La Amazonia brasileña continúa siendo la manzana de la discordia. Hay quién la querría inviolable como un santuario y quién considera que lo más importante es el desarrollo económico de aquella región con 24,4 millones de habitantes, la mitad de la población española y con una superficie de 5.217.423 kilómetros cuadrados, casi diez veces España. Entre ambos extremos están los que sueñan con el llamado “desarrollo sustentable”. ?Quién ganará la batalla?
El gobierno Rousseff y el sector privado van a dedicar 212.000 millones de reales ( unos 100.000 millones de euros) para un nuevo ciclo de desarrollo de la llamada Amazonia Legal, un término más político que geográfico, creado por el expresidente Getulio Vargas para ayudar al desarrollo de ocho Estados del país (Amazonia, Acre, Amapá, Mato Grosso, Pará, Rondonia, Roraima, Tocantins y parte de Maranhão) que abarcan el 62% del territorio nacional y que viven dentro y alrededor de la selva.
La idea es convertir la Amazonia en el corazón de la producción energética del pais, en el momento en que Brasil está llamado a crecer y no podría hacerlo sin aumentar sus fuentes de energía. De ahí que las mayores hidroeléctricas- muchas de ellas como la de Belo Monte objeto de polémica interna y externa- estarán enclavadas en la Amazonia que deberá ser atravesada por nuevas autopistas y nuevas líneas ferroviarias..
Si hoy la Amazonia participa con el 10% de la energía nacional, pasará en 10 años a un 23%, convirtiéndose en uno de los motores del crecimiento económico del gigante americano. ¿Con qué consecuencias¿ Esa es la polémica que divide al país y que moviliza a los ecologistas e instituciones ambientales del mundo ya que, como escribió este diario en un editorial “La Amazonia es de todos”. No en el sentido de soberanía, porque la Amazonia sólo puede ser de Brasil, sino por las repercusiones que tendría en el Planeta la destrucción de la mayor selva virgen del mundo y de la mayor biodiversidad, sin contar que en ella corre el 23% del agua potable de la Tierra.
En los últimos años, ya han sido destruidos 719.000 kilómetros cuadrados de la Amazonia a pesar de los esfuerzos del gobierno para atajar esa hemorragia que en mayo pasado aumentó 120 veces la del año anterior. Las causas de esa hemorragia tienen nombre bien conocidos: ganadería, cultivo de soja, tráfico de madera de ley ( 40 millones de metros cúbicos por año), impunidad permitida por los gobiernos locales a cambio de votos y de financiación ilegal para los partidos, saqueo hasta internacional de la mayor biodiversidad del Planeta con 438.000 especies de plantas de interés económico y social y las especies más preciosas de mamíferos y aves de la Tierra.
A ello hay que añadir el tráfico de drogas internacional -que aumenta cada vez más en la región y que según los analistas mantiene una relación directa con la violencia en las favelas de Rio de Janeiro y Sâo Paulo y supone un camino cada vez más frecuente para la droga que llega de Boliva y Perú. Junto con ello hay que rcordar la pobreza de sus habitantes y los problemas de las comunidades de indígenas que en Brasil son unos 600.000 y que quando llegaron españoles y portugueses, eran cinco millones.
Esa Amazonia, manzana de la discordia, sigue siendo uno de los grandes desafios de Brasil, uno de los mayores exportadores de alimentos del mundo. El gobierno Rousseff tendrá que equilibrarse en la difícil equación entre desarrollo económico y defensa de un patrimonio natural que según los pesimistas podría convertirse en un nuevo desierto. ¿Con qué consecuencias para todos¿
El expresidente Lula da Silva suele sin embargo criticar lo que él considera la hipocresía de los europeos que se preocupan de la destrucción de la selva amazónica y del efecto estufa, cuando ellos han destruido proporcionalmente mucho más en favor de la especulación edilícia. ¿Darle o no razón si es verdad que a pesar de todo, las selvas intactas de Brasil equivalen a la mitad de lo que queda de selva virgen en el mundo, mientras que la ocupación del territorio para las ciudades es del 0,2% del territorio? La polémica está servida.
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Hay 8 Comentarios
Gracias Ramón por su comentario sobre la Amazonia en mi blog.Comparto totalmente su opinión y me siento honrado siempre con lectores inteligentes en mi blog.
Un abrazo
Juan Arias
To: [email protected]
Publicado por: Juan Arias | 20/10/2011 13:08:00
Gracias Manuel por su comentrio inteligente e irónico en mi blog sobre la Amazonia. Tiene toda la razón: es in creible que quieran hacer crecer el pais cortando árboles. Pero un cierto capitalismo selvaje es así.
Me swiento honrado de tenerlo como lector de mi blog.
Un abrazo
Juan Arias
To: [email protected]
Publicado por: Juan Arias | 20/10/2011 13:05:29
Gracias Paulopor su comentario en mi blog sobre el tema de la Amazonia. Tiene toda la razón del mundo. Soy un gran admirador del trabajo que hace Greenpeace, que considero una institución seria y con coraje.
Me siento homnrado de tenerlo como lector inteligente de mi blog
Un abrazo
Juan Arias
To: [email protected]
Publicado por: Juan Arias | 20/10/2011 13:02:15
Gracias Wellington por su comen tario inteligente y agudo.
Un gran abrazo
JuanArias
To: [email protected]
Publicado por: Juan Arias | 20/10/2011 12:58:22
El terrible, insostenible cuadro mundial no lo dibujó Brasil, ni mucho menos. Descubierto por las potencias dominantes de aquél tiempo, heredó todos los males de su alderedor. Hoy tiene la desgracia de todavía despiertar intereses económicos que pueden ser su perdición.
Por mucho menos se sabe lo que sucedió a Irak.
Publicado por: wellington ambrosio | 19/10/2011 23:06:41
Yo soy brasileño y mucho me preocupa la situación de Amazonia. Trabajé un tiempo por el Greenpeace y ellos me dijeron que en Manaus, capital de la Amazonia, ellos no pueden hacer ninguna manifestación porque hay riesgo de muerte. El ESTADO necesita tener más fuerza!
Publicado por: Paulo | 19/10/2011 22:13:22
No pasa nada, la destrucción de la Amazonia nosotros no la vamos a ver ... por que es el pulmón de la Tierra y no quedaría ser orgánico vivo para presenciarlo si ocurriera.
De risa me parece que la única forma que vean de hacer crecer su economía sea talando árboles.
Publicado por: Manuel | 19/10/2011 21:16:01
Pregunto: ¿por qué no se convierten los grandes valles del Rin, del Missisipi, del Danubio, del Indo, y de otros grandes ríos de la geografía del Planeta, en áreas de reforestación? Ya se le ve el plumero a los grandes intereses imperiales de Occidente que quieren evitar a toda costa que Brasil sea una futura potencia económica a escala mundial.
Publicado por: RAMÓN | 19/10/2011 20:26:35