Papeles Perdidos

Homenaje

Medio siglo sin Luis Cernuda: elige tus poemas favoritos

Por: Winston Manrique Sabogal05/11/2013

Cernuda-porArroyo

Luis Cernuda visto por Eduardo Arroyo.

Tal día como hoy de 1963 fallecía en el exilio, en México, el autor de La realidad y el deseo y miembro de la Generación del 27. Varios poetas de España y América Latina eligen los mejores versos del poeta sevillano y dicen por qué les gusta. ¿Cuáles son tus poemas preferidos?

 

"Cómo llenarte, soledad
sino contigo misma".

Este hermoso y profundo comienzo con que Luis Cernuda inaugura Soliloquio del farero sirve de preámbulo al homenaje que le rinden varios poetas de España y de América Latina, en el cincuentenario de su muerte. Cada uno de ellos ha elegido el poema y los versos que más le gustan. Poetas contemporáneos que dialogan con el maestro y crean un recital para los lectores que empieza así:


Por la costa del sur, sobre una roca
alta junto a la mar, el cementerio
aquel descansa en codiciable olvido,
y el agua arrulla el sueño del pasado”.

Versos iniciales de Elegía anticipada, el poema preferido por Antonio Colinas, “su poema más bello y perfecto. En él se resumen los valores esenciales de Cernuda: meditación sublime sobre temas esenciales, emoción contenida e intensa, el cementerio como jardín y, a la vez, inmerso en una naturaleza absoluta que la cercanía de la mar acrecienta”.


“Todo lo que es hermoso tiene su instante y pasa”.

Lo muestra en Las ruinas, elegido por Aurora Luque, donde se dan la mano eternidad y finitud. Una especie de “antiplegaria en la que el poeta, implacablemente honesto, reprocha a Dios su superfluidad y canta la belleza, trágica por efímera, de los seres del mundo”.


Hermosa era aquella llama, breve
como todo lo hermoso: luz y ocaso”.

Palabras puestas en mitad de Tristeza del recuerdo, donde sueño, memoria y realidad son recordadas como inherentes a cada ser. Piedad Bonnett lo prefiere por su “enorme poder de síntesis y versos sencillos pero inolvidables para evocar los amores idos, y con el tema del tiempo y la memoria como columnas en las que se sostiene”.


Libertad no conozco sino la libertad de estar preso en alguien
cuyo nombre no puedo oír sin escalofrío”.

A este lugar donde conviven luz, sombra y reclamo como uno solo reflejado en el poema Si el hombre pudiera decir invita Oscar Hahn. ¿La razón de su elección?: “Aunque el poema está inspirado en la experiencia de Cernuda con el amor que no osa decir su nombre, trasciende lo personal y tiene una validez universal. Bellamente escrito, puede aplicarse a las diversas relaciones amorosas censuradas ayer y hoy por todo tipo de prejuicios”.


Infierno y paraíso
los creamos aquí, con nuestros actos
donde el amor y el odio brotan juntos,
animando el vivir. Y yo no quiero
vida en la cual ya tú no tengas parte:
olvido de ti, sí, más no ignorancia tuya”.

Palabras vivas de El amante divaga que remueven íntimamente a María Victoria Atencia cada vez que las lee. Para ella se trata de “un poema grandioso, de una clarividencia única. No se puede explicar más porque las palabras hablan por sí solas”.


Ahora, al poniente morado de la tarde,
En flor ya los magnolios mojados de rocío,
Pasar aquellas calles, mientras crece
La luna por el aire, será soñar despierto”.

Es la Primavera vieja, escrita en Glasgow en abril de 1942, recuerda Antonio Rivero Taravillo. “El poema es una hermosísima evocación de Sevilla en la que, bajo el embozo de esa segunda persona del singular que empleó él a menudo, aparece el propio Cernuda convertido en ‘un fantasma que vuelve’. Su cierre es de esos versos que no se olvidan: “Cuán bella fue la vida y cuán inútil”.


“Quizá mis lentos ojos no verán más el sur
de ligeros paisajes dormidos en el aire,
con cuerpos a la sombra de ramas como flores
o huyendo en un galope de caballos furiosos”.

Recuerdo, recuerdos, de los lugares amados que siempre acompañarán a las personas escenificado en Quisiera estar solo en el Sur elegido por José Manuel Caballero Bonald. Recuerdos que son aliento: “El sur es un desierto que llora mientras canta”, y que llama a Luis Cernuda y Luis Cernuda lo llama para cerrar el poema con una abertura perpetua: “Su oscuridad, su luz son bellezas iguales”.

Es el poeta, reconoce Francisco Brines, que ha sustentado lo que otros poetas como él han intentado escribir. “Un poeta que tuvo la poesía como destino personal y razón de vida”.

¿Cuáles son tus poemas y versos favoritos de Luis Cernuda?

comentarios 48

48 Comentarios

Publicado por: Gerardo 05/11/2013

sobre espaldas oscuras
las olas van gozando

Publicado por: verguenzadepaissss09 05/11/2013

¿Se está acabando el monopolio de PP y PSOE en España? Entra en el blog Vergüenza de país http://yestheycan.blogspot.com/2013/11/ppsoe-el-ocaso-de-los-grandes.html

Publicado por: pILAR BALCÁZAR ELVIRA 05/11/2013

Dificil tarea elegir entre tantos hermosísimos y conmovedores poemas, realmente pero creo que, puestos a seleccionar, me quedo con " Peregrino." Sus últimos versos. como un eco, perdurarán siempre:
"...Sigue, sigue adelante y no regreses,
fiel hasta el fin del camino y tu vida,
no eches de menos un destino máas fácil,
tus pies sobre la tierra antes no hollada,
tus ojos frente a lo antes nunca visto."

Publicado por: José maría gonzález ortega 05/11/2013

"Escrito en el agua" (poema excluido de Ocnos), donde Luis Cernuda recuerda su vida desde la infancia y concluye negando la existencia de dios y de sí mismo:
http://trianarts.com/recordando-a-luis-cernuda-escrito-en-el-agua-de-ocnos/

Saludos a los amantes de la poesía, "Cenicienta" de las letras, con unos versos escritos para Luis Cernuda: No quiero vivir más/ sin dios y sin locura./ Llenarme las entrañas/ de fulgor infinito/ en el último instante./ Dejar que este silencio/ me cubra para siempre./ Entregar al olvido los labios desolados./ Cerrar mi gran amor.

Publicado por: Alejandra zambrano :) 05/11/2013

Te quiero.

Te lo he dicho con el viento,
jugueteando como animalillo en la arena
o iracundo como órgano impetuoso;

Te lo he dicho con el sol,
que dora desnudos cuerpos juveniles
y sonríe en todas las cosas inocentes;

Te lo he dicho con las nubes,
frentes melancólicas que sostienen el cielo,
tristezas fugitivas;

Te lo he dicho con las plantas,
leves criaturas transparentes
que se cubren de rubor repentino;

Te lo he dicho con el agua,
vida luminosa que vela un fondo de sombra;
te lo he dicho con el miedo,
te lo he dicho con la alegría,
con el hastío, con las terribles palabras.

Pero así no me basta:
más allá de la vida,
quiero decírtelo con la muerte;
más allá del amor,
quiero decírtelo con el olvido.

Lee todo en: Te quiero - Poemas de Luis Cernuda http://www.poemas-del-alma.com/te-quiero-cernuda.htm#ixzz2jo4IGKME

Publicado por: Jesús 05/11/2013

Me impresiona mucho "Un español habla de su tierra". Creo que es un desgarrador poema de amor y es terriblemente duro pero veraz. Sin embargo, voy a poner aquí unos versos en prosa que aparecen en Ocnos, una obra lírica, de extraordinaria estética. Comprendo el sentimiento que D. Luis expresa en "Poesía" y se me hace familiar. Le agradezco muchísimo su existencia, D. Luis.

La poesía
En ocasiones, raramente, solía encenderse el salón al atardecer, y el sonido del piano llenaba la casa, acogiéndome cuando yo llegaba al pie de la escalera de mármol hueca y resonante, mientras el resplandor vago de la luz que se deslizaba allá arriba en la galería, me aparecía como un cuerpo impalpable, cálido y dorado, cuya alma fuese la música.
¿Era la música? ¿Era lo inusitado? Ambas sensaciones, la de la música y la de lo inusitado, se unían dejando en mí una huella que el tiempo no ha podido borrar. Entreví entonces la existencia de una realidad diferente de la percibida a diario, y ya oscuramente sentía cómo no bastaba a esa otra realidad el ser diferente, sino que algo alado y divino debía acompañarla y aureolarla, tal el nimbo trémulo que rodea un punto luminoso.
Así, en el sueño inconsciente del alma infantil, apareció ya el poder mágico que consuela de la vida, y desde entonces así lo veo flotar ante mis ojos; tal aquel resplandor vago que yo veía dibujarse en la oscuridad, sacudiendo con su ala palpitante las notas cristalinas y puras de la melodía.

Publicado por: Bárbara 05/11/2013

"los heraldos negros"

Publicado por: vergGuenzadepais. 05/11/2013

¿Se está acabando el monopolio de PP y PSOE en España? Entra en el blog Vergüenza de país http://yestheycan.blogspot.com/2013/11/ppsoe-el-ocaso-de-los-grandes.html

Publicado por: rICARDO 05/11/2013

I

Donde habite el olvido,
En los vastos jardines sin aurora;
Donde yo solo sea
Memoria de una piedra sepultada entre ortigas
Sobre la cual el viento escapa a sus insomnios.

Donde mi nombre deje
Al cuerpo que designa en brazos de los siglos,
Donde el deseo no exista.

En esa gran región donde el amor, ángel terrible,
No esconda como acero
En mi pecho su ala,
Sonriendo lleno de gracia aérea mientras crece el tormento.

Allá donde termine ese afán que exige un dueño a imagen suya,
Sometiendo a otra vida su vida,
Sin más horizonte que otros ojos frente a frente.

Donde penas y dichas no sean más que nombres,
Cielo y tierra nativos en torno de un recuerdo;
Donde al fin quede libre sin saberlo yo mismo,
Disuelto en niebla, ausencia,
Ausencia leve como carne de niño.

Allá, allá lejos;
Donde habite el olvido.

Luis Cernuda (Sevilla, 1902 – México D.F., 1963)

Publicado por: 1936 05/11/2013

1936

Recuérdalo tú y recuérdalo a otros,
Cuando asqueados de la bajeza humana,
Cuando iracundos de la dureza humana:
Este hombre solo, este acto solo, esta fe sola.
Recuérdalo tú y recuérdalo a otros.

En 1961 y en ciudad extraña,
Más de un cuarto de siglo
Después. Trivial la circunstancia,
Forzado tú a pública lectura,
Por ella con aquel hombre conversaste:
Un antiguo soldado
En la Brigada Lincoln.

Veinticinco años hace, este hombre,
Sin conocer tu tierra, para él lejana
Y extraña toda, escogió ir a ella
Y en ella, si la ocasión llegaba, decidió a apostar su vida,
Juzgando que la causa allá puesta al tablero
Entonces, digna era
De luchar por la fe que su vida llenaba.

Que aquella causa aparezca perdida,
Nada importa;
Que tantos otros, pretendiendo fe en ella
Sólo atendieran a ellos mismos,
Importa menos.
Lo que importa y nos basta es la fe de uno.

Por eso otra vez hoy la causa te aparece
Como en aquellos días:
Noble y tan digna de luchar por ella.
Y su fe, la fe aquella, él la ha mantenido
A través de los años, la derrota,
Cuando todo parece traicionarla.
Mas esa fe, te dices, es lo que sólo importa.

Gracias, Compañero, gracias
Por el ejemplo. Gracias porque me dices
Que el hombre es noble.
Nada importa que tan pocos lo sean:
Uno, uno tan sólo basta
Como testigo irrefutable
De toda la nobleza humana.

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