La emoción de la ansiedad es una respuesta que todos llevamos en nuestro código genético. Todos, absolutamente todos, desencadenamos esta respuesta de lucha, huida o paralización ante lo que consideramos una amenaza. Existe una parte de la población que tiene una mayor vulnerabilidad a sufrir ansiedad, pero todos podemos aprender a gestionarla. Una de las claves para tener la ansiedad a raya está en aquello a lo que otorgamos poder de amenaza.
Nuestro cuerpo diseñó la respuesta de ansiedad para ponernos a salvo de peligros reales, peligros que amenazaban nuestra integridad y nuestra vida. Por ello, ante la interpretación de un peligro, real o infundado, nuestro cuerpo se agita de una forma tremendamente incómoda, altera el pulso, acelera el corazón, libera adrenalina, nos da vigorosidad, ganas de correr, palidecemos, nos entran ganas de hacer pipí, sentimos que nos falta el aire o se nos cierra el estómago. La reacción está justificada en el caso de tener que poner a salvo nuestra vida. Pero la reacción no está justificada cuando la amenaza es perder a la pareja, fantasear con la idea de que nuestros hijos tendrán un accidente en el autobús escolar, la idea de poder enfermar en un futuro y tener un cáncer galopante, de perder el trabajo o no encontrarlo. Hemos terminando mal utilizando un recurso que nos ponía a salvo. Ahora lo desencadenamos ante situaciones incómodas, que generan incertidumbre, pero que requieren otro tipo de soluciones, no la de alterarse.
Las personas que habitualmente viven sin la incomodidad de la ansiedad, ¿cómo piensan, sienten y actúan?
Tienen recursos para afrontar situaciones. Peligros, alrededor, tenemos todos. Pero hay personas, que llegada la ocasión, se ven capaces de afrontarlos. Ya sea por su experiencia con el pesado, por su capacidad de análisis o por su perseverancia. Ven los peligros como retos, no como algo que vaya a dejarlos en el camino.
No anticipan y fantasean con lo peor que puede pasar. Si todos practicáramos este dramático ejercicio mental, anticipar todo lo malo que puede ocurrir y en el peor de los escenarios, todos terminaríamos desencadenando el miedo y la ansiedad. Muchas personas creen que obsesionarse con el futuro desolador de alguna manera lo previene, pero no es así. En todo caso, lo potencia. Porque aquello para lo que te preparas terminando enfocando tu mente en ello. Y al final terminas viendo y encontrando lo que temes.
No pierden el tiempo atendiendo lo que no controlan y se centran en lo que es útil. La mayoría de nuestros miedos no son situaciones, personas o acciones que podamos controlar, es decir, no dependen de nosotros. Son decisiones o situaciones que dependen de la decisión de otros, del destino o de la genética. Y a aun así la gente se enreda con ello. La gente que no sufre ansiedad, ignora este tipo de situaciones centrando la atención en el presente. Un simple “gracias mente por recordarme que el autobús se puede caer por un precipicio”, “gracias mente por avisarme de que algún día de algún año puedo sufrir un cáncer”, sin más. Esto será suficiente para que la mente no dé valor a esa idea, a la que, por mucho que quieras analizar, jamás controlarás. Lo peor que puedes hacer es prestarle atención, rumiar, juzgar y buscar argumentos que te relajen frente a tu miedo. Eso solo la potenciará.
Aprenden a vivir con riesgo. Las reglas del juego de la vida implican riesgos, aventuras e indecisiones. No sé en qué momento alguien inventó que para ser felices y estar tranquilos todo a nuestros alrededor, dependa o no de nosotros, tuviera que estar bajo absoluto control. Hay que aprender a convivir con “lo que tenga que ser, será” para muchas de las situaciones.
Utilizan el humor para gestionar momentos complicados. La vida es graciosa, pero nos empeñamos en ver el lado más dramático. Reírse de los miedos nos confiere control. La risa es una respuesta antagonista con la respuesta de ansiedad. No es frivolizar, es elegir el grado de importancia que tiene algo inútil en tu vida. Nada más.
Se enfocan más en las soluciones que en la propia catástrofe. La persona que vive relajada continuamente está pensando en qué soluciones tienen sus problemas, no en cómo les va a limitar la vida. Imagina un trabajador autónomo que pierde parte de sus clientes. En lugar de pasarlo mal pensando que ahora le costará llegar a final de mes, invertirá ese esfuerzo y energía en buscar ideas para generar otros clientes y mercados posibles.
Practican técnicas que les ayudan a gestionar sus emociones: meditación, relajación, respiración o visualización. La respuesta de ansiedad viene por la activación del sistema nervioso simpático. También participa la amígdala, nuestro centro neurálgico del miedo. Estos ejercicios permiten serenarnos y relajarnos, creando respuestas antagonistas que reducen el nivel de activación del sistema nervioso.
No tienen la percepción de que viven en mundo amenazante o peligroso, dejando así de personalizar todo lo que ocurre alrededor. No mantienen continuamente conversaciones tóxicas o negativas, ni con ellos, ni con su entorno.
Confían en los demás y en la ayuda que puedan prestarles. No se ven solos ante el peligro. Además de responsabilizarse de sus vidas y de sus emociones, saben que cuentan con una red social, familiar, de apoyo que podrán atenderles si sufren algún percance o si necesitan algún tipo de ayuda. Sentirte protegido y apoyado por los demás es una manera de sentirte seguro.
Llevan una vida equilibrada con hábitos de vida saludables. Descansan, practican deporte y comen de forma sana. El sueño repara nuestro organismo mientras dormimos. El ejercicio físico ayuda a mantener el sistema nervioso controlado, libera endorfinas y dopamina y permite que nos sintamos mucho mejor. Y la alimentación es nuestra gasolina. Si estos pilares los tienes desordenados, difícilmente, por mucho que te relajes o pienses en positivo, puedas encontrarte interiormente sano.
La persona serena no tiene una vía serena a su favor, lo que tienes es una actitud relajada ante la vida. Vive con menos prisa y menos amenazas que los que sí sufren ansiedad.
Hay 13 Comentarios
te faltan 3 habitos, patricia, pusiste 10 en el titulo pero sólo pones 3 en el post
lo siento pero estas reportada
Publicado por: Moncho | 15/03/2022 20:22:20
Excelente artículo Patricia, en general todo lo que escribes me gusta, trasmites mucho positivismo, gracias. En mi caso suelo relajarme haciendo running, es más, cuando estoy un tiempo sin correr por motivos X, me entra ansiedad.
Publicado por: deporte en casa | 18/12/2020 11:50:58
La ansiedad es terrible, lo cierto es que hay que estar siempre alerta a los síntomas y procurar estar relajado en esta vida. Yo llego a casa y me tumbo con mi maquina de presoterapia https://presoterapiaencasa.es y trato de tomarme las cosas con tranquilidad. Todo ayuda.
Publicado por: Eva | 16/01/2020 8:45:52
Yo antes me tomaba las cosas de otra manera , siempre agobiado por cualquier cosa, me exigía muchísimo y eso me hacía estar mal. Ahora me tomo la vida distinta, incluso llevo perfumes de equivalencia https://equivalenciascaravan.com similares a los originales y sin agobios oiga.
Publicado por: Jorge | 15/01/2020 16:48:17
parece que estés diciendo que la persona con ansiedad está así porque es una exagerada, dramática y in control. Perdona, pero es mucho más que eso. Me parece una falta de respeto.
Publicado por: marta | 02/12/2019 16:33:56
Gracias por compartir estos consejos, pero aprender a vivir con riesgo creo que fue uno de los habitos que me ha ayudado a combatir la ansiedad y las tecnicas que esta web https://psicologiaelite.com/tecnicas-controlar-la-ansiedad/ explica muy detalladamente para lograr superar de una manera facil. Saludos, esta genial el blog.
Publicado por: Wilson | 19/05/2018 5:27:06
Más que excelente artículo para informar sobre un problema tan importante como puede ser el trastorno de ansiedad generalizada.
Publicado por: Ansiedad Generalizada | 03/05/2018 15:58:19
En Alcañiz existe mucha prevaricación, corrupción urbanistica, amenazas y abusos,porque derriban numerosos inmuebles sin permiso de los propietarios, acosando y abusando contra la gente para favorecer los negocios particulares corruptos de funcionarios y constructores, violando la Constitución y el derecho a la propiedad privada y a la vivienda digna.
Realizan obras públicas con enormes sobre costes, y cobran comisiones y regalos de constructores.
Atentan contra las casas y los bienes de particulares y se niegan a pagar los daños que han causado, con obstrucción de los pagos de indemnizaciones, y retrasos en los procedimientos administrativos, y burocraticos , falsos documentales, burlando los derechos de las personas, vulnerando leyes y derechos.
Publicado por: Carlos Rosello | 30/01/2018 19:02:14
Muy interesante Patricia. Me gusta mucho la imagen. Directa al grano y con consejos muy valiosos y en consonancia con lo que explico en mi blog https://vivirsinansiedad.org/ al que os animo a pasaros para ver más consejos sobre cómo combatir la ansiedad.
Publicado por: Mar | 19/01/2018 11:47:13
Hola me ha parecido un gran articulo, los consejos que dan son muy vailiosos para superar la ansiedad. https://www.ansiedad21.com/tipos les dejo algo que tambien me ah ayudado a entender y conocer la ansiedad para poder combatirla.
Publicado por: Ansiedad21 | 09/01/2018 22:52:34
Yo gracias a los consejos de esta web https://comocurarlaansiedad.net/controlar/ he podido corregir mis habitos ademas de controlar la ansiedad que tenia. Es una pena que la sociedad nos empuje lentamente al estres.
Publicado por: victor | 23/10/2017 21:59:22
Hola Patricia!! Lo del humor que comentas es un punto que a mi personalmente me ha ayudado muchísimo. Sufro de depresión desde hace unos meses y he seguido muchos consejos en webs como la tuya o como http://www.ansiedad10.com pero me he dado cuenta, que al final, el humor el lo que lo cura... (al menos en mi caso). Un saludo y muchas gracias por tu blog.
Publicado por: Anais | 24/04/2017 21:36:47
Tal cual. Agregaría tomar conciencia que vivimos en una sociedad de consumo que nos bombardea de mitos que nos inducen a la ansiedad y la angustia.
Publicado por: Pablo Rueda | 22/02/2017 12:48:13