Apple es la compañía más valorada de Wall Street. Y por el precio de la acción, Google se paga más cara. Las dos son referentes de la nueva economía. Pero ninguna forma parte del índice Dow Jones y ese es uno de los argumentos que se utilizan para cuestionar su validez como termómetro de la economía real. Parece que eso va a cambiar, según la revista Barron´s. Una de las dos firmas de Silicon Valley -o ambas- podrían entrar en breve en ese club restringido a 30 grandes corporaciones, a costa de que salga algún gigante de la vieja era industrial, como el productor de aluminio Alcoa.
La renovación podría llegar el año próximo, de acuerdo con la última edición de la publicación hermana de The Wall Street Journal. Pero no hay fecha fija para que los editores del Dow Jones decidan los cambios. No se trata tanto de decidir las empresas que entran. Lo complicado es elegir las que salen con el cambio de este grupo de élite. En ese caso se barajan los nombres de Bank of America, la segunda mayor firma financiera de EE UU por activos, y la electrónica Hewlett-Packard, el mayor fabricante de ordenadores personales. El último ajuste se hizo hace tres años.
El Dow Jones necesita un enjuague para seguir siendo referente en el mercado bursátil global, frente a otros índices más precisos como el Standard & Poor´s o el de la propia Nasdaq, la plataforma bursátil donde cotizan las dos aspirantes. Pero los guardianes del índice de referencia de Wall Street deben medir bien lo que hacen, porque la integración de Apple o de Google no es tan simple por el peso que tendrían. Al precio actual, la firma de Cupertino representaría el 26% del Dow Jones, el doble que IBM. Hasta el conglomerado General Electric quedaría completamente marginado.