El mundo está lleno de maravillas, pero también hay lugares que dan mucho miedo, y no me refiero a las casas encantadas. La primera parada de un viaje por los hitos de la sinrazón humana es un archipiélago famoso, y no por sus “aguas cristalinas”: el Gulag sovietico.
A las afueras de Perm (Rusia), una ciudad de los Urales en la ruta del Transiberiano (el escenario donde se desarrollan Doctor Zhivago, de Pasternak y Las tres hermanas, de Chejov), se conservan los restos del Perm-36, el único campo del Gulag.(en ruso, ГУЛАГ: Главное Управление исправительно-трудовых ЛАГерей, Dirección General de Campos de Trabajo Correctivo) que sigue intacto.
Perm-36 estuvo en activo hasta 1985, cuando Mihail Gorbachov, cuya familia se vio directamente afectada por la política represiva soviética, decidió acabar con este siniestro régimen carcelario por el que pasaron 18 millones de personas. Se conserva, convertido en museo del Gulag, gracias a los esfuerzos de algunos ex prisioneros e historiadores, que empezaron a organizar visitas guiadas y alquilar habitaciones.
La existencia del Gulag.se conoció en Occidente en 1977, con la publicación de la obra de Aleksandr Solzhenitsin Archipiélago Gulag. A partir de nuevos estudios, memorias publicadas tras la caída de la URSS y algunos archivos hasta entonces secretos, la periodista estadounidense Anne Applebaum publicó en 2003 Gulag, donde describe la dureza de la vida en estos campos: las automutilaciones para evitar los trabajos forzados, las bodas entre prisioneros, la vida de las mujeres y los niños.
En el libro, con el que ganó el Premio Pulitzer de 2004, Applebaum sostiene que el Gulag nació no solo por la necesidad de aislar a los enemigos del Partido Comunista, sino para conseguir una masa de trabajadores esclavos en las minas de Kolima o el canal del mar Blanco: entre 1931 y 1933, cien mil prisioneros fueron obligados a trabajar, empleando las herramientas manuales más rudimentarias, en la construcción de un canal de 227 kilómetros entre los mares Blanco y Báltico.
En Perm-36 estuvieron encerrados escritores como Varlam Shalamov (Relatos de Kolima) y el poeta Osip Mandelstam, que firmó su sentencia de muerte con 16 versos satíricos sobre Stalin; lo tituló Kriemliovsky Goriets (El montañés del Kremlin), y es también conocido como Epigrama a Stalin:
Estamos vivos, pero ya no sentimos la tierra que pisamos;
nuestras palabras no se oyen a diez pasos,
pero se necesitan pocas
para describir al montañés del Kremlin.
Sus dedos gruesos, grasientos, como larvas;
y sus palabras tan correctas, tan pesadas, como plomos.
Risueños mostachos de cucaracha
y botas relucientes.
Entre una chusma de burócratas de cuello fino,
él juega con sus favores.
Uno silba, aquel maúlla, otro se queja,
pero solo él decide, y señala con el dedo,
firmando sentencia tras sentencia, como quien forja herraduras:
a uno en la ingle, al otro en la frente, o en la sien, o en el ojo.
Para él, cada muerte es como una golosina,
y caben muchas en su ancho torso de osetio.
(Noviembre de 1933)
La traducción es mía, es posible que tenga errores, así que dejo también la versión original en ruso, por si alguien se anima.
Кремлёвский горец
Мы живём, под собою не чуя страны,
наши речи за десять яагов не слышны,
а где хватит на полразговорца,
там припомнят кремлёвского горца.
Его толстые пальцы, как черви, жирны,
а слова, как пудовые гири, верны.
Тараканьи смеются усища,
и сияют его голенища.
А вокруг него сброд тонкошеих вождей,
он играет услугами полулюдей.
Кто свистит, кто мяучит, кто хнычет,
он один лишь бабачит и тычет,
как подкову, кует за указом указ:
кому в пах, кому в лоб, кому в бровь, кому в глаз.
Что ни казнь у него – то малина
и широкая грудь осетина.
Ноябрь 1933
Debajo se puede ver una de estas sentencias, de 1940.
En ella, Stalin rubrica con un lacónico “за”, adelante, en ruso,una solicitud de Beria, el jefe de la temida policía secreta NKVD, antecesora del KGB, para ejecutar a 346 “enemigos del Partido Comunista y los dirigentes de la Unión Soviética”; el número 12 de la lista es el escritor judío Isaak Bábel, autor de Caballería Roja, un libro de relatos publicado por Galaxia Gutenberg, con traducción de Ricardo San Vicente.
Vorkuta, una ciudad construida por trabajadores del gulag en la tundra ártica, busca en el turismo extremo una solución al cierre de sus minas de carbón, el recurso que provocó el trabajo forzado de dos millones de prisioneros desde la década de 1930, cuando en Vorkuta y sus alrededores se contaban hasta 132 campos de trabajos.
En un artículo sobre Vorkuta publicado en The New York Times, su alcalde, Igor L. Shpektor, declaraba su deseo de construir un parque temático sobre el Gulag, donde los turistas podrían comer sopa de remolacha y dormir en barracones de madera rodeados de alambre de espino. "Les daremos la oportunidad de escapar. Los vigilantes les dispararán (con bolas de pintura, naturalmente, no con balas)”. La idea, con la que pretendía hacer frente a la crísis tras el cierre de las minas de carbón, levantó ampollas entre los supervivientes de los campos.
En ellos estuvieron cautivos varios estadounidenses, prisioneros de la guerra de Corea o espías de la Guerra Fría, como Homer H. Cox (en la foto de abajo), en quien está basado Alex Mason el protagonista de Call of Duty: Black Ops, un videojuego lanzado en 2010 y ambientado en parte en Vorkuta.
Hay 9 Comentarios
Cuando lei Archipielago Gulag , se me puso la carne de gallina imaginando esa red de campos de concentracion y esclavitud.
no comento mas, solo leedlo, ya que es un testimonio de veracidad incalculable
Publicado por: Jesus | 26/08/2015 12:34:28
Confundir la velocidad con el tocino es lo mismo que confundir el cristianismo con la diabólica "santa" inquisición. Todos los traficantes de conciencia han hecho siempre lo mismo... Creen que los pueblos son simples borregos. ¿Qué tiene que ver Stalin con el comunismo, o Hitler con lo nacional y lo socialista?. ¡NADA¡ Usar las ideas como etiquetas políticas es un juego asqueroso. Grandes imperios se disfrazan de democráticos y explotan y saquean a los pueblos del llamado Tercer Mundo. En fin, nada nuevo bajo el Sol.
Publicado por: RAMÓN | 24/08/2015 12:19:34
Buen artículo, muy bien documentado, ahora los horrores se han mudado a medio oriente.
Publicado por: Fernando Martín Royo | 23/10/2014 21:06:52
@Juan Courville, por lo visto las escuelas nocturnas en tu pais no sirven para nada. Esfuerzate un poco y quizas un dia puedas escribir un comentario decente.
Estas estupideces que escribes corresponde a un epoca que vivieron nuestros padres y ahora solo existe en la imaginacion de despistados y paranoicos como tu.
Publicado por: Mixuil | 22/12/2013 4:03:54
Magnífico artículo Isidoro.
¿Sería posible hablar con usted para profundizar en el tema? Si es así, puede ponerse en contacto conmigo en jorge_bm90@hotmail.com
Muchas gracias.
Publicado por: Jorge Ballesteros | 26/11/2013 2:41:03
No pone "da" = "sí", sino "za" = "adelante"
Publicado por: Alberto | 28/11/2011 15:16:25
Que es eso, un elogio a la locura!
Publicado por: Marcio Torres | 28/11/2011 15:07:56
El haber tenido prisioneros los sovieticos de Stalin a soldados norteamericanos de la guerra de Corea despues de 1950 sin haber estado en guerra declarada esos dos gobiernos, a demostrado que los Norcoreanos solo eran parte de un complot internacional de los sovieticos en donde habia un titiritero que controlaba a los titeres coreanos y a los fenecidos gobiernos de la Europa del este. Caso igual sucede en la actualidad con los nicas de Ortega, el Chavez de Venezuela, Los Castro, Los Vascos de Eta, Los paises Africanos y todos los demas gobiernos y grupos izquierdistas, los sindicatos de trabajadores de los paises de America Latina, los grupos universitarios que estuvieron y siguen en esa linea. Deberiamos preguntarnos, quien es el titiritero que actualmente controla las marionetas comunistas, porque desde mi punto de vista, debe de existir un grupo muy bien escondido que hala los hilos. La caida de la cortina de hierro y de la Union Sovietica no significo la desaparicion de esta sociedad secreta, me parece que solo cambiaron de tolda por mejores intereses economicos. Creo que deberia ser tema de estudio o de un libro. A lo mejor nos encontramos a las momias de Lenin y a Stalin todavia sentados en la junta directiva dando ordenes. Da verguenza ver a estos grupos ondeando banderas rojas (que significa sangre) con la guadaña y el martillo engañando a esa juventud que no lee y no analiza lo que realmente eso significa. Esclavitud y muerte
Publicado por: Juan Courville | 28/11/2011 14:43:39
Magnífico artículo
Publicado por: deiphob | 28/11/2011 13:42:52