De las decenas de miles de sacerdotes que hay en España, TVE ha tenido a bien retransmitir la misa dominical en el espacio El día del Señor que celebró el inefable moseñor Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares, en la parroquia de Santa Mónica en Rivas-Vaciamadrid (Madrid). Retransmitir una homilía del obispo es apostar a caballo ganador de la indignación. Si no quieres taza, taza y media. Naturalmente en su speech volvió a arremeter con lo que parece es una de sus obsesiones: las relaciones de personas del mismo sexo.
Entre otras cosas dijo: "Yo preguntaba al principio: “¿Quién eres tú? Tú eres hijo de Dios. Has sido creado a imagen y semejanza de Dios y has sido creado como varón y como mujer. Algo que está oscurecido ahora mismo en España. ¡Tantas leyes que han olvidado esto! Que somos en su divinidad cada uno varón, mujer… Que el matrimonio es el camino por el cual se vive la vocación mayoritaria al amor. Y esto está olvidado y las leyes a veces lo ocultan. Tantas leyes en España han sido aprobadas últimamente, que van desmereciendo justo la divinidad de la persona, justo la grandeza del amor, y olvidar la diferencia sexual varón-mujer que es la llamada al amor, donde se puede experimentar esa sed ya compartida en este mundo en un matrimonio que camina hacia la santidad". Por su parte la Asociación de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales de Alcalá de Henares ha declarado su denuncia y oposición a dichas declaraciones, que fueron retransmitidas por La 2. Monseñor tiene todo el derecho del mundo a decir los topicazos que mejor le parezcan ("... en un matrimonio que camina hacia la santidad"), como Hollywood tenía el derecho a producir películas de Doris Day y Rock Hudson, por ejemplo. Ahora bien, que una televisión pública incumpla de entrada la constitucional aconfesionalidad del Estado y que lo haga con un obispo que desune más que une, que irrita más que tranquiliza, no es de recibo.
Como tampoco lo es que el Ayuntamiento de Sevilla dirigido por el alcalde popular Juan Ignacio Zoido, eligiera para protagonizar una campaña cuyo objetivo es potenciar el transporte público al bailaor Juan Manuel Fernández Montoya, Farruquito, condenado por tres delitos al atropellar mortalmente a un peatón en Sevilla, yendo al doble de velocidad de lo permitido, sin permiso de conducción ni el seguro obligatorio y dándose a la fuga a continuación. La Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes DIA manifestó su indignación y pidió la retirada de la campaña, lo que, previsiblemente, no ocurrirá.
En fin, y ya que hablamos de disparates ¿cómo no citar la intervención de Herman Tertsch en la muy pública y comunitaria TeleMadrid?: "El señor Monedero y el señor Iglesias en las condiciones del año 36 me mataría a mí y matarían a mucha gente sin ningún problema. Y si vuelven las condiciones que ellos consideran necesarias para matar a gente, matarían a gente, y matarán a gente si tienen posibilidad, y matar gratis porque están en el poder o porque están cerca del poder o porque el poder les protege, matarán a gente, también, por cuestiones políticas. No me cabe la menor duda". Extraordinaria labor de una televisión que desde el 17,1% de audiencia cuando llegó a la presidencia de la Comunidad Esperanza Aguirre ha conseguido con constancia, despidos, enchufismos y buen hacer alcanzar el 3,8% de esa misma audiencia. Pocas televisiones pueden decir lo mismo.