Las autoridades locales y regionales son un puente crucial entre las agendas globales y los temas que nos afectan día a día
(*) Por Emilia Saiz
Podríamos decir que las agendas que se adoptan por los estados en las Naciones Unidas parecen un espejismo, una imagen lejana y poco real de los retos a los que nos enfrentamos día a día tales como los atascos, los conflictos entre lo privado y lo público, la calidad de nuestro empleo o la educación, las transformaciones de barrios de toda la vida en lugares con la convivencia de nuevas culturas. Sin embargo, nada es tan lejano de nuestras ciudades como parece y es por eso que nuestros alcaldes y alcaldesas, nuestros concejales y concejalas, deberían poder participar en las decisiones que se toman en las lejanas sedes de la ONU, del Banco Mundial o de las instituciones de Bruselas.
Nuestros líderes locales se dieron cuenta de esto hace mucho tiempo. Supieron que los retos eran demasiado grandes para afrontarlos solos y por ello, crearon la primera organización internacional en 1913. Mucho antes de que se fundaran las mismas Naciones Unidas. La heredera de este movimiento que surge hace más de 100 años es la Organización Mundial de Ciudades y Gobiernos Locales Unidos -CGLU, que tiene sede en Barcelona. Desde esta organización se sigue luchando todos los días para que las decisiones globales se basen en realidades locales y para que las experiencias y expectativas ciudadanas se tengan en cuenta en el ámbito internacional.
Por qué no crear agendas conjuntas que incorporen la realidad del terreno
En un mundo interconectado como el actual es fácil explicar por qué la agenda internacional de desarrollo sostenible afecta directamente a la agenda del pleno del ayuntamiento de una metrópolis, una ciudad intermedia, región o un pequeño municipio. El cambio de paradigma implica que ya no hay decisiones globales que se aplican al nivel local, sino que el nivel local influye y modela lo global. Mientras que durante la Cumbre de Río+20, nuestras redes clamaban por agendas globales y acciones locales, hoy en día solicitamos agendas conjuntas desde nuevos criterios de gobernanza.