Juan Arias

Todo empezó con el fuego, hace un millón de años

Por: | 04 de abril de 2012

Caverna de Winderwerk en África del SurCaverna de Winderwerk en África del Sur

Cada día nos sorprenden con nuevos descubrimientos científicos. Ahora un equipo dirigido por el arqueólogo, Francisco Berna, de la Universidad de Boston, en los EEUU, ha descubierto que el fuego para cocinar existía ya hace un millón de años en la caverna Wonderwerk, en África del Sur. Se trataba aún del HOMO erectus, antes del Homo sapiens.

Francesco BernaArqueólogo, Francesco Berna

Los arqueólogos han hallado restos de hogueras hechas con ramas, hojas y restos de huesos, lo que indica que usaban el fuego ya para cocinar. Y es sabido que la habilidad para usar y controlar el fuego fue crucial para la evolución como explican los autores de la revista científica PNAS.

Quién mejor ha teorizado la importancia del fuego para la evolución ha sido Richard Wrangham, de la Universidad de Harvard, autor del famoso libro "Cómo cocinar nos hizo humanos", en el que defiende que la posibilidad de cocer los alimentos fue un paso trascendental en la evolución.

Se podría decir que nuestra civilización humana comenzó con el fuego
, ya que trajo un plus de energía y ayudó al crecimiento del cerebro. Y es justamente el aumento de la masa cerebral lo que distnguió al hombre primitivo del Homo sapiens y lo que nos sigue diferenciando intelectualmente del resto de los seres vivos.

Vivo en Brasil, donde hay aún miles de familias pobres, en el campo, donde no pudiendo pagar el gas, siguen usando el fuego para cocinar como el Homo erectus de hace un millón de años. Y otros, como mi mujer, la poeta Roseana Murray , que cocinan aún muchas veces por gusto, en una cocina minera, con leña. El fuego le evoca a ella  la poesía con sabor a eternidad. "Cuando contemplo el fuego, me siento hija de la Tierra", suele decirme.

Hace unos años, mi sobrino Guillermo, vino de Granada a pasar unos días en la montaña con nosotros. Allí aún no había luz, ni telefóno, ni tele, ni radio. Por las tardes nos sentábamos a contemplar el milagro del fuego en la chimenea, a escuchar el crepitar de la leña que se iba consumiendo para convertirse en luz y brasas. Guillermo interrumpió aquel silencio y exclamó: "!Pero qué mejor televisión que esta!". Tenía razón.

Fuego de un millon de años
Cuando me encuentro con la  noticia sobre los cuatro elementos más primitivos de nuestra Tierra
, me acuerdo siempre de algo genial escrito por nuestro Gustavo Martin Garzo. Dice el famoso escritor español, que todas las cosas pueden producir efectos opuestos. El agua sirve para nuestra sobrevivencia ya que sin agua pereceríamos y sirve para nuestra destrucción. En ella podemos ahogarnos, o desbordada puede destruir nuestras casas.

Lo mismo ocurre con esa maravilla del fuego,  tan cantada por todos los poetas del mundo. Sirve para calentarnos, para poder disfrutar de nuestra gastronomía, para destruir nuestros despojos, para crear maravillosas obras de arte como los vidrios de Venecia, y también para destruir nuestras florestas.

Vivo en Brasil donde cada año más de 20.000 incendios, la mayoría dolosos, se van comiendo la selva Amazónica, pulmón del Planeta. He encontrado un  texto desgarrado que dice así:

"Por qué te queman, Brasil, si en cada uno de tus rincones existe un paraiso. Duele ver a Brasil convertirse en un gran brasero como si fuera el fin del mundo".Pão Brasil

Curiosamente, el nombre de Brasil podría estar ligado al fuego. Nadie sabe a ciencia cierta el origen de este nombre. El más cercano estaría originado por el árbol de la  Mata Atlántica, llamado,  "Pau Brasil", que era una de las plantas más abundantes cuando llegaron aquí portugueses y españoles.

Una posibilidad sobre el origen del nombre Brasil, podría ser que ese árbol, hoy en extinción y por ello protegido, además de servir para producir una tinta roja muy estimada, hace una "brasa" muy buena, por lo que los españoles y portugueses  usarían su madera para nuestros típicos "braseros". Y de ahí habría nacido el nombre de Brasil, es decir de brasa, de fuego.

Estamos en Semana Santa. Los que pueden aprovechan estos días para un justo descanso. Por eso, yo quiero hoy , en este blog ver al fuego sólo como milagro de vida, no como fiero destructor de la Naturaleza. El fuego, símbolo del amor y de la pasión, del abrigo, del olor poético a leña quemada y de las perolas hirviendo al fuego, símbolo de abundancia y de antídoto contra el frio del hambre.

Javier RayaJavier Raya

Por eso, y porque el fuego está unido entrañablemente a la poesía, he querido reproducir unos versos preciosos sobre el fuego, del poeta mexicano, Javier Raya.

Hay conversaciones, cantos en el fuego:
un incendio es una catedral rezando.
Toda llama es una oración encendida.

Deja  una flor en el agua y muere.
Déjala en el fuego y la verás encendida.

El fuego es una lluvia con alas.
La lluvia un incendio que se desploma.

Una flor es un fuego que disimula

El fuego y los gatos viven en paz con su sombra.

El libro del hombre se escribe con letras,
el del fuego con sombras

Pretender la fotografía del fuego, es ingenuo como la oración,.
Pero en uno y otro lado se vislumbra
el perímetro de lo infinito.

Una  gota de fuego cura la oscuridad.

Los poemas y las llamas no se buscan,
se encuentran.

NOTA DEL BLOGUERO

Con estos versos maravillosos, ESTE BLOG Y SU AUTOR SE VAN DE SEMANA SANTA, a no ser que surja alguna noticia extraordinaria.

Deseo, agradecido, a todos mis lectores, unas vacaciones muy felices. Y un consejo: Dediquen algunos minutos cada día a leer poesía. Ella ensancha el alma y purifica el cuerpo. Y nos hace soñar, que buena falta nos hace a todos, en un mundo a veces  tan cruel e injusto con millones de seres humanos, nuestros semejantes.

Fuego en el árbolFuego de otoño

Hay 9 Comentarios

que estupidez yo necesito la repuesta no pendejadas sobre su vida necesito saber porque el fuego fue de gran importancia para en hombre primitivo y ya no si investigo otra joda etc,

Si de poesía vamos, del arbol de Brasil leyendo, mejor que recite, a Lope de Vega, cuyo fuego versolario es el amor,,,del Brasil eterno....."Amor poderoso en cielo y en tierra/ dulcifica guerra de aquestos sentidos/ tu Impero sujeta/.......usurpas los años/........tan bárbaro eres/.....huid sus engaños/sus vanos favores/ oh locos amantes/........."

Gracias, Diná por su delicado acróstico. Me ha emocionado también la coincindencia de haber reencontrado al querido Messias después de tantos años. Son los milagros de la comunicación global.
Quizás escriba algo en mi b log sobre esta historia.
le avisaré
Feicísima Pascia de Resurrección


To: [email protected]

Juan,
En este sencillo expreso Acróstico
mi comprensión de la Pascua.

Semana Santa
(Acróstico)

P ara el creyente cristiano y apasionado

La fe sigue siendo la fuerza de la vida que se mueve.

S alveolar salvar a estos hermanos que creen en la resurrección

C omprometidos con la enseñanza de Jesucristo.

El corazón sin Dios es como un arca de piedra ... Indiferente a todo!


Para mí, su hermano, compartir el pan, vivir en armonía!

Dinah F.O. Souza


Les deseo una bendita Viernes Santo

Abrazo


Usted, querido Wellington ya conoce mi opinión sobre los animales. A veces me averguenzo porque me parece que les amo más a ellos que a los humanos, tan cruelespor puro capricho. Es cierto que la poesía nos redime de tanta brutalidad. Los animales no necesitan de ese antíddoto contra la violencia porque ellos son ya un poema. En este momento estoy viendo en una plata de mi jardin a un colibrí beber el nectar de una flor yla escena es una poesía viva.
Que pase una Pascua de Resurrección feliz, laica o religiosa, poco importa.

To: [email protected]

Gracias, Felizísima, por postar ese maravilloso poema de Drumond en español para mis lectores. Es uno de los que más me gustan del gran poeta brasileño.
Feliz Pascua de Resurrección.


To: [email protected]

EN MEDIO DEL CAMINO


En medio del camino había una piedra


había una piedra en medio del camino


había una piedra


en medio del camino había una piedra.


Nunca olvidaré ese hecho


en la vida de mis retinas fatigadas.


nunca olvidaré que en medio del camino


había una piedra


había una piedra en medio del camino


en medio del camino había una piedra.


Carlos Drumond de Andrade
(Itabira, 1902 - Río de Janeiro, 1987)

Estimado Señor Arias, gracias por los buenos deseos hacia nosotros sus lectores. De mi parte, espero que Usted tenga una feliz Semana Santa.
Lo que dice su post de hoy me hace pensar si tenemos alguna ventaja sobre los animales que imaginamos inferiores a nosotros humanos: ¿somos nosotros realmente "sapiens" ? La noticia de que se pegó un tiro un anciano griego, jubilado y endeudado, mientras su País se gasta lo que le hace falta con armas para pelearse con Turquia - que las venden Francia y Alemania - me hacen pensar que somos nosotros la verguenza de la Creación y, por encima, nos imaginamos perfectos, casi dioses.
Pero siempre hay la Poesía, que reconforta.

Mais uma coisa em comum entre Brasil e Galiza. Saravá!

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Sobre el autor

es periodista y escritor traducido en diez idiomas. Fue corresponsal de EL PAIS 18 años en Italia y en el Vaticano, director de BABELIA y Ombudsman del diario. Recibió en Italia el premio a la Cultura del Gobierno. En España fue condecorado con la Cruz al Mérito Civil por el rey Juan Carlos por el conjunto de su obra. Desde hace 12 años informa desde Brasil para este diario donde colabora tambien en la sección de Opinión.

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