México ha quedado atrás, también la selva, los mayas y el riesgo de que un huracán pueda arrasar el campamento. Los ruteros han disfrutado hoy, con calma, de Madrid, tras un largo viaje y un todo un océano cruzado. Esta mañana tocaba visitar el Palacio Real y el Museo del Prado, una de las mayores pinacotecas del mundo. El cansancio, sin embargo, ha ganado la partida al arte y algún que otro expedicionario no ha podido resistir echar una cabezadita en los bancos ante las obras de Goya o Velázquez. "Es una pena", comentaba un grupo de chavalas durante el almuerzo en plena plaza de Oriente, frente al edificio que aún hoy es sede de numerosos actos oficiales en los que tiene protagonismo la casa real.
El palacio ha sido, precisamente, la primera parada. He de confesar que, incorporarme hoy a la Ruta me ha permitido disfrutar de una visita que tenía pendiente desde que llegué a Madrid. A las diez menos cuarto de la mañana (y con un jet-lag de siete horas) varios grupos ya hacían cola en la entrada. A pesar de haberme quedado sin auriculares, he conseguido convencer a Claudia y a Manuel (en la foto) para que me hiciesen de guía. "Claro, así tenemos que escuchar nosotros", me comentaba la valenciana con algo de falsa indignación. Al cabo de tres salas, ella y su compañero madrileño rivalizaban por ver quién acertaba a explicar mejor lo que había comentado la historiadora que encabezaba la marcha. Así me he enterado de que la mesa francesa con las patas en forma de esfinge en la que Felipe González y Mario Soares firmaron el Tratado de Adhesión a la (entonces) Comunidad Europea está allí expuesta (pero no en la sala original) y que en todo el palacio hay unos 250 relojes fabricados por los más prestigiosos artesanos de cada época.
El alacio, que fue construido sobre las cenizas (literalmente, porque se incendió en 1734) del antiguo Alcázar y que no tiene en su estructura ningún material inflamable, permanece cerrado para las ocasiones especiales: la pascua militar, las audiencias y cenas de gala (unas 4-5 y 6-7 al año, respectivamente) y las cartas credenciales (unas seis anuales). Allí se celebró, por ejemplo, el convite de la boda del príncipe Felipe y Letizia.
Pero una de las cosas que quizá más haya llamado la atención de (al menos algunos) ruteros es la colección única de stradivarius que encierra la que fuese residencia de todos los jefes de estado españoles desde Carlos III (el primero que vivió allí) hasta la II República. Un magnífico cuarteto formado por dos violines, una viola y un chelo decorados que solo salen de su urna cuando la sala acoge algún concierto de cámara. "Lo que daría yo por tocarlo", exclamaba una de las ruteras pegada al cristal que protege los violines.
Al final de la visita, casi todo era agotamiento. Y de ahí, al Prado, de visita exprés para los periodistas. Perdida en la búsqueda de Velázquez, me he topado con Ana Gulias, una copista profesional que trabaja en el museo desde hace siete años y que compagina las reproducciones de grandes maestros con su propia obra. Hoy se hallaba inmersa en el Cristo crucificado del genio español. "Es un encargo, si no, esto no lo hago yo...", comentaba entre risas. Una gran responsabilidad esa de emular las pinceladas del maestro. La crucifixión, de la que me ha contado toda una historia sobre una novicia de la que el rey se enamora y que se hace pasar por muerta, transmitida de guía a guía durante toda la mañana, es el segundo que pinta. El primero fue Las hilanderas, "un capricho" que consiguió colocar a un comprador estadounidense. Pero lo que ahora tiene entre manos presenta una nueva dificultad, "conseguir esa devoción que impregna el cuadro" y que a duras penas ha conseguido espabilar a los chavales.
Durante el rancho, todo parecía, sin embargo, más vivo. Nada como la comida para despertar los sentidos. Cuando llegamos los periodistas, ya se había formado la cola de los que quieren repetir. Dulce, una compañera, alucinaba con las lentejas, la tortilla de patatas y el melón. "Cuando yo hice la ruta", hace 15 años, "solo comíamos bocadillos", dice entre risas. El caso es reponer fuerzas después de la dura aventura mexicana y prepararnos para lo que nos espera, porque aún tenemos por delante al menos dos machas duras (o eso nos han advertido). De momento, queda un día más de relax. Mañana, aún en Madrid, será una nueva jornada museística. Como dicen por aquí, "de tranquilidad".
Hay 10 Comentarios
Laura voy a seguirte como seguí a Luis. Soy la abuela de Sofia, grupo 06, y a pesar del contratiempo de la llegada, (fuí una de las que se fueron a St. Engracia) llegamos a tiempo de recogerla a ella y a tres encantadoras compañeras.Gracias a que conozco bien Madrid,y a pesar de la edad, aun estoy ágil al volante, pudieron llegar a tiempo, porque tuvimos que atravesar todo Madrid en medio de un gentío enloquecido con el futbol. Hoy CAMPEONES CAMPEONES .............
Publicado por: Teresa Hernández Urroz | 12/07/2010 15:34:46
Saludos a todos de nuevo. Lamento haber tardado tanto en haceros llegar noticias, pero he tenido algunos problemas técnicos por aquí. Estamos en Segovia, en el bus camino de Burgo de Osma, donde veremos el partido del mundial. Os dejo las crónicas de los últimos días, aunque con algo de retraso. Un saludo!
Publicado por: Laura Jiménez | 11/07/2010 17:49:56
Hola,Laura ! Bienvenida a la Ruta, estoy segura de que la disfrutaras tanto como Lluis, al cual saludamos y felicitamos en el aeropuerto. Muchas gracias por vuestro trabajo. Un saludo.
Publicado por: Yael Cortés | 10/07/2010 20:46:54
Hola Laura los papás y mamás de las y los ruteros seguiremos atentos tus crónicas, sabemos que es otra mirada del viejo mundo la que nuestros ruteros conocerán y si puedes salúdame a Valeria de El Salvador, es una chica morenita y pequeña pero con un corazón enorme, incluso talvez me la podrías sacra en alguna foto de tus crónicas, yo estaría más que complacida. Bendiciones,
Sandra Emilia Castillo
Publicado por: Sandra Castillo | 10/07/2010 18:01:27
Hola Laura, saludos desde EEUU. Me parece que vas a seguir muy bien donde nos dejó Lluís, inclusive me atrevo a decir mejor porque es evidente que entiendes que la mayoría de sus lectores son padres que, sobre todo, quieren saber cómo les va a sus hijos. Además de ser buena periodista, se nota que eres una maestra natural. Me refiero a lo que hiciste con los estudiantes en el Palacio Real. Eso es lo que queremos ver – una conexión personal con los chavales. Mil gracias. A propósito, hablando del Palacio Real, ¿qué sucedió con la recepción con don Juan Carlos y doña Sofía? No he leído nada sobre ella. Espero que disfrutes al máximo de tu aventura.
Un abrazo a Roxana (Grupo 8) si la ves por allí.
Publicado por: Susan | 10/07/2010 0:02:51
Hola Laura, un saludo. Maravilloso que continúes con estas crónicas, son buenísimas. A través de ellas podemos saber qué hacen los muchachos y conocer algo sobre los sitios que visitan. Saludos para los ruteros venezolanos, un beso para mi hija Cindy de Venezuela, grupo 3, la amo.
Gracias y bendiciones
Publicado por: iliana martelo | 09/07/2010 20:57:01
Hola Laura, un saludo. Maravilloso que continúes con estas crónicas, son buenísimas. A través de ellas podemos saber qué hacen los muchachos y conocer algo sobre los sitios que visitan. Saludos para los ruteros venezolanos, un beso para mi hija Cindy de Venezuela, grupo 3, la amo.
Gracias y bendiciones
Publicado por: iliana martelo | 09/07/2010 20:19:51
Muchos saludos desde España. Yo también espero disfrutar la mitad de lo que lo hizo él y haceros vivir la ruta casi tan bien con las crónicas. Intentaré encontrar a Elena María y conocer al resto de ruteros. Ya hay ganas de seguir con la aventura!!
Publicado por: Laura Jiménez | 09/07/2010 8:21:58
Laura, que disrutes tanto como lo disfrutó Lluis. Y acóstumbrate a nosotros. Hablamos con Lluis en el aeropuerto y nos dolió que se fuera, pero nos aseguro que nos dejaba en muy buenas manos y que ibamos a disfrutar contigo. Como compañera de el, dile que lo seguiremos otra vez en economia.. Esperemos que ahora nos de noticias tan buenas como nos dio en la ruta y que tu nos hagas cronicas tan vibrantes como las suyas. Y por favor, recuérdale que se dejó una crónica del cacao, por favor! La queremos leer! Besos a Gerardo y dile que se ponga delante de la camara.
Publicado por: Madre | 09/07/2010 5:43:22
Laura que buena descripción del cansancio de los chicos. A ver si conoces a la chilena Elena-María (grupo9), nuestra rutera y le das un saludo desde Las Condes Santiago de Chile...Su familia...
Buenisima las fotos!!!
Publicado por: Mony Ortiz Otarola | 09/07/2010 5:04:17