
La sombra de Ocho apellidos vascos es alargada, y el filón de los tópicos, incombustible (de momento). El tiempo dirá si el público acaba cansándose del humor a la española. Mientras tanto, el cine nacional sigue nutriéndose de la gallina de los huevos de oro que descubrió Emilio Martínez Lázaro. Joaquín Mazón ya ha descubierto por sí mismo el potencial de reírse de los estereotipos patrios. Hasta ahora lo había hecho en televisión codirigiendo la exitosa serie de Antena 3 Allí abajo. El 26 de agosto estrena en la gran pantalla su ópera prima, Cuerpo de élite.
En el filme huye de la comedia estrictamente romántica tal y como si que se da en la ficción, pero, a cambio, explota el mismo planteamiento del humor autonómico disfrazado de gamberrada fílmica.
La historia parte de la base de que en España hay un grupo de operaciones especiales tan secreto que nadie sabe de su existencia: El Cuerpo de Élite autonómico compuesto por cinco agentes. No falta casi nadie. La guardia civil andaluza (María León), el agente de movilidad madrileño (Miki Esparbé), el ertzaina (Andoni Agirregomezkorta), el mosso d´esquadra (Jordi Sánchez) y el legionario (Juan Carlos Aduviri), deberán superar sus diferencias para salvar al país. Antes los españoles no sabían en manos de quién estaba tu seguridad. Ahora preferirán no saberlo. Si te atreves a conocerlos, aquí puedes ver un adelanto.