La felicidad de recomendar libros

Por: | 15 de enero de 2013

Bookdrop
Foto: mtsofan

Soy de los que viven en departamentos alquilados y cada cierto tiempo debo desprenderme de libros de mi biblioteca para darle espacio a mis muebles. Intento no exceder los tres únicos libreros que me he permitido, con libros a doble fila (la doble fila es lamentable); aunque últimamente reconozco que ando algo desbordado, con decenas de libros en el suelo esperando una ubicación (es decir, toca una nueva venta).

Desde mi adolescencia llevo en mis mudanzas dos centenares de libros ajados, clásicos que he ido arrastrando desde la biblioteca de mi padre y de los que no pienso desprenderme. Tengo, además, mis libros favoritos, una radiografía de mi personalidad sintetizada en títulos y lomos. Y luego están las novedades. Los libros que compro cuando viajo, los libros que pido que me traigan cuando alguien viaja, los libros que encuentro en Lima luego de bucear en sus libreros y encontrarme con sorpresas.

Mi biblioteca personal, como la de todos, está llena de anécdotas. La mejor incluye a San Petersburgo de Andréi Biely. Encontré una lista de cinco libros imprescindibles para Vladímir Nabokov, de la cual yo había leído cuatro. Pero jamás había escuchado hablar del tal Biely. Durante muchos años, con verdadera insistencia, busqué San Petersburgo en librerías de Barcelona, Madrid, Buenos Aires, México, Santiago de Chile, Bogotá. Nada. Un día, bajé a la librería del primer piso del centro cultural donde enseño talleres literarios desde hace más de una década. Es una librería pequeña en la que suelo entrar antes de cada clase para echar una rápida mirada sin expectativas. Entonces, en una mesa de saldos, encontré San Petersburgo. No uno sino cinco ejemplares, y a un precio casi simbólico. Ahora es también uno de mis libros favoritos.

Otra anécdota similar ocurrió con Los desaparecidos de Andrew O'Hagan. Me lo recomendó Marcos Giralt Torrente, que le había hecho una reseña. Estaba en Madrid y luego iría a Barcelona. Lo busqué sin éxito en las librerías de ambas ciudades. Finalmente, me convencieron de que no encontraría un libro de relativo éxito, publicado un par de años antes, ni en saldos. Tuve que olvidarme de su existencia. Una semana después, de regreso en Lima, por aquella inercia que me hace meterme siempre en librerías a ver qué pasa, visité al antiguo local de la calle Dasso de la librería El Virrey. En la mesa de novedades, como levitando, me esperaba un ejemplar del libro inhallable.

Esto me lleva al tema de las recomendaciones. De manera indirecta, Rodrigo Fresán, sin duda el mejor creador en castellano de blurbs para los libros que reseña (y que las editoriales suelen coger para sus contratapas o sus tiras), es el principal culpable de que mi biblioteca exceda su continente. Gracias a él he leído libros memorables, y también por culpa de su entusiasmo contagioso he gastado mucho dinero. Dos amigos escritores, el mencionado Marcos Giralt Torrente y Edmundo Paz Soldán, son estupendos recomendando libros. Recuerdo la noche en Lima cuando, visitando una librería, con la aparente indiferencia de un pase en primera, Edmundo me recomendó que compre Amanece la muerte de Jim Crace. Era caro, excedía mi presupuesto, pero igual lo compré. Instantáneamente, se volvió uno de mis favoritos, un libro que solía releer cada año hasta que terminó desapareciendo de mi biblioteca (debo añadir que, más allá de mis ventas organizadas, de vez en cuando los libros se evaporan de mis libreros misteriosamente). Otra recomendación espectacular: en una cena en México, visitando a unos amigos de Mario Bellatin, uno de ellos -director de teatro- me dijo: "Anda a una librería y cómprate un libro que nadie más te va a recomendar: La obediencia nocturna de Juan Vicente Melo". Le hice caso y compré el libro. Fabuloso. Lo he recomendado desde entonces a muchas personas (en una librería de viejo en Medellín encontré varias ediciones y se las hice comprar a todos los presentes. Nunca supe si les había gustado).

¿Cuál es el libro que más he recomendado y regalado en mi vida? Otras tardes, de un escritor peruano casi desconocido llamado Luis Loayza. No dejar pasar oportunidad -como esta- para recomendarlo.

Comprar un libro guiado por el instinto (el título, el dibujo o el color de la carátula, o un blurb preciso como un gancho al mentón) depara más decepciones que sorpresas. Pero las sorpresas se disfrutan el doble. Por ejemplo, en una desangelada feria de libro compré Una princesa en Berlín de Arthur R. G. Solmssen. Eran época de vacas flacas y me lo llevé solo porque era el único que podía pagar y me gustó el dibujo de la carátula. La felicidad que me deparó dura hasta hoy. Extraordinario. El más reciente libro que conseguí por recomendación (esta vez de un lector de Moleskine Literario) es Noches insomnes de Elizabeth Hardwick. Apenas lo mencionó, mi memoria me condujo a un libro pequeño que meses atrás había visto, y pasado por alto, en Sur, una bella librería recién inaugurada en Lima. Demoré varias semanas en comprobar si era ese el libro y sí, era ese, y desde ayer lo tengo conmigo.

Mientras tuve mi programa de TV y desde que creé el blog Moleskine Literario mi objetivo principal ha sido siempre recomendar libros (incluso los que no he leído pero me atraen compulsivamente). Desde el 1 de enero del 2013 inicié un proyecto personal: un blog llamado 365 días de libros. No sé si cumpliré aquello de recomendar un libro al día (me está costando mucho, lo reconozco, y quizá más adelante deba recurrir a amigos) pero sí sé que cuando alguien dice que le gustó un libro que le recomendé, un orgullo mal disimulado aparece en mi cara, lo más parecido que hay a la felicidad.    

Hay 21 Comentarios

Del libro que no os podéis desprender es de A CLAUDIA LE TOCA UN PREMIO, está teniendo un éxito abrumador y es de una lectura exquisita, os invito a que disfrutéis de él. Está en venta en amazon.es y librosinteresantes.es

Un saludo

recomendaros que compréis el nuevo libro que ha salido a la venta y que está siendo todo un éxito, A CLAUDIA LE TOCA UN PREMIO, os dejo los links de ventas
http://librosinteresantes.es/producto/a-claudia-le-toca-un-premio/

http://www.amazon.es/Claudia-premio-Patricia-Ramos-Gonzalez/dp/8415502524/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1373904263&sr=8-1&keywords=a+claudia+le+toca+un+premio

Para el resto de paises amazon.com

Aquí va mi recomendación. Entra, elige uno y a disfrutar: http://porquelloranlas20.blogspot.com.es/2013/04/y-que-le-gusten-los-libros.html?m=1

el programa de tv era realmente interesante ademas de los libros que recomendabas lo que se tejía entorno a el análisis o la conversación sobre el libro recomendado ,creo que de cierta forma nos hacia participar de los libros leídos o de los que algo habíamos escuchado

Edmundo Paz Soldán - La puerta cerrada.

Sencillamente maravilloso

Recomendaría una novela breve de décadas atrás, El niño que enloqueció de amor de Eduardo Barrios. Supongo que muchos chilenos la habrán leído —según supe era parte del programa escolar— pero acaso los demas hispanohablantes no tanto. Pocas novelas me han provocado tanta tristeza y admiración.

Cuando una cosa cuesta mucho encontrarla más gratificante es hallarla.

Gracias Ivan por tus recomendaciones. No sueles fallarme. De momento ya me he conseguido Los desaparecidos, Y amanece la muerte y Una princesa en Berlin en la biblioteca de mi ciudad, y voy a tener un finde grandioso.

Qué gran labor Iván. Me recuerdas al profesor de literatura que menciona el príncipe Kropotkin en sus memorias.

¿donde dice vd. que le recomiendan los muebles para deshacerse de los libros?

Excelente nota y excelentes recomendaciones. Y hablando de recomendaciones, aquí dejo las siguientes... "La Biblia Envenenada" (Barbara Kingsolver), "Impávido Coloso" (Daniel Samper Pizano) y "Una Vez Un Hombre" (José Enrique García)... S@LÜ2

Solo por recordárselo. En las bibliotecas públicas se encuentran muchísimos de esos libros que hace tiempo que volaron de los catálogos de las librerías. Y es que librerías y bibliotecas son entes que se complementan. Luego, aprovechen esos servicios públicos que dicen que no nos podemos permitir y no permitamos que nos los arrebaten.

Leer acá y allá, ver programas de tv sobre libros, hablar con amigos,...son bases importantes para llegar al libro que nunca habrías comprado si no te lo recomiendan. Dicho esto, prefiero ir a la librería y buscar, siempre contando con la premisa de los autores o el tipo de literatura que te gusta.
No me agradan los best

Me has dibujado una sonrisa, has descrito perfectamente lo que se siente al saber que una recomendación proporciona una buena sensación en quien la recibe tras animarse.

Yo también lo intento en mi modesta capacidad a través de mi blog y de manera personal cuando me preguntan.

Un excelente artículo. Un saludo.

Me resulta muy, muy curioso, porque una vez yo también compré Una princesa en Berlín guiada por el instinto.

Las recomendaciones son gratuitas, es una especie de donación así que gracias Ivá,.
A mí, en numerosas ocasiones me cuesta recomendar historias especialmente significativas para mí. Supongo que por miedo a perder la exclusividad, por temor a que conozcan el alma de uno o por simple prudencia.
Desde hace unos meses, sin duda a causa de la multiplicación y muerte de mis neuronas, he decidido compartir la mayoría de mis pasiones con el mundo, más por terapia personal para no caer en la locura cicloniana de "Atrapado en el tiempo" que por solidaridad humana. De esta forma, se pueden leer mis cuentos favoritos en
http://fulgoresliterarios.blogspot.com.es/; y podemos discutirlo y comentarlo, como si de un encuentro literario se tratare. No sé si alguien le puede interesar, pero yo he hecho lo que debía.

Me has dejado tarea. De todos los que aparecen, el único que he leído el La obediencia nocturna. Si los que recomiendas son así de buenos, tengo mucha tarea.

Gracias por el comentario, Cristina. Y sí, serán 365 libros, creo que mi mente está tan agotada de tan solo pensarlo que me quise dar 20 días de vacaciones. Saludos.

Me gustaron muchos libros y autores que descubrí gracias a lo que comentabas sobre ellos en Moleskine, entre otros el de Loayza, que compré por correo en una librería de libros usados. También saqué de la biblioteca el de Solmssen después de leer un post sobre libros que significaban algo personal para ti. Y más: Bufalino, Brodsky, Stamm...


Espero que sean 365 y no 345...

Thanks for sharing superb informations. Your web-site is very cool. I am impressed by the details that you have on this site!

creo entonces que es hora de dejar de alquilar y mudarse a una casa grande con una gran biblioteca, porque uno no puede darse el lujo de desprenderse de los libros que uno tanto quiere http://t.co/qr4xUISc

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Sobre el blog

Este blog se plantea hacer comentarios de actualidad sobre libros, autores y lecturas en menos de 1.000 palabras. Se trata de un blog personal, obsesivamente literario, enfermo de literatosis, como diría JC Onetti, según la regla que la literatura es un vano oficio, pero jamás un oficio en vano.

Sobre el autor

Ivan Thays

Ivan Thays. (Lima, 1968) Autor del libro de cuentos Las fotografías de Frances Farmer y las novelas Escena de caza, El viaje interior, La disciplina de la vanidad, Un lugar llamado Oreja de Perro, Un sueño fugaz y El orden de las cosas. Ganó en el 2001 el Premio Principe Claus. Fue finalista del premio Herralde 2008. Fue considerado dentro del grupo Bogotá39 por el Hay Festival. Sus novelas han sido traducidas al francés, italiano y portugués. Dirigió durante siete años el programa televisivo Vano Oficio. Actualmente administra el comentado blog Moleskine Literario.

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