Corrientes, al norte de Argentina, es una tierra rudimentaria y hermosa de horizontes de hierba, inmensos humedales, carreteras sin asfaltar y gauchos a caballo. Preguntarle a un gaucho cuántas vacas tiene se considera allí una impertinencia, algo así como si a ti te dicen que cuánto ganas. Si la curiosidad te puede, has de saber que por una vaca de cuatro años se pagan entre 100 y 140 euros; cuenta con discreción las vacas y multiplica. Foto: Christian Guy / Corbis