Un puesto de comida callejero en Copenhague. / Massimo Zen / Corbis
Los martes y miércoles volar cuesta menos. Y en temporada baja, los precios de los billetes suelen descender entre ocho y dos semanas antes de la salida. Comer en la calle puede ser divertido, además de barato. Y dormir en albergues, también. Pistas para pagar menos.