Las comedidas reacciones de los famosos a la inhabilitación de Garzón ponen en duda la longevidad uno de los filones de 2011: las meteduras de pata por opinar de política en Twitter
El anuncio de la condena contra Garzón hizo de ayer uno de esos días de actualidad frenética, apasionada opinión política y tuiteo maratoniano. A las dos y media de la tarde, Garzón 11 años se convirtió en el segundo trending topic mundial, seguido de Gurtel. Al poco fue reemplazado por Garzón a secas, y ahí permaneció durante horas.
Con estas, lo normal fue encontar entre los varios cientos de miles de mensajes necesarios para lograr tres trending topics mundiales paralelos la firma de algún personaje público:
Tan poco reseñables son estos comentarios, tan cotidiano es el hecho de ver a según qué famoso volcar una exégesis política en su Twitter, que cualquiera diría que justo hace un año estábamos con aquel histórico festival de la greguería que fue #turismobisbal, que abrió la veda a las sonadas mofas de las opiniones de algunas celebridades.
¿Estamos ante el fin de esta era?
Si estudiamos los tuits políticos más recientes de los famosos vemos que la evolución del fenómeno sugiere que la respuesta es sí. 2012 será otra era para la fama en Twitter. El por qué puede dividirse en cuatro claves.
1. Los famosos ahora tuitean más y de forma más personal que en 2011. Con lo cual, una opinión suya destaca mucho menos que antes.
Esto al menos salvó a Alec Baldwin un día. El actor, afanoso tuitero y reputado populista político, tentó al diablo el pasado 15 de noviembre cuando, en pleno desalojo forzoso del parque Zuccotti de Nueva York donde estaba instalado el movimiento Ocupa Wall Street, tuiteó:
(En el NY de Bloomberg no cabe la 1ª enmienda. Bloomberg sirve a Wall Street, ahora y siempre. Y Wall Street no soporta la libertad de expresión)
Puede ser que, como en aquel momento apoyar Ocupa Wall Street era de lo más cool, Baldwin olvidara que es uno de los millonarios a los que criticaba el movimiento, amén de marca oficial de uno de los bancos (Capital One) a los que censuraba. O puede que sí se acordara y le diera igual. Qué más da. Saca tantos tuits nuevos que eclipsan los anteriores, que pocos le recriminaron la contradicción. Fue retuiteado, alabado y consagrado como voz oficiosa del movimiento.
2. La frontera entre Twitter y el mundo real se ha diluido. Esto, claro, abre tanto el abanico de meteduras de pata que la cosa deja de ser un fenómeno endémico. Bertín Osborne, por ejemplo, la lió al tildar al 15-M de "soplapollez" en una revista. Pero la lió porque el varapalo se trasladó solito a la red social. Hasta su forma de resolver el asunto fue ajena a Twitter.
3. La actualidad es un poco más compleja y menos espectacular que en 2011. Entonces todo eran hechos históricos (primavera árabe, terremoto de Japón, captura de Bin Laden, fin de violencia de ETA) que contemplábamos con consensuado pasmo. Ahora la actualidad depende del criterio político y económico de cada usuario.
Está Twitter tan cargado de opiniones que el hecho de que Carmen Lomana se escandalice por la subida de impuestos propuesta por el PP y llame a sus seguidores a una disparatada insumisión fiscal, pues hombre, tiene su aquel, pero no deja de ser una opinión más en un tema en el que no estamos para bromas.
4. Los famosos han aprendido a usar Twitter un poco mejor. No es que no se escriban tuits políticos dignos de mención, es que ahora se tienen los reflejos de recular.
Cuando Dinio García metió la pata en tras morir Fraga ocurrieron tres cosas: que lo hzo ante menos gente, porque los famosos de primera se pronunciaron desde un punto de vista más comedido; que lo hizo desde una cuenta muy personal entre lo estrafalario y lo soez en la que nadie sabe si habla en broma o en serio; y que, si fue un error, supo salvarlo con rapidez.
Hasta Alejandro Sanz, el blanco favorito de tantos tuiteros, ha perdido gancho. A finales de octubre confundió a Marta Domínguez con Marta del Castillo y el tema tuvo una recepción relativamente descafeinada. Si habló fue para complacer a una seguidora, reconoció el error enseguida, pidió perdón y ya. Se le buscaron los tres pies al gato con un #Alejandrosanzfacts al uso, pero no duraron.
Es bastante probable que 2012 sería el tedioso año de tener la lección aprendida. Vamos a buscar otro filíon.
Hay 4 Comentarios
Es normal que se arme revuelo cuando quien expresa su opinión es una persona que centra sobre sí las miradas por algún motivo. Sin embargo no debemos olvidarnos que a fin de cuenta son también personas y tienen derecho a opinar lo que les parezca, sea esto apoyado por la mayoría o no.
Publicado por: Juan Labret | 10/02/2012 23:20:06
Esta muy bien que los famosos opinen sobre la actualidad, pero deberían hacerlo desde la convicción y desde la sinceridad, nunca deberían hacerlo como peloteo a sus fans para agradarles y seducirles. Dicho esto, reitero mi VERGÜENZA COMO ESPAÑOL...GRITO HASTA LA AFONÍA QUE SIENTO REPUGNANCIA POR LOS JUICIOS JUZGADOS ANTES DE JUZGARSE...QUE ME SIENTO IMPOTENTE E INDEFENSO COMO ESPAÑOL AL OBSERVAR COMO SE MANIPULAN LAS LEYES PARA APLICARLAS A LA CARTA SEGÚN LOS INTERESES DE LA CORROMPIDA DERECHA POLÍTICA...¡¡¡¡ESTO ES UNA VERGÜENZA NACIONAL Y UN RIDÍCULO INTERNACIONAL!!!!
Publicado por: Miguel Bustos | 10/02/2012 21:37:24
Siempre habrá un famoso preparado para meter la pata, aunque sea a consciencia para hacerse un poquito de publicidad gratis, no lo duden.
http://casaquerida.com/2012/02/10/bye-bye-medium-class/
Publicado por: Tinejo | 10/02/2012 20:13:42
Pues sí, ya ha dejado de ser una novedad que los famosos tengan Twitter; ¿harán esas declaraciones "explosivas" a propósito para que se hable de ellos? ¿Y a alguien le interesan las opiniones sobre política de estos personajes?
Publicado por: jalop | 10/02/2012 18:02:18