Justin Bieber junto a los hijos de Michael Jackson, el pasado enero. /PHIL McCARTEN
Si las personas más famosas del mundo acudieran, todas juntas, a una discoteca, el encargado de vigilar la puerta se hartaría de pedirles el DNI. Quizá no tanto a los veteranos de probadas canas como Steven Spielberg, Oprah Winfrey o Jennifer Lopez, pero sí a iconos más inmediatos como Justin Bieber, de 18 años; Rihanna, de 24; Lady Gaga, de 26 o incluso Britney Spears (30) y Kim Kardashian (31).
A esta conclusión ha llegado la revista Forbes tras ver cómo les ha quedado este año su sacrosanta lista de las 100 personas más famosas del mundo: nunca en su casi siglo de historia han incluido a gente tan joven. Es más, de las diez personas que encabezan la élite cultural-comercial, seis pertenecen a la generación de los Millennials (alguien nacido entre 1980 y, según a quién se consulte, 1995 o 2000). Dos más que en 2011, y ya entonces era un récord.
Este cambio viene a confirmar una tendencia que se viene notando desde hace años: el mundo adora cada vez más a artistas cada vez más jóvenes. La novedad este año es que la revista echa la culpa a Twitter.