Por: Elisa Silió02/04/2013
El subcontinente afronta el Día Internacional del Libro Infantil con datos sorprendentes, mientras el sector hace equilibros en España para capear la crisis
Mucho tiene que celebrar la industria del libro para niños y jóvenes en la emergente América Latina hoy, Día del Libro Infantil. En apenas cuatro años ha doblado su producción, pasando de casi 5.000 títulos a más de 10.000 (sin contar Brasil), según los datos de las agencias nacionales de ISBN recogidos en el Anuario Iberoamericano sobre el libro infantil y juvenil 2013 que cada año edita la Fundación SM. Todo ello gracias a las fructíferas políticas en cada país de fomento de la lectura entre los nuevos lectores. En paralelo, el sector en España hace malabares para capear la crisis, por ahora con moderado éxito.
Las ventas cayeron en España entre un 11 y un 15% en 2012, se editaron un 10% menos de libros y su tirada fue un 20% más corta. El presupuesto de las bibliotecas públicas es cero, la piratería digital acecha y las perspectivas para 2013 no son muy halagüeñas. Pero, pese a todo, Victoria Fernández, directora de la revista LIJ (Cuadernos de Literatura Infantil y Juvenil), considera que este anuario que el sector “está dando muestras de una admirable capacidad de resistencia a la crisis”. En su opinión las editoriales están adoptando “una actitud positiva y abierta a la investigación en el terreno tecnológico que, ya nadie lo duda, será la puerta de entrada a nuevos mercados y ofrecerá nuevas
oportunidades de negocio”.
Para sortear la debacle la LIJ se refugia en su precio que es menor que el de los libros para adultos. Así, mientas unos cuestan una media de 13,9 euros, los infantiles y juveniles andan por los 9 euros, una cuantía menor que en los años precedentes según datos de Nielsen.
Pese a la debacle económica, la revolución digital sigue su curso y, según los números facilitados por la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), aumentó un 22% en el primer semestre de 2012. Entre las pocas buenas noticias, está la inauguración de la Casa del Lector en las salas del Matadero de Madrid. Un empeño de la fundación Germán Sánchez Ruipérez en el que se han invertido 26 millones de euros y que pretende ser un centro de referencia internacional en la investigación e innovación de la lectura. Y otro dato positivo es que la LIJ no ha perdido peso dentro del sector literario. Según Nielsen 2012, supuso un 17,3% del total, tan sólo una décima menos que el año anterior.
La mitad de los libros latinoamericanos tienen un autor del subcontinente, y entre los extranjeros abundan los escritores estadounidenses (18 %), españoles (11 %), franceses (7 %) y británicos (6 %). Prueba evidente de la pujanza subcontinental es que la argentina María Teresa Andruetto recibió en 2012 el Premio Hans Christian, el Nobel de la literatura infantil. Por el contrario, en América Latina sigue siendo muy escasa la oferta de libros y tiene visos de seguir siéndolo mientras los niveles adquisitivos sigan siendo bajos.
El Día Internacional del Libro Infantil se celebra desde 1967 el dos de abril, coincidiendo con la fecha de nacimiento del clásico de los clásicos para niños, Hans Christian Andersen. Cada año bibliotecas, centros escolares y librerías se unen a los festejos. OEPLI (Organización Española para el Libro Infantil y Juvenil) ofrece un listado de decenas de actos repartidos por toda España.
comentarios 22
Publicado por: Amandaps 02/04/2013
Gracias por la información, no hay mejor momento que disfrutar de la lectura con los niños.