vaya semanitas…. aquí todos callados, sin poder contar a nadie que estábamos con los papeles secretos de Wikileaks, y la red que poco a poco se empezaba a calentar una semana antes del banderazo de salida pactado con nuestro compañeros de viaje en la publicación de estas filtraciones, The New York Times, The Guardian, Der Spiegel, Le Monde…. buenos compañeros de viaje los de El País… el domingo pasado, la gente de Wikileaks ya empezaba mandar señales de humo vía twitter: “Los próximos meses verán un nuevo mundo, donde la historia global es redefinida…Mantennos fuertes.
.... pues sí, la verdad es que si algo sacas en claro después de leer los papeles es que una cosa es cómo te cuentan la historia y otra, muy distinta, cómo fue… los papeles de las Embajadas desenmascaran el teatro diplomático… los Embajadores dicen una cosa, piensan otra, lo escriben y ahora, nosotros lo leemos… el mundo es un guiñol, está lleno de marionetas, y hay una mano que las mueve, o las intenta mover a distancia…. la mano que mueve las marionetas tiene las uñas impecablemente cortadas, es una mano fina y delgada, precisa, de cirujano…. Esa es la mano que nos muestran los papeles de las embajadas, que además, nos dejan entrever el trabajo que hace la otra mano, la mano sucia…. de la mano sucia ya alertaba Assange, el líder de Wikileaks, en la entrevista exclusiva que nos concedió el pasado 24 de octubre… él hablaba del Estado de seguridad paralelo… ¿os acordáis de La vida de los otros?