Es como una bomba de relojería en los oídos. Uno, dos, tres... y explota. R&B rabioso, trepidante, dinamita pura. Parece pensado para hacer descarrilar trenes. Es el último disco de Barrence Whitfield & The Savages: Under the Savage Sky (Bloodshot Records / Promola).
No es nada nuevo. El bueno de Whitfield viene siendo desde hace mucho tiempo un verdadero forajido del mejor R&B atómico. De hecho, su referencia más inmediata, Dig Thy Savage Soul, que supuso su debut con Bloodshot Records en 2013, ya era toda una descarga de rock’n’roll y soul mezclados con buena gasolina. Pero este año este hombre, que parece llevar el legado de Don Covay a todo un universo garajero, se ha reafirmado como un volcán musical de primera categoría.
Under the Savage Sky es un álbum sobresaliente. Desde que llegó a mis manos a finales de agosto ha hecho que me levante de la silla en varias ocasiones, incluso que se agrieten las ventanillas del coche. Pero, por falta humana de tiempo, no he podido reseñarlo hasta hoy en esta ruta norteamericana, tan agradecida con los sonidos grasientos y llenos de buenos decibelios, que nos remiten al mejor blues de Chicago.
Con sus gruñidos a lo Little Richard y su nervio propio de Detroit, aunque naciese en Florida, se criase en Nueva Jersey y despuntase en Massachusetts, su rock de espíritu negro tiene mucho de ese alma de Chicago, trayendo a la memoria las alegorías de Howlin’ Wolf al que parece invocar en la aplastante The Wolf Pack. Son señas de identidad para un disco que te pasa por encima sin contemplaciones. Gracias al buen hacer de The Savages, su potente R&B nace de un fuego primario cercano a The Stooges, aunque por momentos, como en Willow o Rock’n’roll Baby, se asemejen a todos unos The Fleshtones, para terminar ofreciendo artefactos explosivos que recrean al propio Don Covay o el Solomon Burke más juerguista.
Es la simbiosis perfecta entre el R&B urbano de Chicago y garage de último cuño. Es una cosa difícil de explicar pero que, repito, te pasa por encima, como un tren descarrilando y arrasando con todo. Y un consejo: si no lo has escuchado, será mejor que estés preparado para botar o romper cristales. Su incitación es imparable. Tras el fenomenal trabajo del año anterior del maestro Wilko Johnson o el regreso de Jon Spencer, no hay mejor noticia para los adoradores de este tipo de R&B atómico que la consolidación definitiva de Barrence Whitfield como un enorme embajador. Pocos le conocen en estas tierras pero si pasa por tu ciudad o pueblo, seguramente tiemblen los edificios.
Hay 1 Comentarios
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Publicado por: sports kdslots777 | 16/04/2021 5:53:14