Por: Bernardo Marín26/11/2012
20.00 Santiago de Chile es una ciudad fea con momentos bellos
(Por Mari Luz Peinado)
¿Las novelas tienen que ambientarse en un escenario real o puede ser imaginario? ¿Es necesario acaso que haya un escenario físico? Para el escritor chileno Rafael Gumucio, todas las ciudades que encuentra en un libro y que no conoce son Santiago de Chile. Esa ciudad que "es fea pero no es horrible. Fea pero con momentos muy bellos", como ha dicho en la mesa 'Paisaje y literatura: la ciudad'. Como Chile es el país invitado de honor de esta edición de la FIL, esa ciudad del título ha acabado siendo Santiago de Chile. También ha influido que dos de los participantes fueran chilenos: Rafael Gumucio y Gonzalo Contreras. Juan Villoro completaba la mesa.
Santiago de Chile no es una ciudad icónica, reconocible ni tiene el carisma de París o Nueva York, como ha indicado Villoro. Esa falta de una identidad tan definida podría ser una desventaja pero los tres participantes han coincidido en que es más bien una bendición: nadie estará obligado a poner a sus personajes a la sombra de la estatua de la libertad ni tendrá que hacerlos pasear por las orillas del Sena o vivir un capítulo en el bonaerense barrio de Palermo.
"Buenos Aires es la ciudad arquetípica, bella y coherente. Santiago es todo lo contrario", opina Contreras. "París es una ciudad ya dicha", decía Villoro. Santiago de Chile parece esconder muchas más posibilidades. Opinaba Gumucio que el Dublin de Joyce se impone al Dublín real. Santiago, sin embargo, es la ciudad a construir para los autores, como un mapa a medias.
Foto: EFE
19.00 ¿Puede vivir de la literatura un escritor brasileño?
Existe la creencia entre los escritores hispanoamericanos de que los autores brasileños sí pueden vivir de la literatura. ¿Es verdad o es un mito? El Estado brasileño es un buen mecenas, pues compra el 45% de los vólumenes que se publican pero por otro lado, es rarísimo que de un libro se vendan más de 3.000 ejemplares. La pregunta la lanzó el periodista Marcel Ventura en el debate con el que ha arrancado esta tarde en la FIL el programa Destinaçao Brasil. Y los cuatro escritores participantes, Marçal Aquino, Paula Parisot, Luiz Ruffato y Cíntia Moscovich, se han encargado de contestarla.
Marçal Aquino, antiguo reportero policial en São Paulo, dice que alguna vez soñó con vivir de la literatura pero que luego pensó que era mejor comer de otra cosa (guiones, periodismo) y escribir por pasión. "Cuando llegué a esa conclusión me liberé", asegura. Y recuerda que la afición a la literatura no es mayoritaria en su país. "Hay muchas sectas que tienen más fieles", ironiza.
Paula Parisot coincide con Aquino en que la literatura debe ser un placer. "No tiene sentido escribir para vender".
Cíntia Moscovich se pregunta. ¿Cómo vivir de algo que no sirve para nada en un país con tantas carencias materiales? Y recuerda el disgusto que le dio a su padre cuando le dijo que quería ser escritora. "Pero tú me hiciste leer", le explicó para paliar su enfado. En su caso, escribe por placer porque tiene una tienda heredada y la renta le da para vivir.
Luiz Ruffato es el único que dice que sí, que se puede. Fue periodista, pero mediocre porque le daba vergüenza preguntar. Pero que se metió a escritor profesional porque no sabía que eso era imposible. Puede que algún día deje de serlo. "Cada año firmo un contrato conmigo mismo", asegura, " y el año que no pueda vivir de esto, lo dejo".
16.00 Nombre de perro
Las cuatro de la tarde y aún no hemos llegado a Brasil. Pero falta poco. Lo último ha sido un encuentro con el novelista mexicano Élmer Mendoza, que presenta en la FIL su última novela. Nombre de perro es un libro de narcoliteratura, un género que él reivindica. Mendoza, un escritor tardío que empezó en el oficio con 50 años, critica la guerra contra la droga de Calderón y explica que voto al PRI precisamente para acabar con ella.
Pero mejor lean la entrevista con el escritor.
11.30 Montaigne, Cervantes y San Juan de la Cruz
Con algo de adelanto sobre el horario previsto (es difícil encajar un evento a una hora exacta en un torbellino con esta feria) Jorge Edwards ha respondido las preguntas de los lectores de El País. Nos ha contado que sus autores predilectos son Montaigne, Cervantes, Machado de Assis y en poesía, San Juan de la Cruz y también Rimbaud. Y ha pedido que su país, Chile, uno de los protagonistas de la FIL supere "complejos provincianos", porque ha tenido grandes escritores, desde Vicente Pérez Rosales a Bolaño.
Aquí puedes leer la entrevista completa.
10.00 Despejar una incógnita.
Uno de los objetivos de esta feria es "depejar la incógnita que supone Brasil en términos literarios" por la brecha que abre el idioma, en palabras de la propia organización. Diecisiete escritores tratarán de mostrar la ingente producción literaria de su país en la gran feria del libro en español, ahora también la gran feria del libro latinoamericano: Marçal Aquino, João Carrascoza, Bernardo Carvalho, João Paulo Cuenca, Ferréz, Daniel Galera, Milton Hatoum, Rodrigo Lacerda, Michel Laub, Adriana Lisboa, Cíntia Moscovich, Paula Parisot, Luiz Ruffato, Carola Saavedra, Tatiana Salem Levy, Edney Silvestre y Cristovão Tezza.
Aquí puedes consultar todo el programa relacionado con Brasil.
Pero vamos a arrancar el día con un escritor chileno. Hacia las 11.30 hora local, 18.30 en España, Jorge Edwards responderá la preguntas de los lectores. Están a tiempo de mandar las suyas.
comentarios 3
Publicado por: Aventuras Literarias 26/11/2012
Los escenarios de las novelas son sitios mágicos. Nosotros tenemos debilidad por los escenarios de Stevenson, Conrad, Melville, Kipling, etc.