Dice Éric Puybaret que ilustrar un clásico es un reto interesante. “¿Cómo liberarse de todo el imaginario ya construido sobre ese cuento y dejar que la imaginación fluya libremente mientras leemos el texto?”, se pregunta el francés cada vez que aborda una obra clásica. En realidad, explica, con su último álbum publicado en España, La bella durmiente del bosque, no lo tuvo del todo difícil. “La imagen asociada a la bella durmiente no está muy clara. El imaginario popular la ve más bien rubia; sabemos que es una princesa, que viste ricos ropajes y es romántica. A partir de ahí, todo es posible”. Pero la cosa cambia si se trata de un personaje con una "personalidad gráfica" tan poderosa como la del ingenioso hidalgo de Miguel de Cervantes. "¡A Don Quijote se le reconoce enseguida! Desde Picasso, con esa silueta incisiva como una sombra chinesca, su aire inquieto, las puntas de su lanza y de su armadura, su barba alocada, hasta el jamelgo sobre el que monta, un buen Don Quijote es el Don Quijote que se reconoce de un vistazo”.
Con todo, Puybaret cree que siempre hay un pequeño margen para dar una lectura distinta a este tipo de personajes, y para demostrarlo –o ilustrarlo– ha dibujado su Don Quijote para El País:
El personaje de Cervantes está dibujado exclusivamente con bolígrafo, una técnica que Puybaret lleva tiempo perfeccionando y con la que ilustrará su próximo trabajo, un cuento de Hans Christian Andersen.
A pesar de su pasión por los clásicos –le encantaría dibujar “el ataque de la ballena en Pinocho…”-, el cuento preferido de Puybaret es uno escrito por una anciana tía de su padre. Se llamaba El pequeño Moulineau. “Era la historia de una malvada cabra que echa a un niño de su casa para instalarse en ella y el niño necesitará la ayuda de los animales del bosque para sacarla de allí. En el cuento hay una frase que mi padre entonaba con una voz amenazadora (intraducible en español): “¡Soy la cabra de Viravirel, que lleva hierro y cuchillel, el primero que entre, en alma y cuerpo se quede!’. Es algo que te marca…”.
La bella durmiente del bosque de Élodie Fondacci y Éric Puybaret está editado por Edelvives.
Hay 3 Comentarios
http://www.lashojasvuelven.blogspot.com.es/2013/05/y-iii-payasos-quijote.html siempre inspirador, el Quijote nos acompaña siempre. Reflexiones, marionetas sobre el Quijote, también en el enlace señalado.
Esperamos La bella suemiente a bolígrafo. La ilustración es un mundo mágico.
Publicado por: Esperanza | 05/07/2013 15:52:40
Precioso! qué buen artículo Virginia, enhorabuena.
Publicado por: Angélica Giménez | 05/07/2013 15:19:52
Excelente trabajo, distinto a otros que se han hecho para la misma obra. Lo cierto es que El Quijote es una gran obra que ha dado y sigue dando pie a muchas interpretaciones y visiones distintas. Y nos ha dado también ocasión de conocer lugares de La Mancha pocos conocidos pero no por ello exentos de belleza, como El Toboso. Si alguien aún no lo conoce, recomiendo visitar http://viajediferente.blogspot.com.es/2012/06/el-toboso.html para hacerse una idea y animarse a visitarlo.
Publicado por: Un viajero. | 05/07/2013 15:18:57