Dentro del programa ‘Miércoles informáticos’, el Infocentro
Digital de Huesca organiza
charlas y talleres, sobre algunas de las utilidades de Internet y del ordenador,
que forman parte de un plan de inclusión digital del Ayuntamiento de
Huesca. La semana pasada me ofrecieron
la oportunidad de compartir durante un par de horas mi experiencia como lector
de libros electrónicos. Así que preparé unas diapositivas y metí en un bolsa mi
“Kindle” de segunda generación (2009), que un amigo me trajo de Estados Unidos,
el ligero Sony Reader (2012) y el iPad (2012), para que me sirvieran de ayuda a
la hora de explicar las cosas básicas que a mi juicio se deben conocer sobre
los libros electrónicos.
Como introducción, comenté algunos datos sobre la publicación de libros en España, tanto de papel como electrónicos. Les dije que en los nueve primeros meses de 2012 se han registrado 67.543 títulos en el ISBN, de los cuales el 23% (15.225 títulos) corresponden a libros electrónicos. Después, hablé de las plataformas de distribución o librerías electrónicas, tales como Amazon, iTunes, Casa del Libro, Fnac, El Corte Inglés, Bubok, Kobo…
Tras explicar los tipos de archivo más utilizados para crear ebooks (ePub, Mobi y PDF), hablamos de los distintos dispositivos donde se puede leer un libro electrónico y de las aplicaciones para leerlos en tabletas, ordenadores portátiles y de sobremesa. Comenté los distintos lectores (eReaders) que utilizan pantallas retroiluminadas (como la del iPad) o de tinta electrónica, como el Kindle más básico o el Sony Reader. Dedicamos también unos minutos a explicar algunos casos de editores y autores que han iniciado su actividad gracias a la edición electrónica. Todos estos casos son conocidos por los lectores de Sin Tinta porque han sido publicados a lo largo de los últimos diez meses en este blog.
Aunque alrededor de un tercio de los asistentes a la charla leía ya ebooks, la pregunta más repetida fue “¿Qué lector de ebooks recomiendas?”. Como no debí responder de forma satisfactoria, lo preguntaron varias veces, pero de otra forma: ¿Mejor con pantalla retroiluminada o de tinta electrónica? ¿Merece la pena comprar un iPad para leer ebooks?
Desde hace un tiempo, mi respuesta a qué lector de ebooks hay que comprar es otra pregunta: ¿Qué sueles leer? No es lo mismo leer novelas de 400 páginas, una tras otra, que leer libros cortos, artículos, consultar libros de cocina o de fotografías. Haciendo recuento de mis lecturas de las últimas semanas, observo que me han interesado distintos artículos largos y crónicas periodísticas que he leído en el ordenador de sobremesa o en el iPad. Twitter es mi principal proveedor de lecturas “cortas” con las pistas que me proporcionan las personas a las que sigo.
Para leer textos más largos (casi nunca de ficción), prefiero
el lector de Sony PrS-T1 (comprado este año, pero que ya no es el último modelo). Incorpora una pantalla
táctil de 6 pulgadas y permite almacenar 2 GB (alrededor de 1.000 ebooks). Pesa
solo 186 gramos y se puede llevar en el bolsillo de la chaqueta mejor que un
libro de papel: uno de los últimos libros que he leído en papel, y que
recomiendo, es Un maravilloso porvenir,
de Katherine Boo, que tiene 242 páginas, pesa 364 gramos y mide 24 x 15
centímetros. El reader de Sony mide 17,3 x 11 centímetros. En los últimos días,
he disfrutado leyendo en el Sony Salida de emergencia,
de Fabricio Mejía Madrid.
Acabo de echar un vistazo a mi biblioteca del iPad y me doy cuenta de que leo menos libros que con el Sony. Uno de los últimos que he terminado en la tableta de Apple es Días de visita, del cronista Marco Avilés. Sin embargo, en el iPad leo más revistas y periódicos. Por ejemplo, gracias a las edciones en PDF leo todos los meses las revistas colombianas Soho y El Malpensante que no puedo conseguir en papel.
Al día siguiente de la charla, por medio de Twitter conocí la experiencia personal de lectura en pantalla de Fernando Trujillo (@ftsaez), quien ha pasado más de un mes sin comprar libros de papel. En un muy recomendable post explica cómo le ha ido leyendo en pantalla y las conclusiones que ha obtenidos tras analizar su propio comportamiento. Me resultó especialmente interesante el comentario que realiza sobre la lectura “disruptiva” con el iPad, donde creo que nos reconocemos los que empleamos estos aparatos para leer:
“El iPad, además de añadir peso y una irresistible atracción de las miradas circundantes, también tiene otra influencia sobre mi lectura: es un gadget con tendencias de lectura disruptivas. Si no activas el botón de "no molestar" (en iOS6) o desconectas las notificaciones o incluso la wi-fi, la aparición de mensajes de correo, SMS, WhatsApp, tuits y mensajes de Facebook es capaz de desconcentrar, por medio de lecturas invasivas, al más concentrado de los lectores. Es más, incluso cuando desconectaba el iPad del mundo exterior, mi tendencia habitual con este dispositivo era leer mi correo, mi timeline de Twitter y mi muro de Facebook antes de empezar a leer el texto que inicialmente había decidido. El iPad, en mi opinión, es un gadget para la conectividad y con frecuencia la lectura exigen aislamiento; "desconectar el iPad de las lecturas invasivas" es, por tanto, un paso previo a ciertas "lecturas recogidas".
Disfruté mucho en la charla del Infocentro y me fue muy útil porque hizo que reflexionara sobre mis hábitos de lectura de ebooks. Como resumen, mi conclusión es que para leer ebooks primero hay que saber qué es lo que lee cada uno. En mi caso, para leer libros electrónicos utilizo el Sony, un dispositivo de tinta electrónica. El iPad me sirve para el correo, Twitter, navegar por Internet, leer pdf y algún ebook corto.
Comparte tus hábitos de lectura: ¿Qué tipos de libros lees? ¿Cuántos al mes? ¿Qué dispositivo utilizas para leer los ebooks? ¿Prefieres las tabletas o los lectores de tinta electrónica?
Estoy en Twitter: @mongay55