibal lécter? ¿y de sus soldaditos del cotolengo personal? : Daniel, daniel, marcelo, camila, dos men 'tiras', juan manuel sarasa (juanbecc), ni colita... ¿final mente los habrá vencido la verguenza? Eran có-micos!. Como en la foto que les deje, del artisssta y su parten aire -que como si fuera un chiste del bardo de trinchera leon (el rey de los animales) gieco- se llama: ¡¡Orozco!! : http://2.bp.blogspot.com/-BfUFnT63eCQ/UPcx0hyfkuI/AAAAAAAAFx0/UkCgxEjcezo/s1600/100_3230.JPG ...¡Buen provecho!

Hace una década, un 'operador' pj del PJ* se escandalizaba cuando le decia que me parecia muy bien que los kitschner los hundieran; porque el único consuelo posible en éste país es que, a la bacteria que nos enferma, se la coma un virus... aún a 'Costa' nuestra. Mis respetos (*Poder Judicial)

Vamos, Santiago ... como se você não gosta de ser naufragou nas costas!

¿pero sabe Primo, q la Zuvic, como Presidente del Ari Sta Cruz está aliada con el PTe UCR Sta Cruz, Costa?.
El peq detalle es q son cónyuges...
El Unen santacruceño se gestó en torno a la cafetera.
Además, matrimonio, más astuto q los k porq juegan a q son rivales.
"no soy la esposa de..." me la imagino a Zuvic DE Costa

Ansina es, Santiago. Desde hace millones de años seguimos reaccionando al reflejo condicionado por la cópula a tergo. Quizás nuestra coyuntura apenas se trate de eso... Querer cambiar la reta guardia de cleptopatra, por la de Marianita Zuvic!! Mis respetos

Otra Europa es posible nos enseña la Camarada Bacchidu de Rifondazione Comunista-Lista Tsipras-Izquierda Europea...una Europa más ...vivible, jejej
http://news.panorama.it/politica/paola-bacchiddu-bikini-tsipras

¡Qué viejo camorrero! usted sangra por la herida porque gusta de Camila Amaranta, Camila Amaranta admira a Maduro, y a Maduro lo apoyan... En fin.

tranquilícense q no los vinculo al Trotskismo ET, ya q el hijo de J Posadas apoya a cfk como vanguardia de los marcianos jejej

Club de Amigos de Primo:
"Silvio y Pablo son bardos de Fidel, que decidieron mirar al pueblo desde el poder de quienes hoy explotan a su pueblo, traicionando las banderas por las que muriera el Che"
Hoy, vocero del PCR, enero de 1984

Los comentarios de esta entrada están cerrados.

Sobre el autor

Martín Caparrós (Buenos Aires, 1957) es escritor y periodista, premios Planeta, Herralde, Rey de España. Su libro más reciente es la novela Comí.

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal