Por: Winston Manrique Sabogal25/05/2012
PUEDES VER EL VÍDEO. W. Manrique/P. Casado/L. Almodóvar
La Feria del Libro de Madrid empieza hoy envuelta en incertidumbres del sector editorial (se ha precipitado su mundo analógico y digital) y la crisis económica mundial. Aunque, según explica Teodoro Sacristán, su director, en el vídeo que acompaña este post, la cita madrileña funciona como una especie de paréntesis o isla dentro de las cuentas anuales de editores y libreros. Reconoce que las devoluciones por parte de los libreros han aumentado y la tirada media de títulos apenas supera los 1.200 ejemplares. En cuanto al libro electrónico, representa el 3% de ventas del total del mercado español, y su presencia en la feria será apenas testimonial: varias editoriales ofrecerán su catálogo de títulos digitalizados y algunas actividades culturales.
Italia y su literatura protagonizan esta edición que inauguran hoy los príncipes Felipe y Letizia, en el Paseo de Coches del Parque del Buen Retiro, en el centro de la capital española. Una veintena de escritores italianos pasarán por aquí entre hoy y el 10 de junio. El primero de ellos será Claudio Magris, que ofrecerá esta tarde una conferencia. Le seguirán otros como Dacia Maraini, Erri de Luca, Niccolò Ammaniti, Michela Murgia y Fabio Volo. La clausura correrá a cargo de Roberto Calasso. Además, se rendirá homaneja a Antonio Tabucchi, fallecido esta primavera, Elsa Morante y Giulio Einaudi. Toda esta presencia la cuenta en el vídeo Carmelo Di Gennaro, director del Instituto Italiano de Cultura en Madrid. Y el lema es: Italia, un país para leer.
La feria tendrá más de 200 actividades, entre mesas redondas, conferencias y tertulias, y un millar de firmas de escritores, que son su seña de identidad y el gran reclamo de su público. Habrá un total de 356 casetas (pertenecientes a 450 expositores) y tres pabellones. (En la imagen, el cartel de la feria diseñado por Chema Madoz).
comentarios 4
Publicado por: Ricardo 25/05/2012
La única solución para la industria editorial es lo que ha hecho la industria discográfica. Tienen que ofrecer libros electrónicos a un valor más bajo que los libros físicos. Esa será la única forma de que la gente "normal" no piratee los libros (sobre todo en España, donde son bastante caros, comparados con el resto de Europa). La industria discográfica perdió mucho dinero hasta que aprendió esta lección.