Cómo hemos cambiado. En la realidad y, también, en la ficción. Hace dos años, la cadena pública estadounidense PBS emitió America in Primetime, una miniserie documental de cuatro capítulos (en España se pudo ver en Canal +) que recorría los cambios sociales en Estados Unidos a lo largo de las últimas décadas y su reflejo en las series de televisión más relevantes. Inspirado en ese formato ahora estrena Canal + España en serie (hoy lunes a las 22.00 horas emite el primer capítulo).
El foco cambia y se adapta a la realidad de la ficción española, tan diferente de la estadounidense. Los cuatro capítulos se centran en el rol del héroe masculino, las mujeres luchadoras, la comedia nacional y los protagonistas jóvenes. En los algo más de 50 minutos que dura cada episodio, son los propios protagonistas, creadores, directores, productores y guionistas de las series que han marcado los últimos 40 años de la televisión española los que cuentan recuerdos y analizan los cambios en la producción de series en España en este tiempo. Desfilan series como Crónicas de un pueblo, Curro Jiménez, Verano Azul, Teresa de Jesús, Anillos de Oro, Farmacia de guardia, Brigada central, Turno de oficio, Los ladrones van a la oficina, Médico de familia, Siete vidas, Aquí no hay quien viva... Series que, en muchos casos, marcaron época, con millones de españoles pegados a la pantalla cada semana, y que han definido lo que es nuestra televisión.
Solo se echa de menos más autocrítica, como la duración exagerada de los capítulos (impuesta por los directivos y el mercado televisivo nacional) o la obsesión por llegar a todo tipo de público (con tramas para niños, abuelos, amas de casa...). O las razones por las que la ficción televisiva española no se atreve a innovar. Aunque en este aspecto sí se da alguna pista: la crisis cortó las alas que empezaban a desplegarse; además, las series muy de nicho no son rentables, por lo que ninguna cadena apostaría por ellas.
Pero como no podemos (ni debemos) comparar las series españolas con las estadounidenses (son mundos totalmente diferentes), sí podemos mirar atrás para aprender de lo bueno que se ha hecho y mirar al futuro con esperanza. En España hay talento, solo tiene que encontrar la vía para desarrollarlo. Con todos sus defectos (que son muchos), la ficción televisiva española también tiene virtudes y no debemos avergonzarnos de ello. Es especialmente esclarecedor lo que comenta Ana Obregón en el segundo capítulo de la serie: cómo hubo burlas y risas cuando se dijo que iba a escribir y protagonizar Ana y los siete, serie que llegó a tener seis millones de espectadores. Nadie reconocía verla pero todo el mundo la veía. El sino de las series españolas.
Además del esfuerzo que ha debido suponer reunir a tantas caras televisivas y la recopilación de imágenes de archivo tanto de las series como de la época histórica en la que tenían lugar, lo más interesante de España en serie es que da voz a las personas que están detrás de las cámaras, a los que no ponemos cara pero que son muchas veces los auténticos responsables de que nos enganchemos a una serie. La mayoría de las reflexiones más interesantes que deja el documental vienen precisamente de ellos. Por ejemplo, los responsables de Médico de familia recuerdan cómo la serie fue decisiva para cambiar la forma en la que se hacía ficción en España y cambió la imagen de Telecinco, o cómo 7 Vidas copió el sistema de trabajo de las sitcom estadounidenses.
Tras ver los cuatro episodios de España en serie, destacamos algunas de sus reflexiones:
"No parece ya posible repetir los 13 años en antena de Hospital central. Ahora se va más al evento, a series más cortas".
"En los ochenta se hacía una televisión más cinematográfica. En los 90, con la irrupción de Globomedia, se pasó a una televisión más industrial. Y en los 2000 se mezclan las dos tendencias anteriores y se bebe de la influencia de Estados Unidos".
"Estuvimos a punto de hacer una televisión más transgresora, pero la crisis lo frenó".
"Buscamos atraer al público mayor, a las señoras, que es el público fiel, el que se queda ahí. Los jóvenes se van más rápidamente".
"Cuesta hacer comedias buenas, pero cuando salen, son de una vigencia demoledora".
"En cuanto al humor, sabemos más que muchos".
"A día de hoy, ni Verano azul ni Farmacia de guardia habrían aguantado en antena, se habrían cancelado, porque al principio no tenían éxito".
"La ficción fideliza el público a una cadena".
"Estaría muy bien que hubiera en España series de 'que se joda el espectador medio', como dijo una vez David Simon, creador de The Wire, pero es que esas series no son rentables".
"No creo que lo mejor que se haya hecho nunca en la televisión española sean los Estudio 1. Lo mejor está por venir".
PD 1: ¿Cuál es la mejor serie española de la historia? EL PAÍS SEMANAL está organizando una Guerra de Series que enfrenta ficciones nacionales en duelos que decide el público.
PD 2:: ¿Cuánto sabes de series españolas? Canal Plus también pone en marcha un juego para ponerte a prueba.
Hay 6 Comentarios
Un detallazo digno de Canal Plus dedicar el primer episodio de España en serie al grandísimo Jose Sancho.... muy bueno, muy justo...Genial
Publicado por: Roberto | 18/11/2013 21:17:28
Pues no, no todos veían "Ana y los siete". Ni un capítulo (¡ni un minuto!) de ésa ni de "Médico de familia" he visto en mi vida. Pero bueno, no presumo de ello, del mismo modo que no presumo de no ser coprófago. Me parece lo normal, vaya.
Publicado por: Puag | 05/11/2013 21:25:57
Vientos de Agua y Crematorio, las dos mejores.
Publicado por: Marta | 05/11/2013 16:06:23
Las series españolas de los últimos años son claro reflejo del estado de la sociedad en otros ámbitos, decadente. Salvo algunas excepciones (el grupo y alguna más) el nivel no se acerca no de lejos a algunas series míticas como Caños y barro, la Barraca, y algunas otras basadas en obras literarias. Ahora casi todo esta como esta: televisión, periodismo, política...
Publicado por: Sab | 04/11/2013 17:26:30
Pues si no hay autocrítica mal vamos. Parece más una herramienta para mirarse el ombligo y reivindicarse. Y por supuesto que podemos y debemos comparar la ficción española con otras, no solamente la norteamericana. Entiendo que para mejorar en cualquier campo uno tiene que fijarse siempre en los países que van a la vanguardia. Otra cosa es engañarse porque no estamos hablando de medios económicos, sino de dirección de actores, guiones atractivos, target diferentes de público, interpretaciones que se entiendan (esa falta de dicción), localizaciones en exteriores (que tenemos maravillosas y sí se pueden hacer), duraciones más lógicas, etc. Todo es cuestión de tener claro el tipo de producto que se quiere hacer. Si no hay una evolución clara veo este mismo espacio de análisis de la televisión española, dentro de veinte años anclados en los mismos despropósitos.
Publicado por: VicGoslar | 04/11/2013 11:38:48
No se menciona a la mejor serie jamás hecha en nuestro país, Manos a la obra. Ninguna como esa.
Publicado por: Aberreitor | 04/11/2013 11:00:47