Ya estamos inmersos en plena vorágine de estrenos. Y con ellos, vuelve la cata de series para probar con cuáles nos quedamos para seguir y cuáles desechamos. Los estrenos van a ir llegando con cuentagotas a los canales españoles, donde parecen estar volcándose más con los regresos de series ya consolidadas que con las novedades de la temporada, quizá a la espera de ver cómo reacciona el público en sus países de origen y el ruido que se genera en torno a cada una. Una de las series que sí se ha confirmado que se va a ver en España, en el canal AXN a partir de noviembre, es Quantico.
Para explicarlo rápido, Quantico sigue la fórmula de Shonda Rhimes pero trasladado al mundo del FBI. Un How to get away with murder que en vez de tener como protagonistas a unos alumnos de Derecho tuviera como protagonistas a alumnos de la academia del FBI en Quantico. O un Anatomía de Grey cambiando batas y fonendoscopios por chalecos antibalas y pistolas. Y, dentro de ese esquema, funciona, tiene potencial de sobra para enganchar.
La historia arranca en los instantes después de una gran explosión en la Grand Central Terminal de Nueva York en el que se calificará como el mayor atentado terrorista en Estados Unidos tras el 11-S. Una mujer aparece intacta entre los escombros. Mientras que los agentes investigan quién ha podido estar detrás del atentado, la serie viaja al pasado para contar cómo un grupo de jóvenes, en el que está incluida la mujer de esa primera escena, llega a Quantico para empezar a formarse como futuros agentes del FBI. Todo parece apuntar a que uno de ellos ha sido el responsable del atentado terrorista con el que arranca la serie. ¿Quién? ¿Por qué?
El primer capítulo presenta al grupo protagonista. Con unas rápidas pinceladas pinta sus orígenes y los posibles secretos que esconden. Giro de guion va, giro de guion viene, y ya te tienen enganchado sin remedio. Lo que decíamos: la fórmula del placer culpable pero sin llevarlo tan al extremo como lo hace la creadora de Scandal y con un toque de conspiración terrorista de fondo.
Shonda Rhimes ha creado escuela. Quantico, sin llegar a los extremos de las creaciones de Shondaland (la productora de la susodicha), es una muestra del potencial que tiene la fórmula Rhimes. Ahora queda por ver si en lo que vendrá por delante abrazará el placer culpable o se contendrá para decantarse por el thriller.
De momento, puede ser interesante ver cómo funciona esta curiosa mezcla.
Hay 2 Comentarios
Si le hago caso a Bleyer, que miedo¡¡¡¡¡ Lo digo por no perder el tiempo. Me gustaris hacer un comentario sobre NATION Z la version "gamberra" de zombis. Hay dolor, sufrimiento pero tiene un poco ironico, humor Ya esta por la 2ª temporada. La recomende hace un año a varios amigos y estan contentos de perder el tiempo con ella Saludos
Publicado por: ALEX | 04/10/2015 11:47:43
Quantico es mala, pero mala, mala. Intentan aplicar la fórmula Rhimes, sí, pero lo hacen mal. Muy mal. Pasan cosas absurdas sin venir a cuento, ni sin preparación previa (en las series de Rhimes pasa cosas absurdas, sí, pero vienen muy bien preparadas; aquí no, aquí todo es sin ton ni son). Por si las moscas, preparan la estructura de la narración en tiempos paralelos (no, como Perdidos no, va a ser como en Once Upon a Time) que viene muy bien para perder 20 minutos de cada episodio contándote que a tal personaje su madre no le abrazaba lo que tocaba cuando era niño, o que fulanito y menganito estuvieron tonteando en esa Academia de Agentes Descamisables que parece ser que es la central del FBI. Y si te fijas en las cosas que PASAN en el piloto, todo da mucho miedo y mucha grima. Desde el momento genial en el que asignan la primera tarea escolar del grupo de cadetes (y que es totalmente absurda), hasta la reacción del mormón (¡por favooor!), pasando por el hecho de que un postadolescente con el MEJOR cuerpo que he visto en años, fibroso, poderosos, con músculos cincelados, resulta que no puede hacer unas dominadas que yo, con mi abdominal de 20 kilos, sí puedo. ¡Anda ya! Ya no nos pongamos a analizar el porqué la directora de la central del FBI se lanza a una misión de rescate (absurda, por otra parte). En fin, una cadena de despropósitos protagonizada por personajes que te importan un pito y que son, además, profundamente desagradables. Esto no es el nuevo Scandal, es la nueva Prison Break.
Publicado por: Bleyer | 04/10/2015 11:28:08