Ya nos habíamos aprendido casi todas las letras. Sabíamos que Colombia estaba en la C, Corea en la H, Costa Rica en la B –y de pronto nada de eso sirve para nada. Metáfora mala del saber contemporáneo: aprender cosas que quedarán caducas en unos pocos años. ¿Quién usa, ahora, el Messenger o un grabador de cinta o la democracia de delegación?
Todo eso se acabó; mañana empieza el Mundial 2.0, el verdadero. Del 1.0 solo importaban las sorpresas; lo suyo, lo normal, son sus confirmaciones. En cambio en el 2.0 todo es posible –o casi todo– y eso es lo que lo hace salvaje, irresistible. El Mundial es una sobredosis. Una amante exigente, una locura de verano: no es poco, es casi demasiado. Es una suerte, dijo alguno, que lo gocemos y suframos cada cuatro años; más sería, quizás, insoportable.
La sorpresa, en este caso, fue el fracaso de las tres ligas más ricas del mundo: tal vez reconsideren su estructura de importadores compulsivos. Las confirmaciones, que todos los otros que debían pasar pasaron. Pero sin alardes: tras 48 partidos no hay candidatos claros, o no más que al principio.
Ni Brasil ni Argentina ni Alemania parecieron intratables. Holanda y Francia impresionaron por momentos y tuvieron baches importantes. Colombia circuló tranquila con equipos que no la exigieron; Costa Rica, sobreexigida, pasó por el estrecho tempestuoso; Chile camina hacia la trampa brasilera, el peso de las instituciones; Uruguay perdió a su héroe en nombre de sus propias tradiciones.
Creo que nada se recordará –del 1.0– más que esa mordida. Hay personas que hacen más que lo que deben: son los que se destacan, son los que se hunden. Hay personas que llevan el mandato que reciben –el mandato social– más allá de sus límites, hasta el abismo o el ridículo: personas que se despilfarran.
Dominique Strauss-Kahn iba a a ser presidente de Francia pero era un hombre al que siempre dijeron que los hombres de verdad se cogen cuantas más mujeres –y no pudo parar de hacerlo y perdió todo. Luis Suárez escuchó tantas veces que la garra charrúa, que la celeste se debe defender con uñas y con dientes –y mordió de verdad y perdió casi todo.
Siempre me fascinó la tragedia de esos personajes: los que no pueden controlar sus instintos, los que hacen algo innecesario que los pierde, que saben que no deben pero igual. La mordida de Suárez fue un triunfo de la pulsión por sobre la razón. En estos tiempos de razón comerciante, de interés y control, nada puede resultarnos más ajeno, más perturbador: más memorable.
Hay 14 Comentarios
Ves belleza de otras naciones en el fútbol de hoy.? O usted es un fanático o sofista. O bien, sólo un periodista parcial y ordinaria.
Publicado por: Nino Meloni | 06/07/2014 23:36:38
a sabella se la toca bilardo, se la toca lio, se la toca lavezzi...cornudo y apaleado.
Publicado por: santiago | 28/06/2014 15:47:05
el maestro (de cachiporra) Tavárez pre-sen-ta-ráááá su renuncia a la Dirección de Estrategia??? de la Fifa.
Podría haberla presentado verbalmente en el momento.
Es el general Alais de las renuncias.
Publicado por: santiago | 28/06/2014 15:46:34
Estimada Silvia, hay págs escritas respecto de las lesiones deportivas y el Derecho Penal. Tal vez el más brillante fuera don Luis Jiménez de Asúa.
Está claro q hay deportes violentos, vaya el boxeo. Pero si violentás las reglas q el mismo deporte impone, ahí el deportista en cuestión pasa a delinquir.
¿Q vamos a esperar?¿Q le arranque 1 ojo al otro?.
Lo de suárez tal vez no fue lo + brutal pero sí lo más burdo.
Publicado por: santiago | 28/06/2014 15:44:45
Santiago, si le hacés una plancha a alguien por la calle también vas preso y eso pasa todo el tiempo en la cancha. Sin embargo no se sanciona con la severidad que le aplicaron a Suárez. Hay que tener presente también el antecedente de la Mutual de Jugadores cuando denunciaron a Figueredo por delitos económicos. Uruguay no es bienvenido a este mundial por varias razones. Esta sanción "ejemplarizante" no puede ser creíble cuando proviene de mafiosos.
Publicado por: Silvia | 28/06/2014 8:11:13
Una de cal y una de arena. Me gustó "Argentinismos", me gustó el recuerdo de una escena de una famosa película de Orson Wells (no recuerdo el nombre) que habla del carácter del escorpión. Fue en otro capítulo pero bien podría haber cabido en éste: a Luisito Suárez los traicionó el carácter del escorpión. Pero sin ese carácter sería uno de los tantos goleadores del fútbol uruguayo pero nunca podría haber sido el goleador de la Premier League. Ahora : "El mundial es una sobredosis, una amante exigente, una locura de verano" ¿Y por qué no? "Qué par de pájaros los dos" o "Señora de las cuatro décadas"
Publicado por: No pueden ser tan monguis | 28/06/2014 2:43:37
Si no lo vieron en su momento, no lo deberían sancionar. Punto. Basta de fútbol "de oficio".
Publicado por: Juanbecc | 28/06/2014 1:46:21
no fue el Imperio el q mordió!!! a otro tipo. Lo hacés x la calle y vas preso.
Suárez no es un "trabajador", es 1 multimillonario.
Y, como maradona, no es excusa el origen humilde.
El 99% de las personas humildes son civilizadas.
Publicado por: santiago | 27/06/2014 22:22:43
Hablá de fútbol, Caparrós. Jajoder con boludeos poéticos que le pueden salir a cualquiera. Leé las notas del blog de Lucas Llach. Aprendé ahí. Inspirate.
Publicado por: Alejo | 27/06/2014 18:35:44
Yo sí defiendo incondicionalmente a Suárez. Mejor dicho, el caso Suárez. Más allá de la anécdota se revelan para algunos, se confirman para otros, los intereses de los poderosos. La conferencia de prensa a Lugano en la que el periodista británico le exige que le responda en inglés es una muestra de cómo ejercen -o pretenden ejercer- el poder. Lugano lo ubicó en su lugar: No, en español, le dijo.
Suárez se equivocó al cometer esa falta. La FIFA aprovechó la circunstancia para expulsarlo no solamente del mundial, sino que le prohíbe trabajar durante cuatro meses. ¿No se excede incluso en términos de legislación laboral?
Tal vez a Suárez le pasa lo que a muchos: no saben manejar el podio. Los uruguayos en general no sabemos hacerlo porque crecimos con la idea de que somos chiquitos, somos el paisito, ese diminutivo que nos impide trasgredir el relato y el mandato. Ese prejuicio uruguayo de paisito se potencia en los che botija. Quizá Suárez se saboteó a sí mismo para no trasgredir tanto.
Publicado por: Silvia | 27/06/2014 17:59:23
Lo que causa indignación es leer al hipócrita de Elizondo escribiendo en Clarín sobre este tema. Cuando le tocó a él dirigir Italia-Francia, hizo trampas y usó repeticiones de video para echar a Zidane.
Publicado por: Keith | 27/06/2014 17:05:11
Muy buenas tus notas. El caso de Suárez se parece en su irracionalidad al de Zidane contra Materazzi. Si hasta Chiellini, es un calco de aquel.
Siempre les digo a mis hijos que las mismas cosas que nos hacen buenos, nos hacen malos y que esa finísima línea que separa una cosa de la otra tiene mucho de azar, y de circunstancia. Que muchas veces no somos malos porque no nos dieron la oportunidad. Toda la agresividad, picardía y potencia que lo hace un extraordinario goleador, es la misma que lo lleva a romper los límites. Pobre Suárez. Pero como uruguayo quiero decir que no me afilio a la teoría conspirativa de la Fifa, no nos metan a todos en la bolsa. Deploro las declaraciones de nuestros políticos y la solidaridad incondicional de buena parte de nuestra socedad. Suarez metió la pata, o los dientes, en este caso y eso es indefendible. Tengamos pena por el botija Suárez, el pibe de infancia muy dura al que el fútbol salvó del crimen. Pero no por el profesional millonario creado por el mismo poder que hoy le da la espalda. Hay que entender que estas son las reglas de ese mundo glamoroso. Cuidado porque cuando caes, lo haces desde lo más alto y el golpe es tremendo.
Publicado por: Ale | 27/06/2014 13:10:12
Me ruboriza..eso de ugnas con dientes....Adrenalia YA.....
Publicado por: Manuel Fernando Fernandez Davila Martel | 27/06/2014 11:28:01
Más de patio de colegio.
http://areaestudiantis.com
Publicado por: AreaEstudiantis | 27/06/2014 9:00:34