Planeta Prohibido

Sobre el blog

Un poquito de ciencia impertinente. 2.000 caracteres para divertirse y aprender tomando como hilo conductor los fascinantes hallazgos de la ciencia. Pero además hay atrevimiento. Especulación. La ciencia que tiene sentido del humor. La versión siglo 21 de Robby el robot, el autómata más famoso de la ciencia ficción,El Planeta Prohibido, que era incapaz de herir a los humanos. Nuestro Robby rescata en sus brazos mecánicos a la chica, pero a veces tiene más mala leche queTerminator. En El Planeta Prohibido (PB), una civilización extraterrestre llamada Krell es un millón de veces más avanzada que la humanidad, pero se extinguió en un solo día. Es celuloide, ciencia ficción, claro, pero quizá el conocimiento no baste para salvarnos. Y sin embargo, ¿tenemos algo mejor?

Sobre el autor

(Madrid, 1963) (Madrid, 1963) es periodista y escritor, se licenció en ciencias biológicas y es Master de Periodismo de Investigación por la Universidad Complutense. Autor de cuatro novelas (La Sombra del Chamán, Kraken, Proyecto Lázaro y Los Hijos del Cielo), le encanta mezclar la ciencia con el suspense, el thriller y la historia, en cócteles prohibidos. Fue coguionista de la serie científica de RTVE 2.Mil, ha colaborado para la BBC, escrito para Scientific American y New Scientist, Muy Interesante, y fue jefe de ciencia de La Razón. En El País Semanal se asoma al mundo de la ciencia. Luis habla también en RNE, en el programa A Hombros de Gigantes, sobre ciencia y cine.

Archivo

mayo 2014

Lun. Mar. Mie. Jue. Vie. Sáb. Dom.
      1 2 3 4
5 6 7 8 9 10 11
12 13 14 15 16 17 18
19 20 21 22 23 24 25
26 27 28 29 30 31  

Un rescate casi auténtico de ciencia ficción

Por: | 28 de abril de 2014

  Argo-INTL-MAIN-QUAD

                                             Póster promocional de Argo. Warner Bros.

 

El cine se toma sus libertades cuando leemos en los créditos que la historia que se nos cuenta en la pantalla está “basada en hechos reales”. Pero en el caso de la película Argo, se dan dos circunstancias poco frecuentes. La historia es sólida, con nombres y apellidos, y los hechos que narra son reales, pero no podría haber sido la gran película que es si Ben Affleck no hubiera añadido –de manera bastante sabia– las consecuentes dosis de ficción.

Affleck encarna a Antonio Mendez, un agente de la CIA, que propone a sus jefes un plan realmente insólito para rescatar a seis miembros de la embajada norteamericana en Irán que lograron escapar poco antes de que los guardias de la revolución asaltasen el complejo: el rodaje de una película de ciencia ficción.

Seguir leyendo »

Los virus del Apocalipsis (cinematográfico)

Por: | 21 de abril de 2014

28 Weeks Later-01

                           Póster promocional de 28 semanas después. Fox Atomics.

 


A medida que voy escribiendo estas líneas, los números de muertes por el virus Ébola se acumulan en Guinea. Los Centros de Control de Enfermedades en Atlanta (en inglés, conocidos por las siglas de CDC) contabilizan 157 casos, 101 muertes, y de ellos 66 casos confirmados. 

La epidemia también ha afectado a Liberia (22 casos, cuatro muertes y cinco casos confirmados en laboratorio). Pero el caso guineano es sin duda uno de los más graves.

No es la primera vez que el Ébola surge de su escondrijo de la selva para atacar seres humanos. En 1976, el virus sembró el terror en Yambuku, en el antiguo Zaire (hoy la República Democrática del Congo), cuando mató a 280 personas de las 318 que infectó. 

Solemos temblar cuando se nos menta este virus precisamente por su mortalidad –cercana al noventa por ciento según qué brotes–y sobre todo, por la popularidad de las descripciones del escritor Richard Preston en su libro La Zona Caliente (Emecé). Las fiebres hemorrágicas y los vómitos sanguinolentos de los infectados los transformaban en una especie de zombis, cuyos ojos inyectados en sangre se deshacían ante nuestra vista. ¿Es cierto?

Seguir leyendo »

  Dallas-buyers-club

                 Mathew Mconaughey y Jared Letto, en una escena de la película.Focus Features.

 

El film El Club de Compradores de Dallas (la traducción que se me antoja del título original Dallas Buyers Club) deja en la memoria una serie de reflexiones que trascienden el interés del mismo guión por el que Mathew Mconaughey logró el primer Oscar de su carrera. 

Más allá de su brillante actuación (aunque si me apuran me gustó más Leonardo DiCaprio en el Lobo de Wall Street) la película desprende de forma muy efectiva el miedo de los años ochenta cuando el sida empezó a golpear a la población homosexual de Estados Unidos, pillando a la medicina con el pie cambiado.

Mconaughey es un electricista llamado Ron Woodroof que desprecia a los gais, se asombra con la noticia de la muerte de Rock Hudson y apenas se cree la noticia de que, en un análisis de sangre, ha dado positivo para el sida. 

Seguir leyendo »

Los descendientes tóxicos de Noé

Por: | 07 de abril de 2014

  N-20053R.jpg_cmyk

                  Noé (Russel Crowe) y Tubal-Caín (Ray Winstone), frente a frente. Paramount  Pictures           

 

En Planeta Prohibido nos encanta la provocación. Y cuando el cine nos da una buena excusa, la tentación es irresistible. Noé, la última película de Darren Aronofsky, deja dos buenos motivos para la reflexión y la crítica. El primero es la visualización del origen del propio Universo, narrado por el mismo Russell Crowe. Y el segundo, es esa especie de deja vu que la obra provoca sobre el propio papel de la especie humana.

De forma instintiva, me alejo de todo aquello que huela a fundamentalismo religioso. En el nombre de la religión se han escrito probablemente las peores páginas de la historia humana. Pero tampoco me gusta el fundamentalismo científico.

    No se echen las manos a la cabeza. Aquí apostamos todo por la ciencia, pero no olvidamos que la ciencia es un invento humano, y como tal, no está libre de prejuicios. 

Seguir leyendo »

El País

EDICIONES EL PAIS, S.L. - Miguel Yuste 40 – 28037 – Madrid [España] | Aviso Legal