De entre los niños que jugabamos con LEGO salieron muchos arquitectos. Hace unos años, uno de ellos, Adam Reed Tucker, decidió construir sus edificios favoritos con los famosos ladrillos de plástico.
"Quería expresar la complejidad de la ingeniería que hay detrás de un rascacielos pero suavizando esa naturaleza intimidatoria que tiene la arquitectura para la mayoría de la gente", explica Reed en la web de su compañía, Brickstructures.
A LEGO le encantó la idea y desde 2010 comercializa estas mini obras maestras contemporáneas, siete de las cuales se venden España por entre 90 y 20 euros el pack, que incluye un dossier sobre el edificio. Para el lanzamiento, la juguetera ha contactado con siete arquitectos patrios que opinan sobre cada uno de los edificios y sobre el juguete que les marcó profesionalmente. Os dejo con las maquetas y con algunos de sus comentarios, para leer el documento completo, pincha aquí.
BURJ KHALIFA (25 euros, 208 piezas, 414mm x 116mm. La torre real mide 800 metros)
Según Rafael de La Hoz, "el horizonte es un sitio rarísimo". "Para empezar no es un sitio, sino una línea. Una raya inabarcable, a la que por mucho que nos acerquemos siempre está a la misma distancia. Posiblemente tras muchos intentos de llegar hasta el horizonte, y tras mucho caminar y mucho navegar, alguien comprendió que para alcanzarlo había que elevarse. Si colocamos la maqueta de LEGO de la torre Burj Khalifa sobre una mesa y nuestros ojos exactamente a la altura del tablero, comprobaremos como la superficie de la mesa desaparece de nuestro campo de visión. Si a continuación elevamos la mirada hasta la coronación de la torre podremos ver entonces, muy claramente, los bordes de la mesa. Parece una cosa evidente pero, como todo lo transcendental, es necesario descubrirlo para comprender para que sirve una torre. Sólo cuando nuestro punto de vista está fuera del plano de tierra, el horizonte perceptivo puede ser alcanzado y seguramente por ello aprendimos a subirnos a los árboles y a escalar montañas".
EMPIRE STATE BUILDING (20 euros, 77 piezas, 18,8 cm de alto, el de verdad mide 443 metros, con antena )
"El Empire State es Art Decó por su carga ornamental o decorativa, estilo al que pertenecen algunos de los más bellos rascacielos de Nueva York y que prácticamente nace y muere con la Gran Depresión del año 29", comenta el arquitecto Carlos Rubio Carvajal, para quien "rascacielos y siglo XX son dos términos que van necesariamente unidos". "El rascacielos representa la conjunción de todas las tecnologías del siglo, constituyendo un fenómeno arquitectónico de primer orden que configura el perfil de cada vez más ciudades. Su construcción sigue captando y provocando el máximo interés, y desconcertando tanto a teóricos y críticos como a arquitectos, pues estos edificios de gran altura siguen representando lo mejor y lo peor de nuestro tiempo".
FARNSWORTH HOUSE (60 euros, largo 96mm, alto 278mm, obra maestra de Mies van der Rohe).
Según Federico Soriano "la Farnsworth House, partiendo de ser uno de los hitos de la arquitectura moderna del siglo XX, se ha convertido en la imagen ideal, y precisa, de nuestro mito de la vivienda moderna. Es el icono en el que confluyen todas nuestras ilusiones y aspiraciones sobre el habitar, sobre morar, o residir. Es la arquitectura que se inserta en una naturaleza que reconocemos como el paraíso original, recuperado al fin, después de muchos siglos de alejamiento. El retorno a un entorno que aunque salvaje sabemos que es primigenio. Propio. Hermano. Nuestro".
LA CASA BLANCA (56 euros)
"La casa más famosa del mundo no es exactamente una obra maestra de la arquitectura universal pero, el edificio que simboliza el mayor poder fáctico sobre la tierra y que es visitado por miles de turistas a diario, cuenta con interesantes cualidades", opina Fermín Vázquez. "El edificio proyectado por James Hobam en 1792 fue simplemente una gran casa inspirada en la Leinster House de su Dublín natal, a su vez inspirada en la villa rotonda de Palladio". "El edificio, admirado y odiado, símbolo de la democracia para muchos y del poder hegemónico para otros es, como tanta arquitectura por otra parte, una copia de una copia".
FALLING WATER (90 euros, 256 mm de ancho, obra cumbre de Frank Lloyd Wright)
"Cuando en 1935 Frank Lloyd Wright, de 68 años de edad, recibe el encargo por parte de la familia Kaufmann de diseñarle la Bear Run House, su casa de recreo, se cumplen todos los requisitos de su llamada arquitectura orgánica", explica Gabriel Allende. "El concepto de entidad intrínseca donde un magnífico y entusiasta cliente y un espléndido lugar convergen. La respuesta natural al lugar parecía que era diseñar la casa en voladizo sobre la caída de agua".
MUSEO GUGGENHEIM DE NUEVA YORK (40 euros)
"Desde pequeño me he entretenido siempre con todo tipo de construcciones. Debió ser la influencia de mi padre, arquitecto como yo. Me regalaba, más bien nos regalábamos, juguetes donde la imaginación espacial estuviera siempre presente. Y, entre ellos, LEGO jugó siempre un papel principal en las noches mágicas del 5 de enero. Coger piezas y ser capaz de idear objetos por la simple conjunción estructural de unas piezas con otras es algo que, ante la imaginación de la infancia, se vuelve mucho más que un juego para convertirse en enseñanza y posterior destreza. Con este LEGO que tienes en tus manos te imaginarás andar por la 5ª Avenida y vislumbrar este edificio que parece una cinta blanca enrollada en forma cilíndrica, más ancha en la cima que en su parte inferior" dice Ángel Serrano refieriéndose a la obra de 1959 de Frank Lloyd Wright. "Una maravillosa pieza escultórica; exteriormente dominada por una helicoide continua, la cual se convierte en una rampa circular que recorre el interior, formando un maravilloso vacío que envuelve a las obras de arte que se exponen en este museo, uno de los más famosos del mundo. Es en esta maravillosa construcción donde exterior e interior, contenedor y contenido, rivalizan entre ellos para ofrecer al espectador una experiencia única".
SEATTLE SPACE NEEDLE (20 euros, 57 piezas, 222 mm de alto, altura del edifico, 184 metros)
"En mi infancia fui un entusiasta usuario de LEGO", confiesa Carlos Lamela. "Usaba sus piezas no solamente para construir pequeños edificios sino todo tipo de artilugios que iban desde aviones y cohetes hasta pequeños futbolistas con los que jugué muchos años. El Space Needle, o Aguja espacial en español (originalmente se llamó la Jaula Espacial), es una extraordinaria construcción que representa de forma excepcional la historia de su tiempo. Su diseño, proyecto y construcción coincide con una de las épocas más apasionantes de la humanidad: el descubrimiento del espacio. La época en la que se concibió este magnífico edificio, que nos recuerda con gran elegancia y ligereza esos años en los que yo era niño y pensábamos que cuando fuésemos mayores viajaríamos en coches voladores y llevaríamos trajes plateados llenos de cremalleras. Era la época de los Los Supersónicos y Los Thunderbirds".
Hay 8 Comentarios
@primer comentario
Sólo digo una cosa:
http://img339.imageshack.us/img339/6691/49779446.jpg
Publicado por: yo | 19/11/2011 1:06:29
Aquí faltan las figuras LEGO de Japón. Allí tienen las de la Torre de Tokio, el Kaminarimon de Asakusa y no recuerdo ahora los otros...
Publicado por: algogoku | 17/11/2011 18:38:10
Sí se venden (se puede ver el precio y el número de piezas), se pueden encontrar en muchas tiendas de internet y físicas como Hola Caracola, electricbricks o incluso El Corte Inglés.
Publicado por: 33 | 17/11/2011 18:30:58
este verano pasado hemos estado en el famoso Legoland, en alemania, con mis tres hijos. Reviví un viaje de mi infancia cuando me llevaron mis padres al Legoland original, en Billund, Dinamarca. Son parques fantásticos, interactivos y que da bienos recuerdos para siempre. ¡VIVA LEGO! Lo recomiendo a todos, es mucho mejor y mäs barato que cualquier otro parque de atraciones o temático.
Publicado por: María | 17/11/2011 18:06:09
Soy muy fan de LEGO, Pero estos los encuentro pequeños, feos y caros... Me esperaba más de LEGO, la verdad...
Publicado por: Rodrigo | 17/11/2011 17:02:27
El comentario anterior, debería ser borrado, menuda auto promoción más burda.
A parte de que o no has leido el artículo o no te has enterado, no los ha podido hacer la autora porque los ha diseñado un sr. no es que los venda lego...
Buen artículo y muy buena iniciativa la del señor este. LEGO está más presente en el mundo de la ingeniería cada día que pasa ejejej deben ser reminiscencias de la niñez.
Saludos
Publicado por: Txemary | 17/11/2011 15:43:43
La verdad es que son muy vistosos una vez hechos, pero para el número de piezas que tienen salen muy caros (más de lo habitual en LEGO). Y al pesado spamero del primer comentario, yo sí he hecho esos "puzzles" como los llama, y muchos otros del mismo fabricante. Pruebe usted a hacerlos también y verá lo entretenidos y educativos que son, a ver si así no nos da tanto la vara pidiendo por todas partes que entremos en su página.
Publicado por: Unaquepasaba | 17/11/2011 10:37:32
Te tienes que aburrir mucho para ponerte a hacer un puzzle de estos en 3d, que ni siquiera la autora del blog habrá hecho. Pero hay que reconoces que una vez terminados no son feos.
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Publicado por: Aprende a seducir | 17/11/2011 10:19:08