Por: EL PAÍS23/11/2013
Ilustración de Fernando Vicente.
Luces, sombras y miedos del futuro cultural en la Red.
-En 2012, uno de cada diez internautas accedió ilegalmente a obras, prestaciones y contenidos sujetos a derechos de autor.
- El 32% para buscar música, el 12% libros, el 43% películas y un 7% videojuegos. En total, suman 3.000 millones de descargas ilegales.
- En el mundo del libro s han producido un total de 226,9 millones de accesos ilícitos. El valor de las descargas ilegales equivale a 5.800 millones de euros
Una de las sombras de Internet es la que tiene que ver con la propiedad intelectual. El cómo proteger y garantizar esos derechos a los creadores es una de las principales preocupaciones que abordó en su última jornada el V Congreso Iberoamericano de Cultura, (en Zaragoza del 20 al 22 de noviembre) en la mesa redonda moderada por Teresa Lizaranzu, Directora General de Política e Industrias Culturales y del Libro del MECD. “Sin la debida retribución a los autores, no sólo se pone en riesgo la pervivencia de la industria cultural, sino de forma significativa la de la propia creación”, advirtió Armando Collazos, director General Global de PRISA Ediciones .
Una situación que afecta a todas las artes. Un testigo de ello es David Trueba: “He tenido la suerte de dedicarme a tres labores profesionales en los últimos años: el periodismo, el cine y la literatura. Aunque en distintas oleadas, los tres se han visto igualmente afectados por la piratería. Muchas voces lo justifican como una consecuencia de que estas industrias no hayan sabido adaptarse a las nuevas tecnologías y al nuevo modelo de negocio. No se me ocurre ningún modelo de negocio más allá de esa antigua costumbre consistente en comprar barato y vender a un precio superior”.
Por eso Trueba denuncia y reclama corregir el uso que se lleva haciendo de la cultura en los últimos 15 años, sobre todo entre los jóvenes. En España, asegura, “existe un desprecio generalizado hacia la actividad artística y cultural, muy arraigado en el tejido social. Un escritor es alguien que vive del cuento, un cineasta alguien que subsiste a base de subvenciones, un músico alguien que siempre puede dar conciertos y cobrar las entradas… Nunca se ha observado la cultura como una industria potente y de futuro”.
La situación también afecta a Latinoamérica que históricamente ha estado relacionada con este tema, como lo recuerda José Manuel Gómez Bravo, director de Propiedad Intelectual en Grupo PRISA y Presidente del Observatorio Internacional de la Propiedad Intelectual: “Todo el mundo piensa que Balzac y Víctor Hugo son los grandes impulsores de los derechos de autor, pero fue el embajador de El Salvador quien los animó a crear la asociación literaria y artística. Latinoamérica ha estado siempre en el corazón de la globalización de los derechos de autor”.
Bravo insiste en que "se debe creer en el valor estratégico de la cultura y de la propiedad intelectual como elementos para el desarrollo económico y el fomento de la competitividad en la región". Por eso propone “trabajar en la definición de una agenda digital iberoamericana que nos permita construir un mercado de los derechos de autor pan-territorial. Una autopista iberoamericana de la cultura”.
Un ejemplo del desbordamiento de la situación es que mientras en España el mercado editorial acumula una caída del 14% con respecto al año anterior, en otros países igualmente afectados por la crisis como Portugal el descenso es tan sólo del 1%, afirma Collazos. “La crisis es un problema coyuntural que superaremos tarde o temprano”, asegura, “pero la piratería amenaza con convertirse en un mal estructural, lo que para la industria cultural sería dramático”.
Las nuevas formas de distribución tecnológica no pueden estar sobrevaloradas frente a las fuerzas creativas, insiste Bravo. Sobre el sector de la música, uno de los primeros y más afectados, da pistas: “los últimos dos años de lanzamientos discográficos demuestran que un 80% se basan en recopilaciones de catálogo. Si no protegemos los derechos de autor frente a las amenazas de la piratería estamos abocados a una cultura de la recopilación, donde la innovación no tendrá cabida y nuestra competitividad se verá seriamente amenazada”.
Lorena Pacheco, de la Organización Mundial de Propiedad Intelectual, aclara que "El derecho de autor debe evolucionar conforme lo hacen las nuevas tecnologías y la sociedad". Para ello la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual tiene como misión dar asistencia a los Estados para promover la creatividad a través de un sistema de propiedad intelectual equilibrado. "El derecho de autor·", dice Pacheco, "debe ser neutral. No debe favorecer a ninguna tecnología en particular".
David Trueba amplía el horizonte cuando dice que Internet nos da una pista de algo muy peligroso, algo más peligroso que el pirateo: “La red nos ha hecho regresar a los tiempos del latifundio. La concentración de la cultura en manos de actores muy dominantes que arrasan con todas las alternativas. El ejemplo máximo son gigantes como Amazon, Google o Twitter que se han erigido en dioses. El combate contra el latifundio es el combate por la supervivencia del artista.”
“El problema de la red es que en el mundo del gratis total un céntimo es caro. Hay que plantearse hasta qué punto las grandes plataformas viven de que ese consumo se produzca sin reglas y sin normas. Hay que seguir el rastro del dinero. Porque es evidente que el tráfico ilegal de contenidos se está convirtiendo en un negocio muy rentable para algunos”.
Según un estudio del Observatorio de Piratería y Hábitos de Consumo de Contenidos Digitales realizado por GFK, en 2012, estás son algunas de las cifras más preocupantes:
- Uno de cada diez internautas accedió ilegalmente a obras, prestaciones y contenidos sujetos a derechos de autor.
- El 32% para buscar música, el 12% libros, el 43% películas y un 7% videojuegos. En total, suman 3.000 millones de descargas ilegales.
- Miles de millones de euros perdidos por la industria cultural. Miles de puestos de trabajo destruidos. Ingentes cantidades de recursos no percibidos por la Hacienda pública y la Tesorería de la Seguridad Social.
En el sector del libro la situación es dramática:
- Se han producido un total de 226,9 millones de accesos ilícitos.
- El valor de las descargas ilegales equivale a 5.800 millones de euros.
- Lucro cesante para la industria de 46 millones de euros (5,1 online y 39,9 físico).
- El lucro cesante equivale al 7,7% del valor del total pirateado.
- Supondría incrementar un 4,6% el valor de la industria.
- Según Amazon, el ratio de descarga por dispositivo en España es de 0,6 unidades, frente a los 4,6 de Alemania y Reino Unido y los 4,4 de Italia.
comentarios 12
Publicado por: starazona 23/11/2013
Hay que respetar el trabajo de miles de personas que diariamente estrujan su cerebro para que llegue a nuestras manos obras escritas, por lo que hay que poner medios para evitar la piratería, sino el mundo de la cultura desaparecerá de manera inminente.
http://www.starazona.com/seguro-de-decesos/seguros-de-decesos.php