Por: Winston Manrique Sabogal15/09/2010
PRESENTACIÓN
“La televisión me parece muy educativa. Cada vez que alguien la enciende, me retiro a otra habitación y leo un libro”, dijo una vez ese gran guaquero de realidades llamado Groucho Marx.
Pero esta temporada no hará falta encender el televisor como motivación para ir a leer porque hay tantos libros buenos que quizá no podamos llegar a todos. Es uno de los poquísimas aspectos positivos derivados de la crisis económica: que las editoriales, que son un negocio y piensan en las ganancias antes que en otra cosa, han tenido que esmerarse en ofrecer un catálogo de calidad y variado. En destilar esa cantidad de libros que publican cada año (más de 70.000 en España) y editar menos títulos pero mejor seleccionados. Por eso voy a convertir, en septiembre, este post en una pieza por entregas o de creación continua y colectiva comentando algunos de los libros del otoño que considero vale la pena leer, con preferencia en excelentes escritores que no son tan conocidos por el gran público en lengua española. Cada post estará dedicado a un género literario (lunes, miércoles y viernes), donde ustedes tendrán un papel fundamental.
“Sólo se puede leer por placer”, dijo Borges con toda la razón la razón del mundo y más allá. Y este es el momento de comprobarlo fácilmente. Este artículo de hoy es la presentación o prólogo de ese gran libro de lecturas recomendables del otoño que haré con la ayuda de ustedes a través de sus comentarios ya sea de los autores que les interesan, el tema tratado en el libro, e incluso de alguno que ya hayan leído en su edición latinoamericana o en su idioma original; y, por supuesto, recomendaciones de ustedes sobre títulos recientes. De esta manera, convertiremos este espacio en un post de creación continua y colectiva, coral.
Es un gran otoño literario. Pocas veces ha coincidido un periodo de novedades tan variado en nombres importantes y otros que generan gran expectación, con la diversidad de temas y géneros literarios que seguro despertará el interés de toda clase de lectores, y libros para regalar. Narrativa española y latinoamericana imprescindible; grandes autores en otros idiomas, y otros camino de convertirse en eso y que no son muy conocidos; biografías, memorias, cartas y diarios de personajes de los que aprender algo o con vidas interesantes y seductoras; ensayos de economía, ciencia y política muy oportunos en esta época; poetas consagrados vivos y difuntos o a descubrir; y, claro, novelas gráficas y cómics que siguen revolucionando el género y la forma de contar historias.
Aunque son muchos los libros que vale la pena leer esta temporada y no tengo todo el espacio ni el tiempo del mundo he hecho la selección teniendo en cuenta dos criterios: primero, la variedad de nombres, estilos, temáticas, pero sobre todo la buena forma de contar las cosas que es donde está la clave de todo arte; y, segundo, que la gran mayoría de dichos escritores no son tan conocidos por el conjunto del gran público hispanohablante, ni tendrán un eco mediático, salvo un par de excepciones incontestables y merecidas. Eso no significa que no hable de autores fundamentales o muy conocidos como Naipaul, Vargas Llosa, Easton Ellis, Grandes, Le Carré, Rushdie, Follet, Roncagliolo o Cortázar. Sus nombres estarán al comienzo de cada post de acuerdo al género, pero serán otros nombres a descubrir o recordar en los que me detendré.
Será difícil decantarse por uno u otro libro. Antes de despedirme por hoy, daré un aperitivo de apellidos que nos acompañarán y nos dirán, a partir del miércoles, hacia dónde iremos durante las próximas dos semanas: Munro, Haslett, Piglia, Zúñiga, Echenoz, Argullol, Walcott, Roubini, Banville, Aira, Funke, Finkielkraut, Tóibín, Mairal, Keilson, Padgen, Michón, Barba, Cronin, Sijuco, Shermer, Monteagudo, Jaramillo, Russell, Polyp, Guenassia, Kennedy, Lauer, Todorov, Trías, Alarcón...
Imagen: Obra de Jean-Jacques Henner.
comentarios 30
Publicado por: Zapateria online 15/09/2010
Cada par de zapatos cuenta una historia, al igual que cada libro. Este otoño, mientras me sumerjo en las apasionantes recomendaciones literarias de Winston Manrique Sabogal, no puedo evitar relacionar mis lecturas con mis elecciones de calzado. Unos botines robustos me transportan a las aventuras de los personajes de Cormac McCarthy, mientras que unas delicadas bailarinas me invitan a pasear por las calles parisinas de las novelas de Patrick Modiano. La moda y la literatura, dos pasiones que se complementan a la perfección, creando un universo de sensaciones y emociones. ¿Y tú, qué historia cuentan tus zapatos?"