La Ruta Norteamericana se detiene en su sección "Parada para repostar". En plena época navideña, el amigo y compañero Toni Castarnado, un habitual en este blog con sus fabulosas recomendaciones y textos, nos habla de dos músicos con historias trágicas pero cuya música nos sigue iluminando fervorosamente. Dos músicos que nos dejaron en Navidad, aunque es el relato vital de uno de ellos, la cantante Lhasa De Sela, el que lleva al redactor a introducirse en reflexiones artísticas pero también vitales con el único objetivo de acercarse y sentir el verdadero poder de la mejor música.
Texto: Toni Castarnado.
La Navidad. Época de contrastes, de contradicciones. Días que son propicios para buscar y hallar una sonrisa fácil. Por contra, también lo son para quién prefiere lamentarse y así sollozar. Echas de menos al que ya no se mece a tu lado o al que por circunstancias de la vida está muy lejos de ti y a muchos kilómetros de distancia. Y llegadas estas fechas, hay dos músicos que me vienen a la cabeza desde hace tres cursos. Precisamente, porque ambos murieron durante la misma Navidad, la de 2009, y con pocos días de diferencia entre esas defunciones. Hablamos de Lhasa de Sela y Vic Chesnutt, ellos son los malogrados protagonistas de esta fábula.
La caída del músico de Jacksonville fue más sonada, su perdida tuvo cierta repercusión mediática, en cambio aquella cantante más anónima murió sin que pasara gran cosa, casi nadie se enteró. En parte es lógico, esos días la gente está por lo que está, repartiendo regalos, quedando para compartir la enésima comilona, e incluso la prensa, salvo un suceso inesperado y de gran trascendencia, también se lo toma con más calma. El mundo parece que se detiene durante la Navidad, pero es verdad que el mundo no para de rodar, siguen pasando cosas.
Vic Chesnutt se quita la vida un 25 de Diciembre, mientras que Lhasa de Sela, que ella si luchaba por seguir aferrada a la misma mientras intentaba vencer a un cáncer que la consumía, nos decía adiós una semana más tarde, el 1 de Enero de 2010. Para él fue un alivio, no podía más, una enfermedad de otro carácter le tenía lastrado, a casi todos nos pilló por sorpresa el desenlace, pero se podía intuir que tarde o temprano pasaría algo así. Sus colegas de profesión lloraron su desaparición, se le quería y se le respetaba.
Cowboy Junkies grabaron un disco entero con su figura en mente para uno de los volúmenes de “The Nomad Series”, Lucinda Williams se inspiró en su historia para escribir la deslumbrante “Seeing Black” incluida en “Blessed”, y Kelly Hogan hace poco en “I Like To Keep Myself In Pain” repartía versiones en esa majestuosa galleta, la más lucida y emocionante es “Ways Of This World” firmada por Chesnutt. Una serie de recuerdos para alguien que ya es imborrable, porque las personas es cierto que desaparecen, pero algunas de ellas nos dejan una huella que es importante, un placentero legado.
Y así fue también para Lhasa, a ella no se le olvida tampoco con facilidad. La comunidad latina siente fascinación por su música, y en países como Francia se publicó incluso una biografía suya. Bunbury nos regaló una adaptación respetuosa y llena de magia de “Pa´ llegar a tu lado”. Lo de Las Migas es harina de otro costal. Casi cada día desde que cayó en mis manos “Somos Las Migas” escuchó esa versión de “Con Toda Palabra” de la cantante americana de raíces mejicanas y con residencia en Canadá.
“Con toda palabra, con toda sonrisa, con toda mirada, con toda caricia/ Me acerco al agua, bebiendo tu beso, la luz de tu cara, la luz de tu cuerpo/ Es ruego el quererte, es canto de mudo, mirada de ciego, secreto desnudo/ Me entrego a tus brazos, con miedo y con calma, y un ruego en la boca, un ruego en el alma”. Masticando cada sílaba, cada palabra, con la emoción por bandera gracias a una melodía que es perfecta, dejando un recado a quienes no creen que la importancia esté en los pequeños detalles; un abrazo sincero en un momento de duda, un beso a tiempo, un guiño a la amistad, al amor.
De ese modo entendía la vida Lhasa de Sela. En un mundo como éste que a veces es injusto, con personas que se empeñan en complicarle la existencia a quienes solo entienden de cariño y de respeto, en un lugar dónde la generosidad anda peleada consigo misma al ser incomprendida. Con su primer disco, con el excelso “La Llorona” ella dejaba una nota a pie de pagina. Cantó en castellano, en inglés y en francés en “The Living Road”, tres de los idiomas con los que cualquier ser humano puede andar por el mundo sin miedo a no ser entendido. Porque si algo había que no tenía Lhasa era miedo. Ella era una luchadora, su mirada tan viva y a la vez misteriosa la delataba, su sonrisa siempre brillaba, tenía fe, no había nunca espacio para el remordimiento.
Su último disco homónimo lo grabó en pocas horas, no podía desperdiciar ni un segundo de vida, el contador estaba puesto en marcha, la marcha fúnebre le reservó cita y la avisó antes de tiempo. En aquel pequeño habitáculo sonaba la serenata de ese blues tan descarnado, el folk en clave intimista que se perfila puro y honesto, más unas gotitas de jazz para dar más calidez al asunto. Con esa tristeza latente y una voz que se ve que se apaga poco a poco, pero ella seguía ahí susurrando palabras que aún paladeaba, con una instrumentación mínima a su lado, el descanso del guerrero tocaba a su hora tras hacer un esfuerzo titánico.
A pesar de su pronta desaparición, sus notas nos acompañan ahora aún con más fuerza que nunca. Ella era una de las 144 protagonistas de mi libro Mujer y Música. En la primera de las entrevistas promocionales que me hicieron a raíz de la publicación del mismo tengo la suerte de que es un buen amigo el que está al otro lado del cristal, la charla es fluida, muy amena. Hablamos de Billie Holiday, de La Lupe, de Lucinda Williams, de Tori Amos, de Mavis Staples…y también de Lhasa De Sela.
Nadie me dijo entonces que meses más tarde y sin previo aviso iba a nacer mi retoño. Y mucho menos, que se iba a llamar Lhasa y que iba a luchar como una jabata por agarrarse a la vida. Exactamente igual que aquella cantante que tanto me había marcado, pero con diferente suerte. Y sí, ella está todavía lejos, a muchos kilómetros de distancia, pero siento que su latido está muy cerca, que su respiración me acompaña a diario. Mientras, la vida sigue por su camino, situándonos a cada uno de nosotros en nuestro lugar. En cualquier caso, es la música, y ese destino siempre imprevisible y variable, más la fortuna de seguir vivos para poder contarlo, lo que de verdad importa. Carpe diem.
Texto: Toni Castarnado, autor del libro "Mujer y música" (66 rpm) y colaborador de Ruta 66 y Mondosonoro.
Hay 12 Comentarios
Buen artículo. Yo tampoco la conocía, pero leyendo las referencias a favoritos como los Cowboy Junkies o Lucinda Williams seguro que merece la pena escucharla, así que apuntada queda.
Publicado por: Ganímedes Romero | 30/12/2012 20:46:02
Bonito nick Nibiru.
¿Se te ha ocurrido a ti solito o te has copiado como siempre?
Robert Harrington le dijo a Zacharias Sitchin que tenían fotos de Nibiru.
Espera Robert Harrington,Nibiru y el panolí de Enoch light no serán el mismo individuo de Oria(Almeria) con 3 nicks diferentes.
Hombre Manolo ,otra vez haciendo el numerito de los 3 nicks,con lo pequeño que es Oria y lo grande que eres tu.
Pon Manuel Perez Martos ¿o es que te han baneado en este blog?
Es Manuel Perez Martos el MAYOR CRITICO MUSICAL MUNDIAL,DEJADLO ENTRAR CON SU NOMBRE QUE NOS PUEDE INFORMAR DE LAS ÚLTIMAS NOVEDADES DE ABSOLUTE POWER POP Y LA ISLA DE ROBINSON DE LUIS dB.
Puede ser muy interesante.
Publicado por: GUITARRAS A PIJO SACAO | 29/12/2012 18:21:22
Hola a todos!!
Buen articulo, no conocía yo a esta Chica, anotada queda.
Salud!!
Publicado por: Chema | 28/12/2012 10:27:58
Gran descubrimiento. Muy agradecido.
Publicado por: Nibiru | 27/12/2012 20:12:02
Gran descubrimiento. Muy agradecido.
Publicado por: Nibiru | 27/12/2012 20:12:01
El cd de la llorona es muy bueno.
Publicado por: BDN | 27/12/2012 18:52:28
Una excelente cantante New Yorkina internacional, que nos gano el corazon con su musica fuera de lo comun.
Publicado por: BDN | 27/12/2012 18:49:10
Recordad:
The Waterboys : IS SHE CONSCIOUS ? (2.000)
ABSOLUTAMENTE MARAVILLOSOS.........
Publicado por: GUITARRAS A PIJO SACAO | 27/12/2012 10:52:38
Hola Fernando
Lhasa y Chesnutt, dos personas con luz propia y con canciones que seguirán brillando.
Un saludo.
Publicado por: Manu3l | 27/12/2012 10:03:41
Conocí a Lhasa por medio de una chica alemana allá en el 1999 y tuve la suerte de ir a verla cuando vivía en Portland.
GRANDE
http://www.bicicleta-electrica.blogspot.com
Publicado por: Kits bicis eléctricas | 27/12/2012 0:34:09
Conocí la música de Lhasa por la recomendación de mi cuñada. Me impresinó mucho: me tocó el alma. Tanto, que incluí dos de sus canciones en una pieza teatral amateur.
Muchas gracias por este artículo.
Publicado por: kdu | 26/12/2012 18:23:26
No he oído nunca hablar de ellos y no pienso buscar nada.
ESO SI QUE ES ESNOBISMO PEDANTE,no reconocer el merito de los mejores Y PROPONER COSAS SIN INTERÉS ALGUNO.
No hay un concurso para ver quien conoce a más DESCONOCIDOS.
De lo que se trata es de recomendar a los mejores,ya sean conocidos o desconocidos.
DESCONOCIDOS SIN NIVEL NO TIENEN INTERÉS ALGUNO,ESTÉN VIVOS O MUERTOS.
Publicado por: GUITARRAS A PIJO SACAO | 26/12/2012 18:10:05