Refugiadas griegas y armenias ven el mar por primera vez, Maratón, Grecia. Fuente: www.paglen.com
Esta fotografía de refugiadas griegas y armenias que disfrutan del mar por primera vez en Maratón (Grecia) es una de las 100 instantáneas que Trevor Paglen ha enviado al espacio. Durante cinco años el artista estadounidense entrevistó a científicos, artistas, antropólogos y filósofos para que le ayudasen a decidir qué imágenes no deberían faltar en la "película muda o poema" sobre la humanidad que quería legar al futuro con el proyecto The Last Pictures.
Desde 1963 se han lanzado más de 800 satélites al espacio, todos ellos destinados a ser los artefactos más duraderos de nuestra civilización. Paglen aspiraba a esa perdurabilidad, así que tras la documentación y selección de imágenes, necesitaba construir un contenedor que pudiera enviar al espacio adosado a un satélite de comunicaciones.
Y fue en el Massachusetts Institute of Technology donde le ayudaron a desarrollar un artefacto diseñado para perdurar miles de años: un disco de silicona en el que volcó las imágenes y que protegió con una carcasa dorada.
El pasado 20 de noviembre el satélite EchoStar-16 se lanzó al espacio desde el cosmódromo de Baikonur (Kazajistán) y en él viajaban las 100 fotografías seleccionadas por Paglen, que desde entonces orbitan a 38.000 kilómetros de la Tierra:
En un futuro muy lejano, asegura Paglen, todas esas fotografías serán prácticamente el único testimonio de un tiempo que ya no existirán, serán "el equivalente a lo que son para nosotros hoy las pinturas rupestres".
Tifón, Japón, principios del siglo XX. Fuente: www.paglen.com
Salida de la Tierra. Fuente: www.paglen.com
Antiguo quirófano, St. Thomas Church, Southwark, Londres. Fuente: www.paglen.com
Glimpses of America, American National Exhibition, Moscow World’s Fair. Fuente: www.paglen.com
Montaña Cheyenne, Colorado Springs, Colorado. Fuente: www.paglen.com
El catálogo del proyecto The Last Pictures está editado por University of California Press y Creative Time.
Hay 2 Comentarios
El vertiginoso desarrollo de la tecnología.
VI anoche un documental en el que un arqueólogo de Atapuerca sostenía en sus manos dos útiles de piedra usados por nuestros ancestros para cortar la carne. Las diferencias entre ellos eran mínimas, si acaso el más reciente presentaba una mejor ergonomía para asirlo con la mano y los filos de piedra eran un pelín más afilados. Entre uno y otro habían sido precisos 150.000 años para lograr esa leve mejora.
Luego dejó el útil más antiguo y sostuvo ante el más moderno un teléfono móvil de última generación. Entre el cuchillo de piedra y el teléfono sólo habían transcurrido 15.000 años.
Sin embargo seguimos siendo en esencia, biológica y genéticamente, el mismo hombre que hizo el cuchillo de piedra.
Cabe esperar, por tanto, que la transformación tecnológica que experimentará el mundo en un futuro no tan lejano sea para nosotros tan inimaginable, tan inconcebible como un teléfono móvil lo pueda ser para un recolector-cazador que vivió hace 15.000 años.
La cuestión es, como siempre, qué uso daremos a esa tecnología y si esa habilidad tecnológica irá pareja con la inteligencia necesaria para aprovecharla en bien de todos, de la especie, o por el contrario se apropiarán de ella grupos determinados para sus mezquinos intereses de poder económico y político.
Pero sí, el mundo de nuestra infancia se parecerá más al mundo del siglo XVIII que al mundo que verán los críos que nazcan dentro de 50 años.
Vértigo.
Publicado por: klisman | 15/12/2012 11:29:16
Me pregunto con curiosidad cuales pueden ser los criterios de selección de estas 100 fotografías. Si , como dicen, el objetivo es dar un testimonio de lo que fue la vida del ser humano, dudo mucho que se pueda conseguir a base de bellas fotografías que nos muestran lo excepcional, lo raro, lo espectacularmente bello. Tal vez nuestra alma propagandista sigue trabajando aún cuando ni sepamos quiénes van a ser los receptores!
Publicado por: Juan Carlos | 15/12/2012 10:02:58