Toma cuerpo la idea de que la solución a un escenario de paz sin ETA no encuentra su punto de partida. Podría decirse que las voces implicadas en la solución siguen sin escucharse; desde luego, no coinciden en definir cuál debe ser el común denominador. Incluso, la última visita del Grupo de Contacto que lidera Brian Currin, con un comunicado reiterativo, ha enfriado demasiado las expectativas. A estas alturas del partido, donde las cartas ya debían estar sobre la mesa, insistir otra vez como principal mensaje en que la clave para aproximar un acuerdo pasa por la Declaración de Aiete solo confirma que no hay nada nuevo que decir.
Existe una falta de sintonía absoluta en cada bando, de lenguajes encontrados, que avivan el escepticismo. De un lado, ETA entiende que ya ha cumplido con su anuncio de renuncia al terrorismo y que, en consecuencia, es a la otra parte a quien corresponde mover ficha. En cambio, los aludidos, el Gobierno de Mariano Rajoy y ahora el de François Hollande en Francia, consideran que solo a partir del anuncio de disolución de la banda atenderá las peticiones. Así han pasado siete meses; todo hace pensar que pasarán muchos más.
De momento, la mirada más inmediata se dirige a Gernika, al acto que el colectivo de presos de ETA anuncia para el 2 de junio con el propósito de pasar a limpio sus conclusiones. Como venía ocurriendo durante meses con cada movimiento previo de la izquierda soberanista antes de llegar la paz, el servicio de marketing abertzale también predice "novedades". La cuestión radica en saber para quién. Si el mensaje más intencionado del EPPK, una vez desprovisto del lenguaje introspectivo para galvanizar a los propios, vuelve a apostar por la obligada salida conjunta de los presos, Madrid mirará para otro lado y no se sentirá concernido. Ahora bien, ¿acaso de un mitin se puede esperar un giro en un tema tan nuclear como el reagrupamiento o la resinserción?
Mientras corre el reloj, las prisas solo se apoderan de los más necesitados, y en este caso son los presos, donde siempre, antes y ahora, ha estado la solución a todos los males. En el caso del Gobierno, bastante tiene con la prima de riesgo para adentrarse en más charcos. En esta difícil coyuntura, es comprensible que cunda el nerviosismo en el lado abertzale y hasta Pernando Barrena se ve obligado a decir en la misma frase que justifica a los etarras que sigan llevando armas pero que, desde luego, no volverán a atentar.
Es evidente que el Grupo de Contacto ha detectado definitivamente el inmovilismo de las partes concernidas. Que avanzar se antoja muy difícil, parece concluir. Así las cosas, hasta que se entiende que se echen en brazos de las próximas elecciones en Euskadi, ávidos de que una cualificada mayoría nacionalista ponga toda su peso sobre la mesa de Madrid. ¿Y si Patxi López aguanta la legislatura, cómo se controlan los nervios hasta febrero de 2013?
Hay 2 Comentarios
El tema de ETA ademas es un recurso y cada vez es màs evidente en la lucha politica,afortundamente la magnitud policial decrece y "el problema ETA" es todavia un instrumento para el rendimiento electoral, para el posicionamiento y la diferenciacion " de grado " entre los contendientes constitucionales,siempre se eleva la voz y la apuesta para demostrar quien es màs antiterorista, quien mas victima y quien màs leal con las victimas, asi se han consagrado dogmas , se da voz en contextos determinados a las victimas y no siempre de un modo noble , hay una evidente instrumentalizaciòn delas mismas y el escanario actual es un tren que ha descarrilado y atasca la via,asì, estamos entre posiciones contundentes que compiten minetras la izaquierda abertzale organiza performace y manifestaciones para que no se disgregue la grey, todavia lejos de apuntar algun matiz crìtico claro sobre el fracaso del recurso a la violencia,el espejismo de su lucha politica que se estrellò con la realidad , pues despues de tan largo viaje y una cantiodad de victimas estàn abocados a aceptar el estado de derecho realmente existente y vigente, o sea el principio de realidad .
Publicado por: Sanmartini | 01/06/2012 13:58:02
A finales de los 90 con Oreja de Ministro se impuso el totem de la "entrega de las armas", pasado el primer apuro, con la tregua del 98 Fluxa, entonces secretario de estado, dijo que lo de la entrega de las armas era una bobada porque las armas se recuperan, no hace falta recordar que en los ultimos quince años, despues de que Fluxa dijera esto en 1999, ETA ha robado toneladas de explosivos y cientos de armas.
Bien, con la disolucion de ETA es lo mismo, la actual ETA es la ETA enesima asamblada. Quien sea que esta en la direccion de la organizacion puede muy bien llamar a la disolucion, como hicieron los polimilis y les salieron los octavos. Lo de la disolucion es irrelevante, es mas, creo que ETA podia disolverse tranquilamente pasado mañana, pero y ETA IX asamblea?.
Publicado por: VictorII | 31/05/2012 14:06:10